38 Críticas de los usuarios

Parece que en el cine español se ha instaurado la idea (quizá cierta) de que para obtener el éxito comercial hay que hacer comedietas con cuatro gracias de barrio, que a veces rozan el ridículo por tópicas y facilonas, y "hablar" en apariencia (sin ningún tipo de profundización o espíritu crítico más allá del convencionalismo, la corrección política y la falsa modernidad) de temas relevantes del mundo de hoy.

Y eso es Thi Mai... Otra más...

La directora Patricia Ferreira nos presenta su nuevo largometraje, una comedia dramática muy bien interpretada por todo su elenco de actores. Entre los trabajos anteriores de la directora cabe destacar “Sé Quién Eres”, “El Alquimista impaciente” y su trabajo más reconocido hasta la fecha “Los Niños Salvajes” con la que logró varios premios en el festival de cine de Málaga.

Nos cuenta la historia de Carmen (Carmen Machi) que tras perder a su hija María en un accidente, recibe una carta de la agencia de adopción en la que por fin le conceden a María una niña vietnamita.
A partir de ese momento decide junto a sus dos mejores amigas Rosa y Elvira (Adriana Ozores y Aitana Sánchez Gijón) viajar a Vietnam para completar el proceso de adopción. Una vez allí, su inexperiencia, el choque cultural y las peculiaridades de cada una de las tres mujeres convierten el viaje en una sucesión de situaciones disparatadas y decisiones delirantes.

A toda esta aventura se les unirá Dan, un guía viernamita, que demuestra que tiene buen corazón y Andrés ( Dani Rovira), un joven actor español que viaja a Hanoi para reencontrarse con su pareja.

La cinta se mueve todo el rato entre el drama y la comedia, podemos decir que todo lo que va sucediendo es como la vida misma. Es una película para agradar al espectador, que en todo momento se siente cómodo.
La directora sabe tocar muy bien el fondo de los personajes y consigue sacar lo mejor de cada una de ellas, con sus traumas y debilidades. El trió protagonista femenino tienen una gran química entre ellas y junta poseen una fuerza y una ternura increíble.

En definitiva es una divertida historia de amor y un viaje de aventuras de una madre que no quiere renunciar a su derecho de ser abuela y de cómo la esperanza, la amistad y las buenas personas que se va encontrando por el camino, siempre pueden con todas las desgracias.

Lo mejor: La química de las tres actrices protagonistas.
Lo peor: Quizás Dani Rovira, sin estar mal, podría estar mejor.

Podríamos decir que "Thi Mai" posee una base profundamente dramática, base por la que transitan -fundamentalmente- tres personajes a los que les ocurren cosas graciosas, típicas en cualquier viaje a un país exótico del que no entiendes el idioma ni conoces su cultura.

Los dos aspectos negativos que encontré en la película fueron el exceso de tópicos -aunque muchos funcionan- y (a modo muy personal) un abuso de las complicaciones para las adopciones para que después no sea para tanto. Tuve la sensación de que tejieron una historia muy engorrosa para hacerla más creíble pero que se va al traste porque al final todo acaba bien.

El argumento es potente. Me explico: que una mujer se encuentre en la tesitura de que le han concedido la adopción de una niña vietnamita a su hija, fallecida recientemente en un accidente de coche, y quiera ir a buscarla porque la siente -de alguna manera- como su nieta me parece un asunto intenso, interesante y poderoso.

Celebro sus protagonistas, tres grandes actrices de más de 50 años. ¡Aleluya! Carmen Machi sustenta la película. Hace años que dejó su Aída para convertirse en una gran dramática, consiguiendo emocionarme en distintos momentos del metraje. Aitana Sánchez-Gijón hace de una fracasada resentida con la vida y alérgica a la ternura. Quizás interpreta al personaje menos carismático para el gran público, pero a mi me encantó. Además, Aitana siempre es bien. Y, por último, la gran sorpresa: Adriana Ozores. Bueno, una sorpresa a medias. Ya sabía que era una buena actriz, su credibilidad es una de sus permanentes virtudes, pero no esperaba tanto. La Ozores convierte lo que podría ser un -con perdón- mojón de personaje (estirada, carca, inculta...) en una delicia (graciosa, entrañable, apasionada...). Espléndido trío.

Dani Rovira me sobra. A pesar de que me gusta como actor y hace una actuación correcta, sospecho que ha sido contratado para llevar a más espectadores al cine, estrategia que me horroriza. Su personaje no aporta casi nada, Carmen, Aitana y Adriana están estupendamente solas, no necesitan ningún apoyo. Pedro Casablanc y Eric Nguyen, en cambio, me parecieron más que correctos.

Me he reído y me he emocionado a partes iguales. No es un peliculón, pero las sensaciones al verla -y al recordarla- son muy positivas.

PD: Vietnam es el otro gran protagonista de "Thi Mai". Atractivo, salvaje, bello y caótico. Dan ganas de cogerse un avión y perderse por Hanoi y enamorarse de la bahía de Ha-Long.

Demasiado previsible, no aporta nada nuevo ni interesante. Sus personajes son menos creíbles que los de una peli de ciencia ficción. Es lacrimógena, ñoña, simple y muy facilona.
Las actrices, muy buenas, sin duda, pero la peli no se sostiene por ningún sitio.

la última pelícua de Patricia Ferreira ha resultado ser un film irregular sin marcha y sin fondo... Cuando sale e la superficie para profundizar en la vida de los personajes es cuando mejor esta la película. Pero en cuando se mete en la comedia se ve claramente la falta de lógica en muchas ocasiones. Los actores están muy bien sobre todo ellas. Aunque en principio no sabemos que pinta Dani Rovira tardamos bastante en averiguarlo...Un film rodado en Vietnam por lo tanto creo que es difícil rodar por ahí si no me equivoco. Es la primera película española rodada allí según he leido. Así que imagino que le habra costado llevar adelante su película.

Típica película española que intenta contar algo y se queda en eso... en el intento.
Tengo un hermano que adoptó un niño hace pocos años en aquellos lugares (por eso la he visto)... y obviamente no vivió ninguna de esas situaciones... en fin... una peli que a algunos les va a entretener y a otros (como a mí) les va a aburrir sobremanera.

Me ha mantenido atenta desde el principio al fin. Las actrices y actores han mostrado sus habilidades para pasar de un contexto trágico a otro cómico con maestría. La ambientación muy grata y apetecible para conocer Vietnam. La temática muy de actualidad con respecto a las adopciones y el reflejo de las relaciones conyugales y de padres e hijos. El guionista muy bueno plasmando las diferentes vidas de cada personaje, su solidaridad y empatía con la causa que les lleva a Vietnam resaltando la amistad. La directora sabe plasmar las distintas personalidades de cada mujer y el deseo por superarse en sus vidas con los retos que marca la sociedad.
He salido del cine con una sonrisa y una lágrima en la mejilla y por todo ello, merece la pena ver esta película. Me lo he pasado fenomenal.
Aquellos espectadores que puntúan este film de forma tan baja, me sorprenden, porque tanto el trailer como la sinopsis resumen fielmente como es. Es una película que te hace pasar 90 minutos muy agradables, divertidos, emotivos y simpáticos. Ideal para desconectar de la realidad y salir con una sonrisa del cine. Los actores bordan el papel que les toca realizar aunque haya tópicos. La película mantiene el ritmo y la atención del espectador.
Seguro que si está película fuera americana, con actores famosos de habla inglesa, con el respaldo publicitario y económico de las productoras americanas, las críticas serían maravillosas.

Cuando ve el elenco de actores y el trailer de la película, lo primero que piensas es que estamos ante otra comedia española.

La realidad es que desde el principio nos van dejando claro que no sabían muy bien qué estaban rodando, intentando colarnos momentos de humor(?) con otros más dramáticos.
Pero el humor es flojo, muy flojo, como si ese día el guionista no tuviese motivo alguno de alegría, por lo que recurre a topicazos para momentos puntuales.
Y los momentos dramáticos llegan como en esas películas del mediodía, las típicas películas para siesta, de improviso y sin venir a cuento en un intento por ganarse nuestro interés.

Todo esto supone que el producto final, lo que se exhibe en el cine, navega por tierra de nadie, sin decidirse nunca a contarnos nada que nos haga empatizar o interesarnos por lo que está pasando, para llegar a un momento que de previsible supone más alivio por llegar al final de la película que por cualquier otra cosa.

El título de mi comentario podría parecer un elogio pero no lo es. THI MAI es una película pasable con una historia extraordinaria, unas actrices de primera, unos secundarios de lujo, un diseño de producción loable...y un guión malo o un montaje malo o las dos cosas.
Partiendo de una premisa muy interesante y con ese esfuerzo de producción es muy difícil fallar pero Patricia Ferreira lo ha hecho. Todo resulta monótono, frío, políticamente correcto. Y es en esa corrección en la que se le ve el cartoncillo, el corta-pega.
Carmen Machi y Pedro Casablanc son lo mejor de la película sin duda. Ponen carne a unos personajes que viven a pesar de la desgracia más ella que el, pero las personas que les acompañan en la aventura/desventura no están a la altura por culpa de un guión lleno de tópìcos y con sentido de humor de peluquería pija.
No es mala pero podía haber sido muy buena.

Es tan políticamente correcta que queda todo muy forzado y se nota que busca la lágrima fácil a toda costa en el espectador. Me parece aceptable dentro de lo que estamos acostumbrados a ver en el cine español. No es que sea un gran comedia (hay un par de gags con humor de cuñados que me han dado vergüencita) pero por lo menos nos muestra algo diferente como es la dura realidad de un proceso de adopción y nos lleva a un país exótico como Vietnam que nos regala planos muy bonitos. Las actuaciones por lo general son buenas y destaca precisamente por tener un reparto mayoritariamente femenino.

Mi conclusión es que te hace pasar un rato agradable pero al día siguiente ya la has olvidado.

Siendo una película cargada de tópicos e incluso cayendo en varias ocasiones en la sensiblería y en la previsibilidad, hay que destacar, por un lado, la realidad social que nos acerca con el tema de las adopciones, y por otro la estupenda química que se produce entre Carmen Machi, siempre solvente en estos papeles, Adriana Ozores (una estupenda actriz en casi todos sus registros), y Aitana Sánchez-Gijón que vuelve, una vez más, a estar soberbia.

Otro intento fallido de reflotar un cine de comedieta, que es lo mismo que en otras épocas: Gracita Morales, Manolo Escobar, Andrés Pajares, Dani Rovira, Carmen Machi...
Más de lo mismo y sin ninguna gracia, solo para defensores de lo indefendible.
Así, no progresamos o tal vez no se quiera progresar y por eso se sigue produciendo peliculas de los años 60 con medios del siglo XXI.
Otra cosa es si debemos darle categoria de actores a ciertos personajes.
Mirándolo por otro lado, tal vez mejor que trabajen estos y así el paro tiene menos gente en sus listas, aunque tal vez merecerian estar en las listas del paro.
Totalmente obviable y predecible.

Alrededor de esta película (y de otras, que no es al caso recordar ahora) tiene uno la sensación de que será muy difícil encontrar críticas amables, positivas, bienintencionadas. Creo, además, que siendo española (y no made in USA o francesa, por ejemplo) enseguida sacamos el flagelo y nos azotamos con las severas medidas del arte de la buena comedia. También resultará irresistible el deseo de calificar la película de comedieta facilona, almibarada y predecible. Sin embargo, una directora con oficio nos demuestra que para ofrecer una buena película no hace falta mover la cámara como si tuviera el aire de san vito, abusar de efectos sonoros estridentes, actuaciones pasadas de vueltas, sorprendentes (se suponen!!) giros de guion y música atronadora y sobrecontextualixada. Basta con saber colocar la cámara, entender que el plano contraplano de toda la vida funciona a las mil maravillas cuando se hace con cordura, conocer lo que es una buena puesta en escena y una eficaz dirección de actores y, sobre, todo, tener algo que contar. Si, con estos cestos, al espectador le robas unas cuantas sonrisas y le transmites la emociones que la historia merece, entonces es que has hecho diana. Habrá otros directores (españoles y extranjeros) que nos abrumarán con su "estilo", con sus audaces movimientos de cámara, sus interpretaciones de "oscar" y una cutre "modernidad" y, vive dios, que engañarán a unos cuantos. Pero no a todos. Esta película es buena, sí; por todo lo que se ha explicado.

Admito que no tenía muchas expectativas con "Thi Mai" (pues el cine español me ha defraudado en tantas ocasiones, que ya voy a las salas con cierto recelo hacia el cine patrio), y no solo por mi caso particular las expectativas eran bajas, pues todos los anuncios han presentado a esta cinta como una comedia costumbrista hecha para una mera distracción leve y un par de risas. Por fortuna "Thi Mai" es algo más.

Como comedia pudo ser una concatenación de chasquarrillos mal repartidos con una trama revista, superficial y manida, sin embargo el film muestra un equilibrio argumental tan logrado como eficaz.

La cinta nos describe a tres mujeres navarras (ya era hora de que el cine español situara una de sus cintas en esta bella región, y no lo digo solo por tener familia allí, jeje) "cincuentonas" que deciden emprender un viaje a Hanoi (Vietnam) para adoptar a una niña que por desgracia debía haber sido la hija de una española fallecida (no diré más para no dar spoilers). El film pudo quedarse tan solo en una propuesta, una declaración de intenciones, pero resulta eficiente, vigoroso, activo y evolutivo.

Patricia Ferreira decide no dar respiro al espectador ni en la aventura exótica, ni en la comedia ni en el drama, pues todo en "Thi Mai" sucede con pujanza e ímpetu. La trama avanza siempre a un paso de lo más dinámico y la cinta resulta entretenida siempre, siempre están sucediendo o bien acontecimientos divertidos (unos más que otros), o bien segundos de sutil terneza o bien una exploración elegante y de lo más plástica de Hanoi y sus alrededores. No es que Ferreira ofrezca planos novedosos o arriesgados, sin embargo siempre acierta en cada elección a la hora de enfocar a su trío protagonista o a sus bonitos paisajes. La edición de la cinta es muy precisa, la fotografía con cierta saturación del color es atractiva y completamente idónea respecto al tono del film (una comedia con toques de ternura cuyo fin es hacer que el espectador pase un buen rato y salga feliz del cine).

Así que la puesta en escena es uno de los pilares que ayudan a enaltecer esa historia sencilla pero bien contada. El guión evidentemente no es "El padrino" (sino le hubiera puesto un 10, lógicamente) y no nos va a dejar poso, pero en una comedia de este tipo me conformo con que sea capaz de ensamblar sus situaciones con coherencia y avidez (cosa que hace), dando a la trama una cohesión siempre necesaria. La construcción de los personajes es muy básica y la situación en la que se encuentran también, sin embargo la historia serpentea con progreso y soltura, y todos los personajes siempre nos ofrecen momentos o bien simpáticos, o bien sutilmente dramáticos (eso se debe más al oficio de sus 3 intérpretes) o bien hilarantes (la sala (y me incluyo) se rió más veces de las que puedo contar con las manos). El humor se denota fresco y atinado en casi todo momento, la conclusión es coherente y no sobra ni falta un solo personaje o situación (quizás parezca poco exigente, pero es que hay comedias que ni eso).

Pero evidentemente "Thi Mai" es un vehículo de lucimiento para tres de las mejores actrices de nuestro panorama actual (que además comparten química en la pantalla). Carmen Machi es la protagonista y ya no me sorprende a estas alturas que sea capaz de ofrecer ciertas situaciones de delicado afecto dramático que empapan al espectador (atención a ese breve pero intenso desenlace), Adriana Ozores (la razón por la que fuí a ver la cinta, pues me declaro completamente fan) se luce sobremanera en el papel cómico del film (que no tiene todas las dimensiones y matices que una intérprete como ella merece en un personaje, ¡pero qué se le va a hacer!), y eso que es una actriz que lo que se le da de cine (nunca mejor dicho) es el drama (¡ay!, cuanto hecho de menos un rol para ella como los de "La suerte dormida" (2003), "Héctor" (2004) o "Gran Hotel" (2011-13)) y Aitana Sánchez-Gijón (otra pedazo de actriz) tiene el papel menos lucido y aun así cumple con corrección. Por la cinta también pasan nombres tan carismáticos como Dani Rovira (que también arranca risas con la personalidad guasona de su personaje). Sus tres protagonistas (en especial Machi y Ozores) elevan un libreto que tiene una calidad media (es ciertamente superficial y circunstancial, y tiene margen de mejora... pero resulta engranado en el desarrollo de su trama, y es lo suficientemente ingenioso en sus situaciones).

En fin, es una comedia dinámica y resuelta, que cuida sus detalles para lograr el efecto deseado en el espectador (el entretenimiento agradable y carcajeante... con cierta ternura sutil que hará que algunos/as suelten la lagrimita) y que se alza gracias a unas interpretaciones notables (pero teniendo en cartel los nombres Machi, Ozores y Sáchez-Gijón, este nivel interpretativo es lo normal).

La recomiendo si se quiere pasar un rato agradable, reírse con complicidad, disfrutar del talento interpretativo español y salir del cine con un buen sabor de boca. No es el súmun de la comedia (esto no es "Con faldas y a lo loco" (1959)) pero al buen nivel de films como la francesa "Bienvenidos al Norte" (2008), la americana "A propósito de Schimdt" (2002) o la trilogía de "Resacón en Las Vegas" (cintas a las que se puede comparar en su temática) si está. Me ha gustado más que la última comedia española que he visto ("Toc Toc" (2017)) y eso que aquella no es de las peores comedias españolas precisamente (más bien al contrario).

Así de gusto empezar mi año cinematográfico. Y más gusto al ver que la sala de cine estaba prácticamente llena (se ve que hay cierto boca-oreja con la cinta, el público va a ver cine español... si lo merece como en este caso).

Lo mejor: Las interpretaciones de Machi (en sus momentos dramáticos) y Ozores (con una comicidad completamente descarada e irreflexiva), la cadencia y el ritmo de la cinta, ciertas salidas cómicas...

Vamos a ver Carmen Machi, como puedes tener la desfachatez de decir que la gente no va a ver cine español y despues nos haces esto.
Guión patetico, trama absurda, interpretaciones mediocres. Lo tiene todo si lo que quieres es hundirte el mes.
Mencion especial a Adriana Ozores, su papel es con diferencia el peor. Y se cree hasta graciosa. Dani Rovira (raton) ni voy a calificarlo porque es el único que no atenta contra la profesión. Ya que él no es actor.

Patricia Ferreira lleva ya muchos años dedicándose a la dirección, pero aún no ha conseguido el éxito que anda buscando.

En esta ocasión se ha rodeado de un reparto de lujo para una película que a primera vista tiene un sentido moral profundo y con bastante que decir y ofrecer sobre un tema muy serio.

Una vez vista la película la primera sensación es de decepción ya que la cinta no cumple con lo que uno puede esperar de ella. La historia es bastante lineal, previsible y sin el alma que parecía tener. En lugar de todo esto, tenemos unas historia bastante forzada, con diálogos básicos y sin momentos de realismo convincente.

La película quiere tratar a golpe de comedia absurda un tema con bastante relevancia, pero para ello, no es capaz de tomarse las cosas desde la misma manera. Un trío femenino que nos deja inertes en la butaca y un Rovira metido con calzador son los ingredientes de una apuesta que no ofrecerá más que algunos momentos de sonrisas y poco más, ya que la historia no profundiza en sus entrañas, y simplemente raspa la corteza superficial,lo que provoca que el espectador no logre entrar en la historia.

Tampoco los decorados, fotografía y paisajes de vietnam logran provocar una simple reacción positiva del espectador que para cuando llegue la recta final, todo estará tan destilado que nada podrá sorprenderle.

Como conclusión podemos decir que estamos ante una película que dejará indiferente a quien la vea, carece de la fuerza y pasión como ser considerada como algo digno que recomendar. Una gran decepción y un reparto muy desaprovechado.

Lo mejor: En algunos momentos quiere remontar el vuelo
Lo peor: Que no se apueste por el drama puro
Recomendada: NO

@cineypunto

Ya son diez años en ésta web y aún sigo flipando con las cosas que se ven por aquí. La nota de ésta película es una de ellas.

La historia es de radiante actualidad, las adopciones de niños orientales. Donde aprovecho para hacer una queja pública. Como se negocia con el futuro y una mejor vida de estas criaturas. Un país, me da igual, China, Japón o Vietnam, donde hay un conjunto de niños sin futuro por no contar con una familia y el país en lugar de poner facilidades para quitarse ese problema de arriba y hacer feliz a unas personas, se lucra de ello. Conozco un compañero de trabajo que pagó dos millones de pesetas por su hija. Como comprar ganado, una vergüenza.

Patricia Ferreira no nos trae un melodrama, que la gente no se confunda. Pero si tiene sus momentos moñas y sensibles. Pero lo mejor de todo es que trata la historia desde la comedia, quitándole hierro al asunto, y ¿cómo lo logra? Pues rodeándose de un elenco de actores cómicos donde el papel principal lo lleva Carmen Machi, rodeada de un séquito de secundarios a la altura, una Adriana Ozores siempre magnífica y Aitana Sánchez-Gijón que se maneja aquí como pez en el agua, es mucho más que una cara bonita, aunque a algunos les cuesta verlo. Muchos fliparon con la participación de Dani Rovira, no sale los minutos que a mi me hubiese gustado, pero aprovecha cada segundo que sale en pantalla. Este chaval es un crack de la comedia.

Me ha encantado ver a Pedro Casablanc en el papel de padre frustrado y triste, convirtiéndose en la antítesis del resto de protagonistas más inclinados hacia la comedia.

Ha sido un acierto rodar en exteriores y localizaciones reales, aprovechando la situación para interactuar con todo ello o darle más profundidad y realidad a la historia.

Yo me lo he pasado genial. Muy recomendable.

Vaya antes que nada que no es una película aburrida. Me atrevería a decir que tampoco es una película fallida. Pero no es suficiente para darle un aprobado. El triunvirato femenino tiene sus momentos, pero Carmen Machi no es capaz de aguantar el chaparrón de una Aitana Sánchez-Gijón con más tablas ni de una Adriana Ozores que nos regala los momentos más "agradables" de la historia.

Rodar en Vietnam no debe ser fácil, ni barato. De ahí el mérito de Patricia Ferreira, cuya dirección no es para nada arriesgada y recurre a lo práctico y a lo sensible para calar en el espectador. Lo de Dani Rovira como la especia de todas las salsas ya empieza a cansar, y hay que decirle que no, no es para nada buen actor. Se redunda bastante en su propio personaje, en su manera de actuar como si estuviese recitando uno de sus monólogos.

La historia se centra en la adopción de una niña vietnamita y en las peripecias de dicha adopción. Los momentos divertidos son escasos, los gags pobres y la sensiblería de la narración es bastante lineal y recurre muchísimo a los tópicos.

En resumen, una película olvidable que se hace amena por la ambientación vietnamita y por poco más. Aunque, siendo honestos, el intento ha sido casi bueno.

Me ha costado mucho darle una oportunidad a esta cinta, en su día no fui al cine porque no me llamaba, pero en la actualidad le di una oportunidad a través de mi suscripción en Netflix.

La película no es para nada recomendable, me alegro de no pagar por ir al cine en su momento.

Argumento soso, sin chispa y en ocasiones sin sentido. Carmen Machi cumple con un aprobado raspado, pues no ha sido su mejor papel, pero tampoco ha sido un desastre de papel. El resto de actores no han realizado un buen trabajo, incluso Dani Rovira roza el ridículo con una interpretación forzada y sin nada de gracia.

Sin revelar el argumento, solo comentaré que lo único potable de la película es que se muestra la dura realidad y dificultad de los procesos de adopción.

En definitiva, una película sin sentido que no merece la pena.

Intento de comedia que se queda tan sólo en eso, en intento. Lo peor de todo el guión, comedia facilona que no logra sacar ni una mínima sonrisa, a la que hay que añadir ciertos tintes dramáticos poco creíbles. Parece que quiere seguir la línea de Perdiendo el Norte, es decir las aventuras y desventuras de un grupo de españoles sin nociones de inglés, en otro país, sin lograrlo. Hay momentos en los que uno pasa vergüenza ajena viendo a las tres marujas y al despechado gay. Una absoluta pérdida de tiempo.