arrow

140 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
9
Olvídelo, esto es cine negro en estado puro.
Chinatown es oscura, impetuosa, elegante, cautivadora, digna, autosuficiente. No es un homenaje ni un simple tributo a los grandes clásicos de los años cuarenta y cincuenta. Se homenajea a sí misma, establece sus propios códigos y transgrede los ya preestablecidos. No es "El Halcón Maltés", no es "El Sueño Eterno", no es "Perdición". Pero nunca pretendió serlo y por ello nunca vivió a la sombra de aquellos mitos. Y dirán los críticos más intransigentes que, superados los años cincuenta, ya ninguna película podría volver a ser catalogada dentro del género. Que hablar de un film noir rodado a color es tan absurdo como contradictorio.

Pero, ¿acaso no se dan cuentan de que el 'toque noir' no lo da el blanco y negro, ni tampoco los años que pesen sobre la cinta, sino esa ambientación única que sólo algunos genios saben otorgar a sus películas para convertirlas en iconos del género? ¿No notan esa esencia del cine negro más genuino emanando por cada fotograma de esta película, con esa atmósfera constantemente contaminada por un halo de corrupción, pesimismo y fatalidad?

¿No les arrebata ese cinismo del que se vale Jake Gittes, esa ironía innegable que lo define y lo caracteriza como uno de los detectives privados más carismáticos que ha dado nunca el celuloide? ¿No sienten que Evelyn Mulwray es la más atractiva femme fatale de los últimos tiempos, por inspirar a todo el que la contempla una sensualidad y una tristeza indefinibles? ¿No advierten que sólo Polanski fue capaz de usar su increíble talento para crear una atmósfera de indecible amargura, regalándonos uno de los finales más emblemáticos de la historia del cine y elevando esta obra maestra a la categoría de mito?

Si no se han dado cuenta a estas alturas, olvídenlo. Esto es Chinatown: cine negro en estado puro, servido con mano maestra; cine negro, pese a quien pese, en todo su gran esplendor.
[Leer más +]
208 de 232 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
As little as possible (Haz tan poco como te sea posible)
Poco queda por añadir a las ya atinadas opiniones de mi compañeros. Simplemente apuntaré alguna apreciación personal a lo ya comentado.

Sobre si la película responde al género negro o no, creo que cabría matizar. Si tomamos en consideración la estética tópica del género (el blanco y negro, la base literaria llena de personajes planos), nos daremos cuenta de que es una reelaboración contemporánea de sus premisas, con mucho de diálogo intertextual. No aspira a ser una resurrección de los viejos moldes. Existe una muy visible visión setentera de lo que es el detective privado, una clara inversión del rol de mujer fatal y un mensaje final con un cierto trasfondo político e ideológico.

En el Los Angeles de los años 30, se refleja la corrupción americana de los 70. Hablamos de los Estados Unidos que desolan Vietnam, de la época en que se destapa el Watergate, en que la Operación Cóndor arrasa con los sueños democráticos de Chile. La fecha en que se crean las Torres Gemelas y en que comienza a crecer con fuerza el conflicto en Oriente Medio. Lo que en Chinatown es el agua, hoy día es el petróleo. Y esto hace del film algo muy actual.

Viviendo en Los Angeles, se me hace que Polanski hace consciente o inconscientemente una transferencia de la corrupción de los setenta en el marco siempre idealizado de los años 30. Por decirlo de algún modo, va a la fuente de la corrupción que le era contemporánea.

Esta ciudad hoy día de casitas unifamiliares, entonces era un desierto de facto, un páramo desconcertante que aunaba chalés, estrellas, valles y arenales, un paraíso ficticio hecho a la medida de los dandys y capitalistas sin escrúpulos. El monstruo, el laberinto sin resolución, que es hoy esta ciudad proviene de esa frase de Huston: "Haremos que el agua vaya a los valles y los vallen vayan a Los Angeles". Dicho y hecho. No fue la ciudad, la civilización, la que fue al encuentro de los valles, fueron los valles los que se tragaron a mordiscos una ciudad desmembrada. La ciudad del sueño americano, la cuna de la artificalidad, se convirtió en una ciudad sin personalidad, cosida a base de pegar intereses particulares.

No es casual que LA sea la metáfora del caos en muchas de las grandes películas (desde Chinatown hasta Terminator). No es casual que Polanski resuelva su ficción de una manera nueva.

El personaje de Huston eran los Estados Unidos. Y su ambición resonaba en Chile y en Vietnam.
(Sigue en Spoiler)
[Leer más +]
148 de 155 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
La esencia negra
Los homenajes dedicados al cine negro suelen ser cuidadísimos ejercicios que incluyen las constantes del género (asesinatos, pasiones, corrupciones...) y que recrean muy bien los años cuarenta o cincuenta, supongo que para dar más credibilidad al film. Ahora bien, a mí no me encandilan porque suelen estar faltos de alma, superficialmente son impecables pero les falta la fatalidad de la buena, el pesimismo y la tristeza de este gran género. Por eso, yo no considero a "Chinatown" un homenaje, porque no intenta emular aquel cine, ya que es ese cine, está hecho con la misma pasta que aquél.

Quizá la razón de que "Chinatown" sea una excelente prolongación del cine negro sea la dirección del genial Polanski, porque si hay algo este hombre sabe plasmar son atmósferas, y para mí sin duda esa es la esencia del género. Aunque las atmósferas que Polanski ha clavado sean las de terror, ha sabido encontrar la necesaria para esta película dándole una entidad que no sólo iguala a grandes clásicos negros, sino que los supera.

La historia es tópica, como debe ser: un detective se ve envuelto en un turbio caso de asesinatos, corrupción, pasiones, etc. Jack Nicholson está impecable, pero sin duda se ve eclipsado por la vampiresa encarnada por Faye Dunaway, que está fabulosa, con esa mirada y ese sentido del erotismo que desprende. También aparece el gran John Huston, en una interpretación excelente.

Todo lo que envuelve a "Chinatown" está hecho con inteligencia y coherencia, llegando casi a la fascinación. Sin embargo, a la hora de compararla con títulos de oro del género como "Retorno al pasado" o "Sed de mal", "Chinatown" aguanta sobradamente el tipo, pero no llega a las inigualables cotas de tristeza y fatalidad que emanaban esos fims, aunque la escena final es una de las más desoladoras que ha brindado el cine negro. Una película brillante.
[Leer más +]
119 de 139 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
El factor oculto
“Chinatown” constituye un brillante ejercicio de cine negro, eso salta a la vista, pero le falta algo... Recapitulemos. El guión es potencialmente interesante y mantiene la atención del espectador en todo momento; las interpretaciones de Jack Nicholson y Faye Dunaway, sin resultar excelsas, se me antojan óptimas, proyectando sus estereotipos con solvencia contrastada; Polanski rueda con su lucidez y pericia habituales pero... no sé, presumo que algún elemento desconocido obstaculiza perniciosamente la peli e impide su consagración definitiva. Tal vez esperaba más atmósfera (que la tiene) y tal vez acabe aburriéndome tanto episodio especulativo... Supongo que me habrán traicionado las expectativas depositadas en tan renombrado título. Reitero que ese factor oculto es el que ha abortado mi comunión total con “Chinatown”, aunque ello no ensombrece, sin embargo, la indeleble impronta que nos regalan secuencias memorables, como la célebre muesca con la que Polanski adorna el apéndice nasal de Gittes, la fugaz pero poderosa intervención de un viejo dinosaurio como Huston o el gélido final con el que Roman rubrica su obra. Confiaba en darle un 8 o un 9, pero mi humilde criterio me impide otorgarle más de un 7. Que no es poco.
[Leer más +]
84 de 114 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Los Ángeles, años 30.
Envolvente película de Polanski, con un fatalista guión de enorme precisión, que define personajes y situaciones recurriendo a la economía y rigor visual como recurso fundamental para no embrollarse en exceso, habida cuenta de la compleja estructura de tramas y subtramas que sostienen el metraje.

El polaco, de esta forma, adapta su estilo a esta historia negrísima (de ambiciones, traumas personales y tramas políticas) con un estilo claro, de movimientos nítidos de cámara que parecen desplazarse por el sudor del bochorno californiano, manoseando los rostros y las arrugas del algodón de los trajes. Y esto es definitivo a la hora de, comparando este film con otros trabajos de Polanski, destacar una vez más su versatilidad.

La elección de los actores es algo fundamental. Nicholson configura una perfecta recuperación del detective negro típico, con su clásico blindaje de individualismo cínico, aderezado en esta ocasión con un tratamiento más oscuro de la ambición y el romanticismo para conformar así un personaje poco esquemático en un intento, ejecutado con éxito, de actualizar este tipo de personalidades al cine de los años 70 (más verosímil en el planteamiento y resolución de tramas que los Sam Spade de Bogart). La Dunaway está para enmarcar, encaja a la perfección en un personaje que, además de apuntar su maltrecho estado psicológico a través de su fisonomía, nos traslada a una época simplemente con un primer plano de su boca o pelo.

Por lo demás, la película supone una estupenda recuperación de los clichés básicos: la amargura, las palizas, el laberíntico juego de diálogos e intereses cruzados, el carmín de los labios y los recuerdos del barrio chino. Todo ello conforma un contexto en el que, reconociendo los referentes clásicos, encontramos una visión que indaga en nosotros mismos.
[Leer más +]
60 de 67 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Compleja investigación
Film realizado por Roman Polanski. El guión de Robert Towne se inspira parcialmente en hechos relacionados con la "Guerra del agua de California" (principios del XX). Se rueda en exteriores y escenarios reales de LA y otras localidades de CA (Crescent Bay, Pasadena...) y en Paramount Studios, con un presupuesto estimado de 6 M dólares. Nominado a 11 Oscar, gana uno (guión original). Producido por Robert Evans, se estrena el 20-VI-1974 (EEUU).

La acción principal tiene lugar en LA, en 1937. El detective privado J.J. "Jake" Gittes (Nicholson) es contratado por una mujer que dice ser Evelyn Mulwray para que investigue la vida sentimental de su marido, el ingeniero Hollis Mulwray (Zwerling). La investigación le lleva a enfrentarse a un caso complejo de pasiones, ambiciones, corrupción y asesinatos.

El film suma los géneros de crimen, misterio, suspense y thriller. Hace suyas las pautas estéticas y estilísticas del cine negro clásico sin renunciar a los avances técnicos (color, óptica, pantalla, sonido) y haciendo uso de la mayor libertad de creación alcanzada en los 70. Polanski presenta una buena caracterización y diferenciación de los personajes. "Jake" es impulsivo, ocurrente, simpático y melancólico. Oculta un pasado profesional traumático, que no desvela. Evelyn (Dunaway) es elegante, refinada, fría y vulnerable. Oculta un pasado que se resiste a revelar. Noah (Huston) es muy rico, ambicioso, autoritario y egoista. La trama, que se complica gradualmente, incluye especulación del suelo, corrupción política, maquinaciones para alterar los precios, conspiración contra los intereses generales y otras. La atmósfera del film, que delata las habilidades singulares del realizador en este ámbito, traspira amargura, sentido trágico, presencia física del mal, aires de amenaza, riesgos inquietantes y próximos, etc.

La narración es magnífica: proyecta un intenso aroma clásico, administra una grata economía de medios y se desarrolla con una intensidad cautivadora y absorbente. El final, elegido libremente por el director, es atípico e impactante. La cinta obtuvo un notable éxito de taquilla. Incluye citas cinéfilas ("El halcón maltés", "Vértigo"). La violencia, contenida a lo largo del film, estalla ocasionalmente. La nariz vendada de Nicholson se ha convertido en una imagen iconográfica del cine.

La música, de Jerry Goldsmith, compuesta en 10 días, aporta una partitura breve (sólo 12 cortes) con un emotivo tema principal de amor dramático, que abre y cierra el film. Los solos de trompeta, de Uan Rasey, son magníficos. Añade 3 canciones de época, como "Easy Living". La fotografía, de John A. Alonzo, en color y panavisión, hace uso de planos largos, imágenes profundas, luces contrastadas y composiciones de gran dibujo. Enriquece la paleta básica con amarillos y naranjas. Grandes interpretaciones de Nicholson, Dunaway y Huston. Gran película.
[Leer más +]
43 de 47 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
Un piano, un saxo y una cortina rasgada… el vals perfecto.
Un piano, un saxo y una cortina rasgada donde aparecen los títulos de crédito. Así empieza una obra maestra imperecedera. Chinatown es un rompecabezas donde engranar cada pieza produce una tremenda satisfacción. Dirección, música, interpretaciones, y guión se mueven juntos, como dos personas sincronizadas que bailan un vals. Giran, tuercen, se mueven y a pesar de todo, se mantienen unidos, creando algo indivisible que crea la atmósfera perfecta para generar los sueños. Sueños como Chinatown.

Es indivisible Jack Nicholson de Faye Dunaway, la música de Jerry Goldsmith cosida a esta cinta, el espléndido guión de Robert Towne, la presencia inquietante de John Huston, la habilidad con la cámara de Roman Polanski, el maravilloso tecnicolor… es, el vals perfecto.
[Leer más +]
43 de 53 usuarios han encontrado esta crítica útil
3
Crítica autocrítica sólo apta para admiradores incondicionales de mis críticas
Mi problema con el cine negro es que no me entero de nada. Desde "El halcón maltés" debo haberme tragado algo así como 500 películas de cine negro y puedo decir sin temor a equivocarme que todas han terminado sin que yo tuviera puta idea de lo que iban. Y claro, esa cara de imbécil que se me queda al final no es que sea muy gloriosa. Pero vamos, que sigo intentándolo, no me rindo, sé que alguna vez se me hará la luz y puede que comprenda perfectamente no sólo la que en ese momento esté viendo sino todas las demás.

Creí que con Romano Polanski podía llegar ese momento porque es un director con el que empatizo bastante y su cine me suele llegar sin problemas. Bueno, pues nada. De qué va esta peli? Pues tenemos a un detective tipo Humphrey; a una femme fatale tipo Bacall de ésas que no sabes de qué va, si es buena, mala o regular; a un malo más malo que pegarle a un padre, por cierto muy bien interpretado por... oh, sorpresa, John Huston el Grande! Y naturalmente a unos cuantos polis gilipollas que no le llegan al detective ni a la altura la alpargata y que se enteran de la trama casi tanto como yo. Y de trasfondo un asunto de aguas y corrupción que lo explique el que lo haya pillado.

Yo sólo puedo comentar que los actores están estupendamente caracterizados, Jack magnífico en el papel de Bogart, la Dunaway estupenda haciendo de Bacall, y hasta el propio Romano hace una aparición estelar. Ah, y unos cochazos impresionantes, faltaría más. El problema? Pues que no sabría distinguir la trama de ésta de la de "El halcón maltés" o la de "El sueño eterno". Y el otro problema es que la cara de pánfila luego me dura un par de días, hasta que consigo ver alguna peli facilona que entienda perfectamente para así dejar de sentirme tan imbécil. Tampoco es agradable para mis acompañantes porque me paso el rato preguntando: Y ese quién es? Pero qué ha pasado? Y de dónde sale aquél? Pero ése no era el mismo que...? Seguro que todos conocéis a alguien así, no hace falta que dé más detalles, no? Pos eso.
[Leer más +]
77 de 125 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
La maldición del Barrio Chino
Como suele suceder con los grandes clásicos del cine negro, estamos ante una película que para poder disfrutarse plenamente requiere de más de un visionado debido, sobre todo, a la complejidad de la trama y a la cantidad de detalles interesantes que incluye. No obstante, desde la primera toma de contacto uno ya es consciente de que está asistiendo a la proyección de una GRANDÍSIMA PELÍCULA. Y la primera vez, como en todo en esta vida, siempre es muy especial...

Quizá el mayor acierto de Polanski, en la que resultó ser su última obra filmada en territorio yanqui, fue el conseguir dar con la atmósfera perfecta y el dosificar la intriga policial de una manera sublime. Jack Nicholson se marca uno de los mejores papeles de toda su carrera metiéndose en la piel del cínico y atormentado detective Jake Gittes, y Faye Dunaway está sencillamente genial; su personaje, lleno de misterio y ambigüedad, es el contrapunto perfecto a la interpretación de Nicholson. Otro de los alicientes con que cuenta este trabajo es poder ver tras las cámaras al gran John Huston en un sustancioso y memorable papel, y el disfrutar de Polanski en un impagable cameo, de muy visibles consecuencias en la cara de un personaje.

La película consigue atrapar al espectador de principio a fin. La trama se va complicando a medida que avanza, y el ambiente viciado y desesperanzado tiene su punto álgido en un final que penetra en las entrañas, te deja con un nudo en el estómago y un puñal clavado en el corazón. Puñal cinematográfico, menos mal... Aun así, tardará un tiempo en abandonar la mente del espectador. Merece la pena vivir la experiencia. Absolutamente recomendable.

Por cierto, buenísima también la banda sonora compuesta por Jerry Goldsmith para la ocasión. Años después volveríamos a escuchar otra muy parecida en una joya de película titulada "L.A. Confidential".
[Leer más +]
33 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Retorno al pasado en Chinatown
El director de películas como "Repulsión", "La semilla del diablo" o "El quimérico inquilino", realiza con "Chinatown" su particular homenaje al cine negro.
Una sobria y atractiva cinta que gira alrededor de Jake Gittes (Jack Nicholson), un detective cínico al estilo del mejor H. Bogart que recibe la inesperada visita de una enigmática mujer, que afirma que su marido Hollis Mulwray le está siendo infiel.
Pronto Gittes se verá envuelto en un turbio asunto criminal con mentiras y engaños que sacará lo poco bueno que le queda dentro y le envolverá en un viaje iniciático en el que se encontrará, sin querer, con una parte de su turbulento pasado como agente de policía en Chinatown.
Un guión claro, fácil de seguir, interesante y sin cabos sueltos sirve de sólida base para esta gran cinta de cine negro que nos regala Polanski.
Las grandes actuaciones de Nicholson, Dunaway, Huston y el resto de secundarios hace el resto.
Imprescindible obra para los amantes del cine negro.
[Leer más +]
31 de 35 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Jardines sin aurora
‘Chinatown’ está tejida con tres hilos que vendrían a ser sus colores primarios: el agua, la aridez y la vegetación. La dialéctica entre esos tres elementos se adueña de la forma. El agua transmuta la arena del desierto en zona verde o habitable. Las plantas son, por tanto, bienes suntuarios. Hacia la mitad de la cinta, un plano ilustra esa tríada esencial: Gittes (Jack Nicholson) atraviesa en coche un campo de naranjos y es atacado por los que vigilan. Mientras da marcha atrás el vehículo recibe un impacto de bala en pleno radiador y el agua salta por los aires. El chorro se mezcla con el polvo levantado por las ruedas en medio del cultivo; el cuadro resultante expone el nudo de la trama.

Como es habitual en el género neo-noir, la dirección es muy consciente de sus referencias. La mujer fatal (una espléndida Faye Dunaway) le dice al detective la tópica frase lapidaria: “Cherchez la femme”; el detective, a su vez, es cínico, burlón, desengañado; se enfrenta a todo por la vía más directa y a pecho descubierto. La luz asfixia, el agua ahoga, la sal es mala para el césped. La violencia que salpica cobra carta de naturaleza. La escena en la que el navajero (interpretado por Roman Polanski) corta la nariz al héroe (o antihéroe) es intencionadamente explícita; primero la gasa y los esparadrapos y después la cicatriz impiden que olvidemos la agresión.

¿Pero qué representa Chinatown? Chinatown es la zona cero de J.J. Gittes. También es un MacGuffin excelente. Su lema es “As little as posible”, lo que viene a significar que es preferible no hacer nada, no vaya a ser que, igual que en las tragedias griegas, nuestros actos provoquen precisamente aquello que queremos evitar. Gittes contraviene la regla dorada y el destino discurre en consecuencia.

El barrio chino, que yo recuerde, sólo aparece de noche y al final; es un simbólico horizonte –o agujero– fatalista. El desenlace es tan brillante en lo cinematográfico –la mano gigante de Cross (John Huston) sobre el rostro de Katherine; el coche sumido en la negrura, los disparos, el sonido del claxon…– como argumentalmente extravagante. La deriva melodramática y truculenta de las relaciones intrafamiliares no debe confundirnos. Polanski cuestiona la base misma del progreso norteamericano. Sitúa la corrupción y la ambición desmedidas como pilar y clave de su desarrollo.

Esta película es su personal contribución a la reformulación del cine negro. Es, en menor medida, una cinta de crítica social. Chinatown es un lugar interno y exterior; el pozo en el que Gittes, los Estados Unidos y el propio Roman, entierran sus cadáveres.
[Leer más +]
22 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Bienvenidos a Chinatown
Los Angeles, 1937. El detective Gittes, especializado en divorcios, recibe la visita de la esposa de Mulwray, el jefe del Servicio de Aguas de la ciudad. Ella cree que él la engaña, pero además Gittes descubre que a Mulwray los agricultores le acusan de corrupción por negarse a construir un pantano que paliaría la sequía que sufren. Poco después, el escándalo salta a la prensa, pero la cosa se complica cuando una mujer se presenta en el despacho de Gittes con una sorprendente revelación.
Chinatown. Volvemos a los años 30, a la época de Sam Spade y Philip Marlowe, cuando la sociedad norteamericana salía de la Gran Depresión y se hacían negocios fabulosos, a espaldas de las leyes y la moral. Volvemos a la auténtica esencia del cine negro, ese subgénero del policiaco que se desarrollaba en medio de barrios siniestros envenenados de traición, miedo y ambición.
En los 70, cuando el cine negro parecía de otra época, aparece Roman Polanski, y junto a uno de los mejores guiones de la historia del cine –obra de Robert Towne-, lo reinventa. Ambientada en Los Ángeles en los años 30, la ambientación de la cinta es estupenda. Una historia de detectives y corrupción que, aparentemente sencilla, va in crescendo y no defrauda en absoluto. Y es que no es fácil encontrarse historias de semejante complejidad tan bien contadas. Polanski y Towne hacen su retrato desde la visión de la víctima que ve cómo el mundo le pasa impunemente por encima, casi con detenimiento en el detalle sórdido que marca camino: para el recuerdo, la escena en la que Gittes mete las narices en asuntos ajenos...

-¿Qué le pasa en la nariz, amigo, para tener que llevarla escayolada?.
- Nada.
- Pues debe dolerle mucho.
- Solo cuando respiro.

Polanski tuvo la suerte de contratar a unos magníficos actores, sin los que, probablemente, la película no habría sido la misma. Jack Nicholson –un actor que no me suele gustar demasiado- compone un Gittes fabuloso, pareja perfecta de una ambigua Faye Dunaway y contrapunto del todopoderoso John Huston. Mención especial para la música de Jerry Goldsmith, convertida en un clásico.
Un detective, un extraño caso, corrupción, odios, venganzas y una mujer fatal. Parecen puros estereotipos, pero no; son los ingredientes de esta medidísima y estupenda película de cine negro, al estilo de la vieja escuela, consecuencia de mucho, mucho talento.
[Leer más +]
25 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Chinatown (1974)
Gran película del atormentado Polanski. 'Chinatown' se enmarca dentro del género "neo noir": cine negro al más puro estilo clásico, que emplea avances técnicos y estilísticos de los años 70. La película despliega uno de los guiones más impecables del cine estadounidense y una perfecta caracterización y diferenciación de los personajes.

El filme es un estado de ánimo que suda amargura y es tan visceral que podemos saborear corrupción hasta en las aguas que salen de los tubos oxidados. Es la historia de un investigador valeroso y melancólico, que casi pierde la nariz por luchar contra una caterva corrompida, encabezada por un hombre que profanó a su hija y a la tierra.

Filmada con objetivos de gran angular, pulcros encuadres y luces radiantes, 'Chinatown' exhibe una imagen panorámica que tenía los colores apagados de las películas de los años 30. Como en casi toda su filmografía, el director polaco utiliza imágenes profundas y largos planos.

“Olvídalo Jake, es Chinatown”, le dice el compañero a nuestro protagonista. En muchos lugares apesta a "podrido", pero en las sombras oscuras de una California azotada por el calor asolador, la bocina de un coche puede llegar a ser el sonido más aterrador y pesimista que existe. La crudeza del cine en su máximo esplendor.
[Leer más +]
18 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
No es para tanto
La verdad es que no pensaba hacer esta crítica, pero viendo lo infladísimas que están las demás, creo que una crítica negativa no le viene mal a esta película, y así poder evitar alguna gran decepción como me la lleve yo.
La película está bien rodada, es difícil saber por donde va a salir y durante muchos momentos refleja muy bien las escenas de espionaje que desea transmitir.
Ahora, no es para tanto y empiezo a decir por qué:
1º ¿Por qué se llama chinatown? Podría llamarse de cualquier otra forma, y no así, vale que el final tiene algo de relación, vale que de vez en cuando se hace referencia al barrio de los chinos, pero realmente, me parece un título bastante engañoso y poco apropiado.

El resto de razones en spoiler.
[Leer más +]
55 de 94 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
El año del espectáculo sin premio
1974 fue un año medio raro. No por que haya muerto Perón, haya caído la dictadura salazarista en Portugal o haya renunciado el presidente Nixon por el famoso Watergate; sino porque fue el año en que hubo mucho espectáculo y poco premio en más de una ocasión y en diferentes certámenes.

Por un lado la famosa Naranja Mecánica de Rinus Michels, bajo la batuta de Johan Cruyff, desplegó un fútbol total en el Mundial de Alemania. Con el concepto claro de tratar bien la pelota, predominar el toque por sobre el pelotazo, la técnica por sobre la táctica y el ataque como mejor defensa, Holanda brilló como ninguno en ese Mundial y como casi nadie en la historia del Fútbol. Llamativamente cayó en la final ante el conjunto local, capitaneado por el inolvidable Franz Beckenbauer, menos vistoso pero no menos eficaz, y el espéctaculo brindado por aquel brillante equipo se quedó sin el premio que mereció (la Copa). Hoy en día, no hay nadie que piense en el fútbol-espectáculo y no se acuerde de Rinus Michels y su gran equipo de artistas.

Lo peculiar es que ese mismo año, en el ámbito que nos ocupa, ocurrió algo similar. Roman Polanski sorprendió a todos con una obra que gozaba de un ritmo insuperable, una notable historia con un brillantísimo guión, magníficas interpretaciones y una banda sonora como pocas, guiño al engaño y al suspenso; y curiosamente esa película que hoy es un punto de referencia obligatorio dentro de Cine Negro, tampoco obtuvo un premio acorde a su exquisitez. Una todavía más genial segunda parte del Padrino, su director y sus actores, se llevaron justificadamente la mayoría de las condecoraciones, dejando a Polanski con el consuelo del guión.
Décadas después, el mundo no se olvida de Polanski, de Nicholson y de ese ícono del cine que no fue muy premiado pero sí glorificado, que fue Chinatown.
[Leer más +]
19 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Chinatown: un estado de la mente
Chinatown no es un barrio, es un estado de la mente. El estado de la mente al que vuelves sabiendo que no debes volver. El lugar de los errores, el lugar en el que te pierdes, al lugar al que tiendes.
Towne, Evans y Polanski construyen una película acerca de ese estado de la mente. Pero en ella no hay lugar para los discursos, no hay sitio para la filosofía, no hay momento para el mensaje.
Todo en ella es narración. Narración apasionada, apasionante. Historias de cine negro que se mezclan y se alimentan. Los conflictos de siempre explicados como nunca. Dramas brutales contados como si fueran banales.
El modélico guión de Robert Towne te lleva en una barca en la que, como Jack Nicholson en Chinatown, siempre estás perdido. Siempre vas 5 minutos por detrás de la trama. Siempre hay algo que se te escapa. Algo que no logras asir ni conectar y que crees que te va a dejar atrás. Y sin embargo, a los 5 minutos eso ya lo has conectado. Pero hay otro cabo suelto que tomar.
Así construye una trama, donde nada queda al azar. Donde todo tiene lógica y nada tiene explicación. Una trama en la que el espectador participa del juego sin saberse más reglas que las del cine clásico. Una trama que no sabes dónde va a llevarte. Hasta que como Jack Gittes llegas a Chinatown y te encuentras que estás perdido. Que has llegado al estado de la mente al que tiendes. Al estado de la mente del que no puedes salir.
[Leer más +]
18 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
4
Me han engañado cómo a un chino.
¿Chinatown?, ¿por qué no Martetown?. Esto tiene lo mismo que ver con los chinos como la cenicienta. Y luego, ¿qué pasa?, ¿que en los barrios chinos de los años setenta y ochenta eran ciudades sin ley?. Como si por estar entre chinos no pudiese actuar la policía. Me parece un título metido con calzador no, !lo siguiente!. Posiblemente Polasnki lo más cerca que hubiese estado de un barrio chino hasta ese momento fuese en Mónaco o en zonas residenciales de lujo en Marbella.

Película en mi opinión sólo recomendada a gente nacida a principios del siglo XX, sino todo te parece muy absurdo.

¡Ya te la cuento yo en el spoiler y de paso te hago un favor! De nada.
[Leer más +]
69 de 125 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
Clásico entre los clásicos (9.2)
Una de las mejores películas de cine negro de la historia, sólo alcanzada por "Perdición", "L.A. Confidential", alguna de Fritz Lang ("El doctor Mabuse", "M, el vampiro") y unos poquitos clásicos más ("Atraco perfecto", "El halcón maltés "...). Pero en ningún caso es peor que "Muerte entre las flores" ni que "Sed de mal"; yo diría que supera ligeramente a ambas.

A las fantásticas interpretaciones principales hay que añadir un guión perfecto, con sorpresas mayúsculas incluidas, y una banda sonora excepcional (el peculiar Goldsmith compone sus mejores trabajos cuando se aleja de su "moderno" estilo; el cine negro se le da especialmente bien, también compuso la de "L.A. Confidential").
Se me quedó grabada en la retina la incursión nocturna del detective privado en la presa, sobre todo el famoso navajazo en la nariz. No importa que lo descubra aquí, te sobrecogerá igualmente.
[Leer más +]
34 de 55 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
Y finalmente al día siguiente...
...tuve el valor de votar. Para todo el mundo hay películas especiales, eso no significa que te hayan gustado más que las demás, sino que no ha pasado desapercibida. En mi caso, hay un par de películas que han conseguido afectarme de verdad, que me han impactado y me han dejado en shock en cierta forma, entre ellas están "Match Point" o "Revolutionary Road", ambas películas tardé más de un día en sentirme capaz de votar, porque por alguna razón, deseaba no haberlas visto. Pues para mi mala suerte, ya hay otra en la lista. Asquerosa "Chinatown".

Quiero aclarar que esta extraña sensación no se debe a que la película en sí sea desagradable, no es muy violenta ni perturbadora en general, sabe contenerse en su contenido explícito. Tenía bastante claro que le daría un 8 a esta película cuando quedaban 10 minutos para que terminara, estaba casi decidido (porque además, "gracias" al estupendo libro de Peter Biskind "Moteros tranquilos, Toros salvajes" ya sabía el final, o al menos eso creía), así que esaba seguro de que terminaría igual, con un 8 normal y corriente, un verdadero notable, sin embargo, finalmente llegaron ese fatídico último minuto, en el que el cabrón de Towne escribió en su guión lo que pasaría. Así que por culpa de su traumático final, esa ha sido la impresión que me ha dado "Chinatown", no de cine negro e intriga normal y corriente, me ha dejado ese amargo sabor de boca que nunca me podré quitar.

Así que sí, me he decidido a darle un 9 por ese final tan cabrón. La madre que parió a Robert Towne.

No puedo decir nada más acerca de esta película, no quiero hacerlo.
[Leer más +]
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
ChinatzzzzzzzZZZZzzzzZZZZZzzzzzzZZZZzzz
Chinatown es cine negro. Pero en color. Y os digo la verdad, no miento: lo intento de mil maneras distintas, pero no soy capaz de terminar una película de cine negro a la primera. Me duermo. Es impepinable. Estoy obligado por mi sistema nervioso central a verlas por entregas.
Y no es por que me parezcan malas, es solo que me aburren sin querer. Su ritmo, sus diálogos, la historia...
Con Chinatown, por ejemplo, necesité tres entregas cortas y con café y panchitos. Mis párpados son más poderosos que Roman Polanski. Chinatown es mejor que un Valium.

Chinatown va del típico detective de cine negro, estilo Humphrey Bogart, que recibe una visita, la sra Mulwray, que sospecha que su marido, el jefe de la compañía de aguas de L.A., la engaña. Hasta aquí todo va bien, pero después, mi escasa inteligencia en cine negro (la otra inteligencia está intacta, lo juro) me fuerza al sueño, al aburrimiento y al sopor.
Escenas larguísimas en las que no pasa nada. Y luego...perlazas en el diáologo que me confunden. Al final acabo preguntándome:
-¿Ese quien es?
-¿De quien narices están hablando ahora?
-¿Pero a donde va?
-¿Qué ha pasado?
Al final me quedo con que hubo un asesinato (puede que varios), que alguien mató a alguien con sucios intereses y que hubo algún rollo con el agua que no podría explicaros.

No me entendáis mal. La película es buena. Pero solo para fanboys del cine negro.
Jach Nicholson hace de detective clásico de una forma espectacular. La Dunaway hace genial de guapa que no sabes si va, si viene o si es rara. Y John Huston es un maestro haciendo de malo. Hasta Polanski hace algún cameo.

Una interpretación en general magistral. Pero si no estás acostumbrado al cine negro, es fácil dormirszzzzzzzzzzzzzzzz
[Leer más +]
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ver críticas con texto completo
Más información sobre
Fichas más visitadas