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167 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
9
Gracias
Queridos Julie, Ethan y Richard

Primero quería daros las gracias por haber escogido como escenario y contexto, a la maravillosa Grecia, fundadora de esta nuestra civilización occidental, para así poder destripar y desgarrar sus entrañas y valores. Me veo en la obligación de reconocer la sutileza con la que encajan todas las piezas del puzle. Por que pensándolo bien, todo cuadra, nada está de más en esta compleja, realista y exquisita tercera entrega. Se conversa sobre arte, literatura, amor, tragedia, filosofía o astrología, tal y como lo hicieran en ese mismo lugar hace ya más de 2000 años.

Para continuar, quería daros la enhorabuena por que ante todo, sois un trio de escritores de primera. Las bromas y pullitas están más presentes que nunca, y alegran y amenizan la historia como en ninguna otra parte de la saga. La trama ya no trata hipótesis, ni es mágica. Ha desaparecido el misterio, la intriga, la pasión, todo ello para dar paso al realismo, la comprensión, la identificación para con los personajes. Jesse y Celine, ya no son dos jóvenes con la vida por delante, ni tienen el tiempo o la capacidad para empezar de cero. Son una pareja con problemas reales, que ya no viven en un cuento de hadas, y que tienen las mismas responsabilidades que el resto, como lo son la familia, el trabajo, el compromiso.

Y por ultimo, como no voy a hacer mención al motivo por el cual os sigo desde que os vi por primera vez caminando por las calles de Paris (si, lo siento, vi la segunda antes que el resto, y será por eso que es mi favorita) y es esa energía incandescente que producís al representar estos dos personajes, esta pareja que habéis creado, formado y modelado a vuestro antojo, y que es obviamente una gran parte de vosotros mismos, por que en verdad, no me parece estar viendo una gran actuación, estoy viendo, la vida misma.

Estoy de acuerdo en que la cantidad de idas y venidas emocionales es algo intensa, incluso forzada podríamos decir, para el medio día en el que transcurre la película, pero cada irracionalidad o cambio de tuercas tiene un trasfondo propio, y sin ellas, este laberinto de emociones no tendría salida.

Así que en definitiva, gracias, por hacerme disfrutar una vez más, de un cine de primer nivel, y, hasta la próxima?
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187 de 210 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
"Recuerdo aquella noche mejor que algunos años de mi vida" (Análisis de la trilogía)
Hace 18 años (“Antes del amanecer”) dos jóvenes se conocieron en el tren Budapest-París y decidieron recorrer juntos la ciudad de Viena. Una bellísima historia con una promesa final. Volver a verse 6 meses después.

Sin embargo aquel encuentro no llegó a producirse y 9 años después (“Antes del atardecer“) se encontraron en París. Ambos repasaron el tiempo hablando de aquella preciosa tarde y de sus actuales vidas. El final otra vez nos dejó con la miel en los labios.

Si no saben de lo que hablo, no sigan leyendo porque tienen dos películas pendientes. Un cine intimista, despreocupado por la factura artística, un cine bohemio que conecta de lleno con el espectador. Una cámara y dos personas hablando mientras recorren dos ciudades a cuál más bonita. Nos metemos en esa historia y soñamos que nos pase (o nos pudiera haber pasado) lo mismo.

La tercera parte sigue el mismo camino, un plano fijo y largas conversaciones. Y en estas conversaciones es dónde notamos que el tiempo ha pasado. Ya no son dos jóvenes de 23 años locamente enamorados o dos treintañeros que recuerdan tiempos pasados, ahora son una pareja con hijos que cuidar y que no disponen de tiempo para ellos solos.

A los que no les guste este cine acabarán cansados de los diálogos, pero la verdad es que cada uno de ellos tiene mucho sentido. Sirva como ejemplo la magnífica conversación que mantienen las 3 parejas y el anciano en la comida. Son 3 generaciones que hablan sobre el amor, el sexo, el futuro de la humanidad, la vida y la muerte con diferentes puntos de vista. Todas las historias que cuentan inducen a la reflexión. Grecia, la tierra de los filósofos y los pensadores, era el mejor lugar para hacerlo.

La larga secuencia del hotel es lo mejor de la película con diferencia. Vemos a una pareja discutiendo y echándose en cara muchas cosas (recuerda a “Dos en la carretera”). Una secuencia muy creíble y que resulta catártica. Es un desahogo para cualquier pareja, especialmente para ellas. Son 20-25 minutos muy difíciles de grabar. El trabajo de los dos es formidable, me atrevería a decir que hay cosas improvisadas porque es una conversación larguísima y muy propicia para que dos actores muestren esa faceta. A esto señores, se le llama química y carácter. Una escena que salta de la pantalla a la vida real.

Es la evolución de una pareja, son dos personas que se conocieron hace 18 años y que llevan viviendo 9 años juntos. No todo iba a ser de color de rosa, los años desgastan una relación y era el momento idóneo de mostrar la otra cara del amor. Después asistimos al final de la película, el final que debía tener esta historia. Porque todas las parejas deben terminar así. Es cuando recordamos las palabras que pronuncia el anciano en la comida.

Una película más íntima, más agridulce y más honesta que las anteriores. Con algo menos de magia o encanto (como cualquier pareja 18 años después) pero igual de profunda e inteligente.

Las tres películas son buenas, realmente buenas pero siempre me quedaré con la segunda. La primera tiene el factor sorpresa y el alma aventurero de la juventud. La tercera parte es el desgaste de una pareja con hijos y lo que se debe hacer para que el amor dure o no. Verles así es un acierto pero conecto un poco menos. Será la edad…

Y la segunda…

La segunda es el reencuentro en París, es la explicación a lo que no pasó, es un café para ponerse al día, es un paseo en barco por el Sena dónde escucho uno de los mejores diálogos de este siglo.

La segunda es… es…. es el momento de perder la cabeza y poner tu vida patas arriba al ver a July Delpy cantando y tocando la guitarra. La segunda es la oportunidad de tu vida, es SOÑAR, lo que cualquier pareja tiene que hacer en un atardecer en París.

Recuerdo esta conversación de la primera parte:

- vaya…
- qué?
- voy a hacerte una foto, para no olvidarme nunca de tí, ni de todo esto.
- de acuerdo, yo tambien.

y esta frase de la segunda:

“Recuerdo aquella noche mejor que algunos años de mi vida”

Yo siempre les recordaré y siempre apoyaré este tipo de cine. Linklater ha sido muy valiente, sin ir más lejos ayer éramos cuatro -literalmente- en la sala. Una pena, una verdadera pena que este cine no sea más valorado.


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165 de 180 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Un sueño bajo la luz de verano de Grecia
Conversación imaginaria entre dos extraños que se quieren y se conocen, aunque no todavía, y tratan de encontrar el sentido a esta cosa llamada vida, amor y cine. Es decir entre Ivo (aka as criticoenserio) y tú (aka Lector)

-Sabes, he tenido algo así como un sueño, una Epifanía que creo que nunca se va a cumplir, un deseo cinematográfico verdaderamente especial
-¿De verdad?
-Lo es. Cierra los ojos, imagina que por un momento siempre has querido encontrar una película de amor, pero de las de verdad, nada de Julias Roberts, ni Hugh Grants ni gente rematadamente guapa que no encuentra el amor y de la que sabes cómo va a terminar aunque nunca te cuentan el final sino el romance. Porque ¿qué pasa tras eso? No siempre se come perdices. Yo busco una película sincera y honesta, natural como la vida en la que apenas no pasa nada pero te vas enamorando y vas soportando la nostalgia y las situaciones agrias y difíciles. Porque la vida normalmente no es fácil
-Sé a lo que e refieres
-Pero desistes, porque la gente ve lo mismo una y otra vez, y ya sabes se hacen secuelas y secuelas sin originalidad y lo más visto en el cine romántico contemporáneo es entre un vampiro y una chica sin sangre. Unicamente de vez en cuando una historia pequeña independiente salta la barrera y te llega a dar en la diana del corazón.
-¿Cómo Antes del Amanecer y Antes del Aterdecer?
-Exacto. Y mira que una de sus partes Julie Dephy lo ha intentado con 2 días en Paris y 2 días en Nueva York, pero les faltaba algo. No era lo mismo. No eran Celine y Jesse
-Pues que haga una tercera parte
-De eso iba mi sueño. De volverme a encontrar a dos personajes que vivían en mi corazón, de preguntarles, “eh, ¿Cómo te va? ¿Al final perdiste el vuelo?” pero las expectativas son tremendas, quiero decir, lo grande de esos finales es que tú terminas creando un universo para ellos. Es como si Sofia Coppola reencontrara a los Bob y Carlotte de Lost In Translation. Una secuela atípica es complicada por el tono, recuperar a personajes verdaderamente definidos y satisfacer las ideas de cada uno
-Y encuadrarlos en lugar mágico
-Exacto, tras Viena y París, ¿dónde los llevamos? Mi sueño fue Griego
-¡Qué bonito!
-Durante un día de final de verano y obviamente con nuevas motivaciones, ya ha habido romance platónico de los que marcan una vida y reencuentro de los que cambian el destino
-¿Y ahora?
-Pues el amor después del amor. La posibilidad de vivir para siempre con alguien, para toda la vida. Porque ese para toda la vida lo fundaron hace años cuando la esperanza de vida era mucho más corta y no significaba tanto tiempo y cuando las personas aguantaban no por amor sino por muchos otros factores. Pero ahora la vida es diferente. Hay compromisos y cosas que hacer alrededor del mundo y todos los problemas de la vida adulta
-Sé lo que dices. A veces el amor no es suficiente para hacerlo sobrevivir
-Y hay diferentes fases...
-¿Y Funcionaba tu sueño?
-Era precioso. Complicado pero precioso. Quiero decir, es profundo, se hablaba de sentimientos, maternidad, paternidad, nostalgia, vejez, muerte, vida, romance, nuevas tecnologías, discusiones, atardeceres, juegos, de las inseguridades...
-De vida
-De vida, pero de una forma tan cotidiana, sincera, ligera pero a la vez reflexiva y profunda. Y aderezada de tomates frescos entre hojas de lechuga, música griega y mares de ensueño bajo una cálida luz y actores en estado de gracia.
-Parece un sueño
-Un sueño precioso

Y como caído del cielo se nos entrega ese sueño con un lazo azul en “Antes del anochecer” (Before Midnight, 2013) una película honesta, sincera, sin trucos y que con un guión maravilloso (que se va a llevar el Oscar sí o sí) nos endulza sin empalagar y nos hace reflexionar en una de las películas más bonitas que he visto en mucho tiempo. Perfectamente interpretada y mejor dirigida y montada consigue lo que parecía imposible y es cerrar con rotundidad la historia de Celine y Jesse que nunca buscan ser prefectos pero tratan de ser felices y nos hacen creer que el mundo es un lugar más bonito si consigues ponerle las dosis necesarias de romanticismo.

Cualquier adjetivo se quedaría corto y dan igual las expectativas porque Before Midnight vivirá en cada sueño y lo llevará a las mayores cimas cinematográficas. Simplemente imprescindible y digna de ver una y otra vez.

Lo mejor: Todo
Lo peor: Perderte este sueño

Valoración: 10/10
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91 de 111 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Algo desnudo
En un momento de 'Antes del anochecer' Jesse bromea en varias ocasiones con tener una máquina del tiempo con la que ha viajado desde el futuro hasta el presente. Si pudiésemos hacer el viaje inverso conoceríamos de primera mano la repercusión y el impacto de esta obra en el espectador del futuro. Resulta que la alusión a ese viaje por el tiempo va más allá de la simple broma, encaja dentro del análisis de esta película como máquina de medir el paso inexorable del tiempo y sus consecuencias penosas. Porque el tema primero de la película es por supuesto la relación humana entre Jesse y Céline, el amor y el sexo. Pero tras esto se esconde el terrible doble enfrentamiento de: primero, el hombre contra el tiempo que se le escapa, y segundo, el hombre contra el tiempo que le oprime.

Jesse y Céline no son unos desconocidos para nosotros. Son esa pareja de personajes, ¿ficticios?, que se conocieron hace casi tres décadas en un viaje en tren hacia Viena en 'Antes del amanecer' (Linklater, 1995). En aquella película los dos jóvenes – Jesse, un chico americano, y Céline, una chica francesa– deciden pasar un día juntos descubriendo Viena antes de tener que separarse al amanecer para volver a sus respectivos hogares. Nueve años después, Jesse y Céline vuelven a encontrarse en 'Antes del atardecer' (Linklater, 2004) y dan un paseo por París antes de que Jesse tenga que tomar el vuelo que le devuelva a América. Y nueves años después, el cine les reúne de nuevo en 'Antes del anochecer' (Linklater, 2013). Jesse y Céline disfrutan, en esta ocasión ya como pareja estable, de un tiempo de vacaciones junto a sus dos hijas en el Peloponeso griego. El tiempo ha dejado huella en sus rostros y en sus cuerpos, pero también ha consumido parte de sus ilusiones, de sus sueños de juventud, ha arrasado parte de sus vidas.

Durante la rueda de prensa del estreno de la película en Berlín, un periodista preguntó al director y guionista del film, Richard Linklater, por qué razón se había decantado por un final feliz. Sin embargo no creo que este pueda considerarse feliz. Desde luego no es un final triste, pero tiene un tipo de ambigüedad que juega con nuestras expectativas. De manera que nosotros somos quienes debemos dar cobijo en nuestra imaginación al futuro de esta pareja. Algo que no nos va a ser muy molesto porque después de presenciar esta maravillosa película, y gracias al trabajo de actuación que realizan Ethan Hawke y Julie Delpy con Jesse y Céline, se hace fácil sentirlos muy nuestros.

Antes del anochecer no es un artificio, y no tengo nada en contra de los artificios. Los hay maravillosos y los hay detestables, de hecho, precisamente ahora, coinciden en cartelera 'El gran Gatsby' de Baz Luhrmann y 'The Lords of Salem' de Rob Zombie, dos notorios artificios que cada uno puede valorar según le venga en gana. Pero 'Antes del anochecer' no es un artificio diseñado para el entretenimiento o el alucine. Es otra cosa. Y esta cosa es algo extraño de definir y de dar nombre. Llamémosle película, cine, obra maestra, o sencillamente un ensamble de imágenes y sonidos dentro de una lata. Sea lo que sea, esto rasga algo doloroso y honesto, algo verdaderamente auténtico y desnudo.

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http://victor-edu.blogspot.com.es/
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62 de 68 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
El difícil equilibrio entre el amor y la vida cotidiana
Guardo en especial estima y gratitud las dos cintas anteriores de esta imponente trilogía, “Antes del amanecer” (1995) y “Antes del atardecer” (2004), todas ellas realizadas por el mismo equipo y que juntas conforman una radiografía tanto del amor imposible, del amor romántico, como del amor cotidiano más allá del enamoramiento y subidón inicial. Todas ellas llevan una huella de un gran cine, hecho con mimo al detalle, con un enfoque serio y adulto pero sin rehuir el entretenimiento y las dosis necesarias de locura y espontaneidad que todos quisiéramos vivir y revivir en nuestras vidas cotidianas. Y además reflejan una generación que es la mía y le muestran con un realismo no exento de sinceridad y desencanto que elevan el resultado a categoría casi de obra maestra.

Cuando llegas a las 40, tienes ya tu vida encauzada, has dejado atrás alguna otra relación relevante y tienes algún hijo disperso de una relación anterior, tienes las ideas claras pero el día a día acaba devorando casi todo el romanticismo que nos endilgaron cuando pequeños… ¿Qué nos queda por vivir? ¿Cómo vivirlo? ¿Cómo hablarlo, rebatirlo, formularlo, superarlo, rehacerlo, recuperarlo, nutrirlo, aceptarlo? Tantas preguntas y tan pocas respuestas y casi todas bordeando el tópico y la vaguedad, tanta mentira, tanta ilusión frustrada y tanto búsqueda estéril y sin sentido.

Estamos ante una película muy grande, digno peldaño o colofón a dos obras perdurables que la preceden y que relata la vida de casados de una pareja que se enamoró locamente, se perdió, se reencontró y se arriesgó. Pero no es oro todo lo que reluce ni hay nada fácil o fijo en la vida, cada día nos impulsa a renovar los votos de cariño, dedicación, escucha, compañía, afecto y amor porque no hay nada que cien años dure ni cuerpo que lo aguante. Es una de las cintas mejor dialogadas que recordar pueda, entre un naturalismo contagioso y una estudiada y medida elaboración que hace la vez de espejo inexorable que nos enfrente ante nuestros rostros desencajados y llorosos (si nos quedaran lágrimas que verter). Gran guión (fruto, una vez más, de la complicidad del director y sus dos protagonistas en estado de gracia) con una de las discusiones más memorables que recuerdo y con una resolución que nos habla de la dificultad de tener los pies bien plantados en la tierra y ser capaces de transitar lo desconocido.

Excelente obra que culmina una trilogía memorable y que perdurará en la memoria cinéfila más allá de modas o convencionalismos. Muy, muy recomendable – sobre todo si ya has cumplido los 40 o quieres llegar a cumplirlos con cierta lucidez. Memorable.
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57 de 67 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
Excelente retrato de la mediocridad en que se puede convertir la convivencia en una pareja
Le pongo un 5 porque la película se limita a retratar QUÉ es lo que pasa en un 90% de los casos cuando la convivencia cotidiana va maniatando a una pareja. Relata muy bien la queja femenina de que ellas lo hacen "todo" de la casa, los niños, que lo han abandonado "todo" por su pareja (sus proyectos, sus ilusiones), y relata muy bien la perplejidad del que está al otro lado ante tal avalancha emocional. Está claro que cuando el argumento de uno son sus emociones, la racionalidad no puede entrar en el juego, y solo se puede contrarestar con emociones positivas. En este sentido, la película cumple. Se hace "humana". Pero mi fallo al acudir al cine ha sido tener la expectativa de que ambos protagonistas se encontrarían hablando con madurez de la relación de pareja. No como dos quinceañeros de cuarenta y tantos. Se ha desaprovechado una buena ocasión de hablar desde el alma adulta, que no desde el alma infantil de los protagonistas. Las dos primeras partes de esta "serie" prometía un amor PROFUNDO de la pareja, y se ha quedado en un amor como cualquier otro......en el que si no estuvieran hijos por el medio, ambas partes seguramente, ya no querrían seguir juntas. La parte femenina, más que la masculina. Lo que no encaja es que los protagonistas, parece que no hayan hablado en serio de su relación de pareja nunca. Pero, seguramente, esto también ocurre al 90% de las parejas de hoy en día.....y de siempre.
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61 de 85 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Necesaria
Supongo que hay personajes que terminan convirtiéndose en importantes en la vida de uno. Y sobre todo creo que el hecho de que pertenezcan a una saga ayuda, porque los vemos crecer, en definitiva, los vemos vivir. En la saga que dirige Richard Linklater y protagonizan Ethan Hawke y Julie Delpy, el tiempo es fundamental para la historia, o las historias que se quieren contar.

Me gusta la forma en que lo definió el propio Ethan: "La primer película es sobre lo que podría haber sido. La segunda, sobre lo que debería haber sido. Y Before Midnight, sobre lo que es".

Mientras en Before Sunrise ellos eran dos jóvenes, hacía no mucho que habían dejado la adolescencia, y juegan a ser adultos y racionales y así es que terminan separándose, en Before Sunset parecían lamentarlo, al fin y al cabo sus vidas separadas no habían salido del modo en que ellos lo esperaban, y, como dice Celine, todo lo romántica que podía ser se quedó en esa noche hacía nueve años.

Pero el final de esta segunda entrega, era una de las escenas más simples y memorables y perfectas del cine de estos últimos tiempos. Dos palabras, "I know", eran suficientes para saber, o al menos imaginar, qué podía pasar después.

Pero nueve años después ellos nos dan la sorpresa y tras haber filmado secretamente esta tercer entrega, vuelven con "Before Midnight". Ya desde el trailer (como pasó también con la segunda) nos adelantan imágenes que algunos podrían considerar spoilers, pero creo que en películas como estas, por lo menos a mí me sucede así, no me arruina nada el saber que sí, que finalmente decidieron darse una oportunidad juntos, sino, todo lo contrario, esto aumentó mis expectativas.

Con Grecia como escenario esta vez, Jesse y Celine ya no son jóvenes, y tienen dos hermosas niñas llamadas como Nina Simone y Ella Fitzgerald. Mientras Jesse lidia con la relación a distancia que tiene con su primer hijo y con su vida como escritor, Celine está más abocada a su papel de madre aunque intenta no dejar su lado como activista, aunque a veces no pueda evitar sentirse un poco frustrada.

Before Midnight es la menos romántica, la más graciosa pero también la más agridulce de las entregas. Escrita por sus protagonistas junto al director, se centra en el final de unas vacaciones en Grecia, que van a ser definitivas para la pareja. No hay un deadline, el tiempo ya corrió lo suficiente, pero se percibe que aquella noche en que se ven casi forzados a pasar la noche a solas en un hotel va a generar algo importante. Y es que todo lo que antes era una fantasía, ahora se tornó real. Y al tornarse real, imperfecto.

También se diferencia de las otras dos, en que acá aparecen unos personajes secundarios. No sólo sus hijos, sino la gente que los alojó en Grecia, un escritor veterano, una joven pareja... Y son precisamente estos últimos los que se van a encargar de marcar algo importante que jugó en contra de la pareja que no fue pareja hasta muchos años después: la tecnología.

Mientras antes, por no pasarse un número telefónico, no pudieron reencontrarse sino hasta nueve años después, y gracias al libro que Jesse escribió no sólo para no olvidarla, sino para poder encontrarla, hoy en día la parejita joven se comunica por Skype. Y es que otra hubiese sido la historia si ellos se hubiesen conocido en este siglo, pero no, por suerte, ellos se conocieron en los 90s.

Pero así como el tiempo, la época y la situación marca ciertas diferencias, también tiene similitudes. Y la principal es lo bien trabajado que están los diálogos. Más cínicos esta vez, pero la película tiene esas pequeñas líneas que te dicen todo en pocas palabras. Pero para que ustedes puedan descubrirlas en la sala, decido abstenerme de empezar a citar.

También los largos planos secuencia que siguen a sus protagonistas y son testigos de esas conversaciones que pueden ser tan superfluas como profundas. Y la química entre Delpy y Hawke se mantiene intacta, en ningún momento parecería que estuvieran actuando, y creo que eso también contribuyó a que los sintamos tan parte de nuestras vidas.

Resumiendo, no podría decir si es la mejor de las entregas, cada una funciona tanto por separado como unidad y tiene imágenes que quedan grabadas en nuestra retina, y líneas con las que nos podemos sentir muy identificados. Pero sí es diferente. Más agria. No obstante, necesaria. Para no quedarnos con la fantasía, y comprobar que Jesse y Celine se parecen a nosotros mucho más de lo que creíamos.
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42 de 49 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Como siempre, hay un antes y un después de ver esta película
Después de haber visto la tan esperada película, he tenido que reflexionar durante varios días antes de " entender " si esta última cinta me ha gustado o no, y he decidido que no, no me ha gustado. Es buena, he disfrutado con ella,pero me he quedado profundamente desilusionada. He preferido ir a verla limpia de comentarios y críticas, sin idea de lo que iba a encontrarme, y sin leer las opiniones de los demás usuarios para no verme influenciada, pero creo no equivocarme al decir que somos varios los que nos hemos sentido desengañados. Aquí la cuestión es muy sencilla, habrá quien la valorarán por hacer un retrato real de lo que es una relación de pareja, y quien la odiarán por ello, y yo la odio, la odio y la quiero, porque las tres películas son una, sin embargo....yo quería el cuento de hadas y ahora.. me siento vacía. No exagero si os digo que he estado unos días muy confundida, y aunque sólo es una película, es más que eso. Los amantes de esta historia.... lo entenderán.
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23 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
LA FLECHA DEL TIEMPO
Sentimientos encontrados: el film es excelente, pero un servidor, a titulo personal, no quiere que nuestra pareja se haga mayor y sucumba a la rutina de una alienada pareja con hijos. No puedo. Me niego. Me caen demasiado bien. Por otro lado, la sección del film en la que comienzan las peleas, tiene un punto hartante, como de film europeo ligeramente cansino (la verdad es que el aire de película francesa de esta tercera entrega es bastante claro) que no me agrada demasiado. También es cierto que la verborrea acaba pesando un tanto tras varias película. Pero...

...el film tiene mucho de verdad, los personajes ya son memorables (la química Delpy/Hawke a estas alturas es ya estratosférica... y se ve lo motivado que está Ethan en comparación a otros largos recientes suyos). También es cierto que la peli alberga esperanza y se que se tocan temas humanos de potente calado con una sencillez sorprendente.

Un film a ratos notable.

Pero yo no quiero que Celine y Jessie se conviertan en gente normal. Aún no.
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22 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
Si se atrevieron a rodar una tercera parte fue porque sabían que podían hacerlo
Celine: Baby, you’re gonna miss that plane.
Jessie: I know.


¿Qué pasó después de esas irremediables frases que nos dejaron sin saber qué pasaría durante nueve años, aunque bien comprendíamos que era la mejor forma de cerrar las dos películas?


Aunque lo parezca, no es una trilogía. Es simplemente una historia que se va tejiendo y contando a lo largo de los años. 18 años después de un paseo por Viena “Antes del Amanecer“ y pasados 9 de un reencuentro en París “Antes del Atardecer“ tendremos el placer de volver a caminar junto a Jessie y Celine en Grecia “Antes del Anochecer“. Un nuevo guión escrito entre el director Richard Linklater y los dos actores protagonistas, Ethan Hawke y Julie Delpy. Un trabajo notable y de entrega la que este trío dan de sí tanto en la creación como en la manera en que le dan forma al guión. Y es tan buen trabajo que empiezan a crearnos la duda de si... ¿no será en verdad que tan sólo está basado en hechos reales?

Para los incondicionales amantes de esta historia de encuentros fortuitos y acalorado debate mental será como un reencuentro con un viejo amigo después de 9 años. Al principio, todo se nos hará raro, pues nueve años es mucho tiempo y el gran enemigo vital puede hacernos parecer unos desconocidos; con temor, también, si hemos idealizado ese encuentro y la película no es más que un intentar articular lo que es la rutina entre una pareja según el patrón de los anteriores guiones; y por otro, enfrentarnos al devenir de la vida, comprobar si aquella magia inocente que les unió en la adolescencia les ha sido arrebatada por el cinismo que supuestamente otorga la madurez.

Pero tranquilos porque están de enhorabuena, porque Antes del Anochecer seguro que no les defraudará. Vuelve a ser un capítulo más en la vida de Jessie y Celine, un gran trabajo audiovisual y de guión. Tan buen guión que dará en la clave exacta -y quizá la única posible- para que los dos personajes vuelvan a pasear juntos, reencontrándose a pesar de que no se habían separado. En dos horas en las que sabremos a través de pocas frases qué fue de ellos, dándose los besos cuya carencia nos habían dejado en tensión en París; y atravesando sutilmente todos los espacios emocionales posibles que ellos dos como personajes bomba pueden dar en un corto espacio de tiempo. Por eso es una película como las otras en esencia y porque los grandes detalles la hacen diferente.

Antes del Anochecer es una tarde de vacaciones de verano en Grecia. Jessie y Celine con hijos; Jessie y Celine conversando sobre la vida a la mesa con más gente; Jessie y Celine lanzándose dardos irónicos que sólo la confianza y el tiempo consiguen dar. Jessie y Celine que siguen siendo los mismos de siempre a pesar de las corazas que puedan ponerse y que también tienen un poco de cada uno de nosotros; Jessie como escritor ególatra con la camiseta de la tienda de discos Neptune de Viena; Celine -muy Afrodita- que cree haberse convertido en la mujer sumisa que jamás quería llegar ser. Viajaremos con ellos a través de sus vulnerabilidades y a través de una batalla campal entre lo que ser “hombre“ y “mujer“ contemporáneamente significa -solo faltan las trincheras- ya que algún que otro espectador que se sienta afectado saldrá escaldado. En el marco de la inconmensurable Grecia, cuna de la filosofía y la tragedia. El mejor colofón para este cine que es precisamente eso, la vida que no es sino filosofía y drama.

Un encuentro con bellas puestas de sol junto al mar, buena comida, conversación y buen vino. ¿Qué más se le puede pedir al buen cine?
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25 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
La crisis de los cuarenta
Ya no queda duda que cuando Richard Linklater viaja a Europa consigue sacar lo mejor de sí mismo como autor. Y “Antes del anochecer”, tercera parte de su trilogía romántica, no es la excepción, ya que sus icónicos personajes vuelven a concedernos un nuevo “tour de force” interpretativo. Una trilogía fundamentada en los diálogos de su pareja protagonista, una plática que vemos evolucionar como la vida misma desde su más redonda primera parte hasta esta menos tontorrona conclusión, sin duda el más incisivo de todos sus viajes.

Este anochecer de Linklater vuelve a ratificarlo como uno de los cineastas norteamericanos más polifacéticos al atreverse con propuestas tan contradictorias en su filmografía que van desde el drama hasta la comedia más ligera, pasando por ámbitos tan atípicos como la animación y el documental. Pero la película también demuestra otra capacidad innegable del director que es su cinefilia, ya que existen referencias a su compatriota y también europeizado Woody Allen, a Eric Rohmer y al mismísimo Ingmar Bergman. De hecho, el tercer acto de la película bien podría formar parte de “Secretos de un matrimonio”, situándose a la altura de los mejores momentos del genio sueco. En definitiva, un americano también puede volverse profundo, pero para ello necesita volver a sus orígenes, al Viejo Continente tanto para sus referentes como para sus escenarios.

Y hablando de orígenes, la parada en este caso nos lleva a la misma Grecia, la cuna de nuestra civilización. Y es ahora cuando podemos afirmar que la elección de las localizaciones de cada episodio no es para nada intrascendente ni caprichosa. Y en este caso, la película se reconduce hacia la tragedia, uno de los mayores logros literarios de esta cultura, y así aparece comentado en la propia película. Carente de los míticos coros (sólo Woody Allen se atrevió en tiempos modernos a introducir esta figura anacrónica en su alocada “Poderosa Afrodita”), la última parte de la película muestra su lado más trágico hasta el punto de que podemos ver en ella una de las partes más importantes en la estructura de la tragedia: el “estásimo”. La referencia no es gratuita dada la enorme carga de “pathos” presente en la escena, ese momento en el que el autor busca influir en el juicio del espectador. Y así lo consigue Linklater hasta el punto de lograr la empatía total en el público, tan dividido como sus protagonistas a causa de la continua guerra de sexos. Así pues, partimos del tópico, pero en boca de estos personajes inolvidables logra un nivel de magia pocas veces igualada en el cine actual.

En definitiva, “Antes del anochecer” nos brinda alguno de los mejores momentos de la trilogía, lo cual no es poco, y nos obliga también a pedir nuevos instantes junto a Jesse y Céline. En que punto se encontrará su relación en los próximos años es la ya habitual incógnita que nos ofrecen sus finales abiertos. Como siempre, todo girará en torno a las dos posibilidades que ya se esgrimían en los capítulos previos, el romanticismo o el cinismo como los dos polos opuestos que determinarán si siguen juntos o no. Sea como fuere, el ciclo gana en fuerza así como se van sumando nuevos episodios, y esperemos que sigan aportándose nuevas muestras de genialidad hasta llegar a lo que podría ser una crepuscular y equivalente “Sarabande”. Nos vemos dentro de otros nueve años (y ahora ya cincuentones).
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17 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
1
Insoportable
Estuve leyendo la opinión sobre ésta película de algunas personas, me dí cuenta que las mismas arrojaron una buena puntuación,intenté encontrar alguna razón para reconsiderar mi opinión al respecto, pero no pude.
Voy directamente al punto:
A mi parecer la conversación que mantienen éstos personajes no tiene nada de original ni inteligente, la pauta la da la postura de J Delpy que hace responsable a su marido de la debacle del matrimonio...! Esa mujer necesita análisis! En su especie de monólogo (denso por demás), no escuché que haga alguna autocrítica, adoptando una postura caprichosa propia de una adolescente. Quejosa por demás, reiterativa, inmadura, cansadora, me invitaba a retirarme del cine sin ver el final..
No la recomiendo en absoluto.
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38 de 62 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
Oda a las feminazis.
Ejemplo perfecto de cómo convertir una historia romántica original y agradable en una convencional, irritante, pseudointelectual y pretenciosa. Además tiene algo que ya me cansó del cine general (y creo que también a muchos cinéfilos) que se está dando cada vez con mayor frecuencia cuya única justificación es la explotación comercial, no tiene principio ni fin. Y con esto no me refiero a que no veo el nacimiento y muerte del protagonista, como algún gracioso podría refutarme, sino que para entender la historia debo ver una película anterior y termina en una posterior, que nadie sabe cuando saldrá.
Recuerdo de cómo la primera parte me gustó ya que tenía los tópicos que tal vez se consideran adolescentes e inmaduros, pero era agradable y uno podía verse identificado, y los personajes eran queribles, puros y de buena voluntad (léase sin dobles intenciones).
En esta tercera parte todo eso desaparece, se convirtió en más de lo mismo, lo que se ve casi siempre en este tipo de películas. Los problemas familiares, las peleas, la manipulación de parte de uno y otro pensando en su propio bien, etc, etc. Obvio, porque ahora los personajes son “maduros” (aquí léase “maduro” a alguien que no sabe por qué, pero se carga de tareas y responsabilidades que no le gustan ni nadie lo obliga a hacerlo, pero hay que ser “maduro”).
Lo peor de todo es el aire pretencioso que intentan darle, haciendo transcurrir la historia en Grecia y con escenas como la conversación intelectual en la mesa, ideal para los que se regodean en sus pajas mentales pensando que después de ver películas como esta son más inteligentes y cultos; por esa misma razón no se olvidan de nombrar París, oh París olala. A esta altura si todos los personajes de películas idealizados que viven en París conicidieran en espacio y tiempo París tendría graves problemas demográficos. Hasta le dedican 5 minutos a una charla sobre donde tirar los restos de una manzana. Ni hablar del personaje de Julie Delpy, ya está todo dicho, infumable. De la chica dulce y tierna de la primera parte no queda nada. Es una loca manipuladora, insportable. Las feminazis deben estar saltando de felicidad. Debe ser un sueño hecho realidad ver un personaje así en cine y ampliamente aceptado, donde nada de lo que dice es verdad, todo es pensando y especulando en la respuesta del otro para su propio bien, lo convirtieron en un personaje odioso. Tampoco intento defender a Jesse, está donde está porque quiere, creo que al estar con alguien así también degrada su personaje porque hubiera sido impensable luego de las 2 primeras películas que la tercera se desarrolle como lo hace.
Si será aburrida y convencional que hasta tiene a las hijas rubias perfectas hermosas. Cada vez que veo una película así se me hace imposible no recordar American Beauty, cómo contrasta, le patea el culo a estos bodrios y nos ofrece una visión más amplia de la vida.
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22 de 30 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
........sin palabras
Ay..... sí, la única manera de empezar bien con esta entrada es suspirando. O haciendo esto: oáuishgnñaoi dfjgñadflgna. dlgsndñovi hnñnvb yñmoemufgjl bvukhjen ñsudhgñoaigvjn vloiunjalcoghenom :D

Aclaración: yo la he visto en versión original. Las dos anteriores las vi en español, pero no quería perder la oportunidad de verla en el cine así que la vi aquí en París en versión original. Y me alegro muchísimo, porque al subir este trailer, viendo el que estaba en español, he descubierto que a Julie Delpy le han cambiado la voz de doblaje y no hay cosa que ODIE más que eso. Y en cualquier caso, por muy bueno que sea el doblaje nunca igualará a la versión original, siempre se perderán detalles del actor que el doblador no puede imitar.

Dicho esto, voy a por ello. Esto no es cine. Esto es la VIDA MISMA. No creo que pueda hacer una crítica objetiva ni sensata, ni siquiera mínimamente ordenada, puesto que requeriría un trabajo de organización muy artificial que le quitaría espontaneidad, y eso sería traicionar la misma esencia de la película. ¿Seguro que es una película? ¿No será que Richard Linklater se ha colado con una cámara y una capa de invisibilidad en la vida de dos personas?
Todavía no me lo creo. Me dejó tan afectada que me estoy planteando ir otra vez al cine esta noche o mañana. He tratado de ver entrevistas a los actores pero ni siquiera puedo porque mi mente lo rechaza. Se pregunta: ¿qué hacen Jesse y Céline ahí, mirando a la cámara y hablándole directamente? ¿Se han dado cuenta de que llevamos 18 años espiándolos?

No hay duda de que el trabajo completo, desde la primera "Before Sunrise" hasta esta última, se ha convertido probablemente en uno de los mejores trabajos cinematográficos de la historia, y a pesar de su sencillez y naturalidad, en uno de los más ambiciosos. Como ya he leído por ahí, ojalá hagan una cuarta, ojalá podamos verles envejecer y acabar esta relación con ellos.

Los últimos 25 minutos son.... magistrales. Creo que nunca me he reído tanto, a pesar de tener ganas de llorar, y creo que nunca he visto frente a mis ojos una escena más veraz que esta. Guión y actores son dignos de Oscar. Qué demonios, el Oscar se les queda corto, eso es para actores normales, terrestres. Ellos tienen que haber venido de algún otro lado.

Para los amantes de las otras dos que tengan miedo de que la esencia se pierda: no temáis. Es diferente e igual. Siguen siendo los mismos personajes, la misma estética y el tiempo sigue siendo el eje central de la historia, de un modo u otro. Pero también son diferentes precisamente por ese tercer protagonista: el tiempo. Ya no estamos ante los Jesse y Céline que se conocieron y se enamoraron locamente. Ni ante los que volvieron a unirse tras no haberse olvidado pasados 9 años. Estamos ante una madre y un padre, y del mismo modo que J.K Rowling adaptó los libros de Harry Potter al lector que comenzó a leerlos con 9 años y terminó siendo casi un adulto, Linklater ha hecho crecer al espectador junto con sus dos personajes. Puede que haya alguno al que no le guste la evolución, alguno que todavía piense que esto es la Cenicienta y haya sido incapaz de comprender que la vida es diferente. Pero si yo, que tengo 23 años y vi las otras dos tan sólo hace un año, tuve ganas de aplaudir cuando acabó la película, estoy segura que esos serán los menos. La primera fue quizá la más romántica y tuvo un público más amplio. A mí me encantó, por supuesto, aunque probablemente cierto público hollywoodiense se sintiera decepcionado con la segunda. Pero si adoraste la segunda, como me pasó a mí, entonces vas a amar la tercera.

No puedo decir nada más, porque voy a repetirme en lo mismo. Me parece absurdo hablar de la fotografía, de los secundarios, de la banda sonora. Todo eso me da igual, eso pertenece al cine, y esto no es cine. O quizá, ESTO ES CINE, y nada más lo es.

Id a verla de una vez.

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17 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
Antes de devaluar una gran saga
Antes de eso teníamos un par de pequeñas joyas, dirigidas por Linklater (al que considero uno de los grandes cineastas de su generación, por originalidad y creatividad) y protagonizadas por Ethan Hawke y Julie Delpy, en la que conseguían implicar al espectador con poco más que diálogos constantes entre los dos protagonistas. En una clara muestra de talento, este terceto se las aviaba para resultar apasionante y creíble.
Bien, pues la mayor parte de eso desaparece en esta tercera entrega. Salvo momentos puntuales, la película está muy por debajo de sus dos predecesoras (aunque la opinión general no piensa eso, pero para mí es muy evidente). En este caso los diálogos son mucho más mecánicos, e incluso son bastante plomizos en algún momento, y eso jamás pasaba en las dos primeras.
En un determinado momento de la película, se llega a un diálogo en el que los protagonistas se enzarzan en una ridícula discusión que el personaje de Delpy se encarga de avivar con constantes referencias hacía la guerra de sexos (sin venir a cuento, la verdad) en la que suelta varios discursos feministas que resultan enormemente forzados. Y el feminismo rancio es igual de negativo que el machismo rancio, aunque lo primero esté mejor visto a día de hoy (por aquello de intentar "igualar" los siglos de machismo que ha vivido nuestra sociedad, y que a día de hoy aún perdura en algunos lugares).

Así que, bueno, sé que voy en contra de la mayoría, pero lo escribo como lo siento. La película no está mal, pero que sea seguramente la más reconocida de las tres, pues como que no, sólo lo entiendo por aquello de que 'Antes del amanecer' pasase tan de puntillas en su momento y para compensar.
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13 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
2
¿Quieres hacer el favor de callarte, por favor?.
Como otras veces, tomo un préstamo para titular una crítica. En esta ocasión, el título de una colección de relatos (que no he leído) de Raymond Carver.

No entiendo nada. ¿7´7 esta película?. Para intentar responder a esta peliaguda cuestión, tal vez nada mejor que plantear otra: ¿es posible hacer una película interesante (excluido el genero de comedia, con las dosis de mordacidad que se deseen) sobre personajes que no tienen interés alguno?. Julie Deppy insiste, en su único registro como actriz, en su detestable personaje; esta vez enriquecido con dosis de un feminismo rancio que ya no se ve ni en los telefilms vespertinos de Antena 3 de los sábados; pues no va la dama y le pregunta a su caballero ¿cómo se llama el pediatra de tus hijas?. Dado que el pobre Ethan lo ignora, el esquematismo de la dama sentencia: MACHISTA. Imagino que con alborozo de la gran mayoría de la platea femenina, y parte de la masculina que debe pedir perdón por su condición y el peso de la historia. Pero me estoy yendo de la película (Dios mío, a ver si voy a haberme contagiado de esta logorrea...).
En cuanto a él, la verdad es que vivir en París tiene su aquel, pero si es al precio de compartir domicilio con ella, preferiría vivir en Alicante, lo que ya es preferir...
Desde luego, en esta historia se habla más que en todo el cine iraní de la historia, todo junto. Se habla más que en una película argentina; se habla más que en una discusión entre Agustín Jiménez y Leo Harlem; Messi no hablará en toda su vida ni la mitad de lo que habla Delpy en cinco minutos de esta película. Esta señora me ha dejado la cabeza como un tambor de Calanda. Además, tiene mérito; tanta palabra, y ni media idea interesante.

En cuanto a quienes hayan visto intensidad en esta histeria no puedo estar más en desacuerdo. Les preguntaría como Torrente, ¿te gustan las pistolitas?, ¿te apetece ver salvajismo emocional, hard core sentimental?, ¿quieres ver dónde de verdad se hace la gente pupita duodenal?. Desempolva, por ejemplo, "La heredera"; o rescata la obra final de Bergman, "Saraband", y verás barbarie de verdad; y no en las aburridas cuitas de dos mequetrefes que no se soportan entre sí, y a los que no sé cómo los soporta el público. 7´7, no doy crédito...
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Por cierto, la realización es menos que mediocre; la localización de exteriores, (¿¿??) inexistente; la fotografía, sin interés; la música, por el estilo...
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Propuesta para un corto aprovechando la misma idea:
Él deja a su hijo en el aeropuerto después de unas vacaciones en Grecia. Vuelve al coche donde ella (que no es la madre del chaval) le espera. Él dice: "Debería pasar más tiempo con mi hijo". Ella contesta: "No pienso mudarme a Chicago". El replica (en mi propuesta): "Hemos terminado". FIN. Y mientras se proyectan los títulos de crédito, una entrada de él mirándola a ella: "Estúpida". Ahora sí que FIN...
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57 de 102 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
Conocidos en Viena, reencontrados en París, y veraneantes en el Peloponeso griego
Brillantísimos diálogos, dos actores en estado de gracia, ajustadísimas realización y producción a la historia (perfectamente) narrada, enorme capacidad de observación, e inteligentísima reflexión.

La película es más madura (al igual que lo era la segunda entrega con respecto al desenfadado e ingenuo romance juvenil de la primera), por la sencilla razón de que los extraordinarios personajes protagonistas han madurado y cargan ahora con responsabilidades, ausentes en aquellas primeras vacaciones "interaileras" vienesas, en cualquier caso encantadoras.

Antes del anochecer... qué bien sienta una copa en una terraza del sur del Peloponeso griego. La mejor entrega de una estupenda e imprescindible trilogía del cine contemporáneo.
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14 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
This is (not?) the end
Pues se acabó.
¿O quizás no? Sólo el tiempo y la entente que forman Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke dirán.
El listón estaba alto, altísimo después de Antes del amanecer y Antes del anochecer. Por ello, lo que esta película viene a demostrar es que, cuando hay talento, talento del de verdad, alcanzar la perfección una y otra vez es sencillo.
Para que se hagan una idea: me había propuesto apuntar los momentos más brillantes y las secuencias más arrebatadoras, pero a los diez minutos me he dado cuenta de que no hacía falta. Por la sencilla razón de que toda la película es tan brillante, tan hermosa, tan real y está tan viva que no hay nada que destaque por encima de lo demás. Es pura y dura perfección fílmica, desde el primer minuto hasta el último.
Con su habitual estilo de dejadez visual y sencillez extrema (la importancia está en la palabra, no en lo visual... y aun así, qué maravilla de planos-secuencia se marca el realizador), Richard Linklater nos lleva esta vez a Grecia con Jesse y Celine, y el viaje merece la pena. La gran genialidad reside en esta ocasión en que, en vez de volver a repetir el esquema del encuentro más o menos casual en una capital europea, el trío maravillas, alma y corazón de la trilogía, apuesta por presentar una situación nueva. Nunca antes habíamos visto a Jesse y Celine en la situación sentimental en la que empiezan la película, y la arriesgada apuesta no sólo sale bien, sino que demuestra de nuevo que, como guionistas, Linklater, Hawke y Delpy son insuperables. Y lo son porque los diálogos y la manera en que se describen las relaciones de pareja, de padres e hijos o las dificultades de la paternidad y la vida en común siguen rezumando una credibilidad absoluta, una verdad absolutamente real. No hay artificio, no hay frases prefabricadas, no hay cursilerías, porque tampoco las hay en la vida real. Éso es la película: la realidad más absoluta, a veces dulce, a veces amarga, como el amor y la muerte. Jesse y Celine se divierten, se hacen reír, se aman, discuten y se enfadan, y lo hacen de tal forma que hay una conexión inmediata con todos los espectadores, porque esas mismas palabras han salido de nuestra boca alguna vez en la vida. La conexión emocional con ellos es, por tanto, inmediata y muy fuerte, hasta el punto de que los recibimos en pantalla y los despedimos con una sonrisa, porque son casi como de la familia, como dos más de nuestro círculo de amigos, tan reales resultan.
Y qué decir a estas alturas sobre Hawke y Delpy como actores, salvo que la química que han desarrollado sobrepasa todo lo imaginable. Es espectacular verlos juntos, una experiencia única, por lo electrizante de sus miradas, sus gestos, la enorme confianza que tienen el uno en el otro.
En definitiva, tercera película y tercera obra maestra del equipo "Antes del". Cine cómico (es divertidísima), dramático (no pestañeen siquiera en la secuencia en el hotel, o se perderán una de las más demoledoras y brillantes discusiones de pareja jamás escritas) y romántico (si no lo digo reviento: le da una patada allá donde más duele a todos los romances adolescentes o no que pueblan hoy las pantallas y las novelas) de enorme calidad. Gracias Julie, Ethan y Richard por este regalo en tres partes. Y que sean cuatro, por favor.

Lo mejor: Todo.
Lo peor: Nada.
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12 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
3
La próxima transcurrirá en un geriátrico y se llamará Before Pills (Antes de las Pastillas)
Bodrio de culto.
Me cuesta creer las buenas críticas a esta saga de muy bajo presupuesto, filmada a los ponchazos, el único fin de semana q Ethan Hawke y Julie Delphy coincidían libres y donde el director y productor Richard Linklater andaba flojo de dinero para las locaciones, y consiguió lo más barato que había en Grecia.
Excepto la buena nueva del comienzo, es una tortura el desarrollo, era todo el tiempo escuchar a una mina en actitud adolescente, que no quedó bien con su cuerpo después de ser madre, que todo ve mal, y vive histérica quejándose de todo y por todo.
Lo peor es q vuelve a tener final abierto.
Y bueno, la próxima será dentro de 20 años y transcurrirá en un geriátrico y se llamará Before Pills ( Antes de las Pastillas ).
Con esta película confirmé lo del Cine de Culto, donde los cultores de una forma casi insostenible, tal cual hinchas de fútbol, defienden cualquier libreto que proponga su director de culto o cualquier papel que interpreten sus actores de culto.
Por lo menos a mí no me vuelven a agarrar !!!
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30 de 51 usuarios han encontrado esta crítica útil
3
Nunca más me fío de las críticas
Sinceramente, quizás mis expectativas eran demasiado elevadas por las altas valoraciones de esta película en FilmAffinity, pero aún así creo que si hubiera ido a verla sin saber nada antes mis reflexiones hubieran sido las mismas. Se trata de la teatralización (porque parece una obra de teatro) de un día cualquiera en la vida de una pareja que después de varios años de convivencia comienza la tan común fase de los reproches. La única circunstancia anormal en esta situación es que los protagonistas se pasan hablando en distintos tonos pasando de la cordialidad a la discusión sin intermedios durante toda la cinta. Insoportable. Me pasé toda la película esperando que pase algo, pero no pasa nada. Y quien piense que al menos la ambientación en Grecia aportará algo de estética se equivoca, los planos exteriores se cuentan con los dedos de una mano. debo decir que eésta película no me ha aportado absolutamente nada, salvo ganas de demandar a la protagonista por cretina.
La próxima vez, leeré primero las críticas de peor valoración, me parece que son bastante más razonables la mayor parte de las veces.
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20 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
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