arrow
Críticas ordenadas por:
American Horror Story: Asylum (Miniserie de TV)
American Horror Story: Asylum (2012)
Miniserie
  • 7,5
    21.606
  • Estados Unidos Ryan Murphy (Creador), Brad Falchuk (Creador) ...
  • Jessica Lange, Sarah Paulson, Zachary Quinto ...
7
Padre...
Segunda temporada de American Horror Story, en este caso con Asylum para distinguirla de la primera. Con un reparto casi idéntico, la historia no tiene nada que ver con la de la primera temporada.

Ryan Murphy y Brad Falchuk hacen un buen trabajo con su original propuesta de utilizar el terror (muy ligero en este caso) como único punto en común entre las temporadas de la serie. En Asylum, todo se vuelve más dramático, como intentando tener más peso personal. El terror puro y duro se queda escondido y da paso a la tensión y al sufrimiento pese a contar con elementos paranormales que podrían haber dado algo más de juego. El mayor acierto de Asylum es su capacidad para ir cerrando tramas sin dejar cabos sueltos; eso es, al mismo tiempo, su mayor error, puesto que la precipitación hace acto de presencia y algunas de las subtramas se cierran sin exprimir ni la décima parte de su potencial. El inicio de la serie es brillante y los capítulos tienen varios picos de calidad bastante altos, sobretodo los últimos. Sin embargo, pese al aura de misterio paranormal que da imagen a la serie, su historia principal no está demasiado lejos, en la base, del de cualquier culebrón. La factura estética está lograda y la cancioncilla cala en el espectador, dos puntos muy a su favor.

Jessica Lange sigue siendo la reina de la serie con un trabajo majestuoso, imprimiendo detalles minúsculos pero necesarios a cada una de las fases de su personaje. Zachary Quinto está correcto y mejora cuando se revela su verdadero yo. Sarah Paulson es la protagonista de la serie y su trabajo, en mi opinión, es muy irregular, hasta un nivel alarmante. Evan Peters está muy acertado aunque su personaje no ofrece tanta chica como el que interpretó en la primera temporada, lo que corta un poco su aportación. Joseph Fienness está a un nivel altísimo, exprimiendo al máximo un personaje tan interesante por potencial como insulso por aportación. Lizzie Brocheré está más que notable dentro de un personaje que tampoco tiene demasiado atractivo. DOCTOR tiene un halo de mal rollo en su mirada que es suficiente para dar forma a su personaje. Lily Rabe es, junto a Jessica Lange, la estrella de esta temporada en un trabajo lleno de extremos en los que el matiz es lo más importante. Frances Conroy sigue brillando en su corto papel y Dylan McDermott aparece mediada la temporada para aportar un muy buen trabajo.

Resumiendo: American Horror Story: Asylum presenta una historia de terror más real, por así decirlo, que el que vimos en la primera temporada. Nos da un miedo que no nos es ajeno con sufrimiento, dolor y pérdida. Su problema radica en que concluye las preguntas antes de que el espectador tenga tiempo de disfrutar de su propia reflexión mientras busca la respuesta.
[Leer más +]
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
American Horror Story: Coven (Miniserie de TV)
American Horror Story: Coven (2013)
Miniserie
  • 6,5
    13.272
  • Estados Unidos Ryan Murphy (Creador), Brad Falchuk (Creador) ...
  • Jessica Lange, Angela Bassett, Kathy Bates ...
7
Stevie Nicks...
Coven es la coletilla de la tercera temporada de la exitosa serie American Horror Story. Siguiendo con las líneas maestras de sus predecesoras, Coven nos presenta una historia de brujas, fantasmas, voodoo y zombis entretenidísima.

Ryan Murphy y Brad Falchuk son también los maestros pensantes de Coven y nos preparan una tormenta perfecta de sadismo, gore, sexo y humor macabro. En Coven encontramos planos de lo más perturbadores y travellings que imprimen inquietud en el espectador, asi como un guion en el que reina una aparente improvisación (que no es tal) que dota de frescura a la serie. La historia de Coven, al igual que la de sus dos predecesoras, abre infinidad de misterios y de preguntas con las que entretener al espectador y, en esta ocasión, a diferencia de ambas, las alarga en el tiempo tanto como puede creando un ambiente enrarecido en el que nunca sabemos muy bien qué es lo que está pasando. Los efectos visuales son uno de los puntos fuertes de la serie, así como su capacidad para inquietar y proponer carcajadas al espectador casi de manera simultanea. Los episodios dirigidos por Alfonso Gomez-Rejon son, para mi gusto, los que más calidad visual y mejor técnica ofrecen. Si algo se le puede reprochar a Coven con relativa dureza es su previsible, insulso y carente de sentido desenlace.

Jessica Lange es un angel al que uno nunca se cansa de ver en pantalla y en Coven lo suyo es una delicia sobrehumana. Kathy Bates, otro monstruo interpretativo, aporta una fuerza descomunal en cada una de sus apariciones. Con Sarah Paulson la cosa empieza a derrumbarse con motivo de un personaje flojo y una interpretación que no lo hace crecer. Angela Basset se pasa 50 pueblos, tres ciudades y dos granjas con su sobreactuadísimo trabajo que supera, para mal, lo que pide su ya de por sí enérgico personaje. Taissa Farmiga va de más a menos, perdiendo fuelle al mismo ritmo que su personaje y demostrando que es una tendencia clara entre el reparto eso de dejarse llevar por el personaje hasta perder los aportes propios del intérprete. Lily Rabe baja bruscamente su nivel con respecto a la segunda temporada. Gabourey Sidibe está correcta (mucho mejor que en la sobrevaloradísima Precious), así como Jamie Brewer. Emma Roberts es un cliché absoluto, algo que busca ser parodiado desde la concepción de su personaje pero que la actriz reduce, por momentos, hasta su mínima expresión, convirtiéndose en aquello de lo que se ríe. Frances Conroy vuelve a estar absolutamente magistral. Evan Peters puede salir del hoyo mediada la temporada para dejar un trabajo muy notable y Denis O'Hare hace una aportación brillante para cerrar el reparto principal.

Resumiendo: Coven es menos inquietante que Asylum y menos sorprendente que la primera American Horror Story, pero supera a ambas en capacidad técnica y en sentido del ritmo, pese a que adolece de un entramado tan enmarañado como se le podría exigir. En general, mantiene el nivel de la serie, haciendo media con las cosas que mejora de sus predecesoras y los apartados en las que las supera.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
The Amazing Spider-Man 2: El poder de Electro
The Amazing Spider-Man 2: El poder de Electro (2014)
  • 5,7
    31.351
  • Estados Unidos Marc Webb
  • Andrew Garfield, Emma Stone, Jamie Foxx ...
3
Llamad a Jack el Destripador...
The Amazing Spider-Man 2: El poder de Electro es la segunda entrega del reboot de las películas del hombre araña. Cuando se anunció dicho reboot y su reparto, todo hacía presagiar una serie de películas románticas con presupuesto escandaloso pero, para sorpresa de la mayoría, la primera entrega resultó ser un producto muy notable. En esta segunda, sin embargo, todo se vuelve descaradamente pasteloso.

Marc Webb dirige de nuevo la secuela y James Vanderbilt es el único de los guionistas de la primera que repite. No hay nada en el trabajo de Webb que merezca ser destacado de forma positiva, y cuando digo nada quiero decir nada. El trabajo con ordenador es una pasada, algo que ya vimos en la primera, pero a partir de ahí todo se vuelve espeso, insustancial, refrito, soporífero incluso. Dice Peter Parker a Harry Osborn que "Spider-Man da esperanza" y en eso coincido totalmente, puesto que los minutos en los que el héroe aparece con máscara son lo único minimamente (y cogido con pinzas) aceptable. El melodrama entre el protagonista y su novia, convertido en una competición de pedantería, sofríe las neuronas a marchas forzadas y los secundarios aparecen para soltar slogans que suenan a sentencias mientras el perpetuo aire de videoclip envuelve una escena tras otra. Para colmo, tenemos a un villano, Electro (que toda la puta vida ha sido el Shocker), que es una mezcla leprosa del Dr. Manhattan (Watchmen) y Pinhead (Hellraiser) y que está mal gestado tanto antes de ser Shocker como después, siendo un títere de ese gran villano llamado Estereotipo. Para colmo, el amigo Webb abusa de la cámara lenta en un intento (tan descarado como torpe) de encontrar la magia de secuencias vistas en películas como 300, Sin City o la anteriormente mentada Watchmen.

Andrew Garfield ya perdía puntos cuando tenía que ponerse sentimental en la primera película y aquí, que cuando se quita la máscara se dedica a jornada completa a poner carantoñas, realiza un trabajo de lo más decepcionante. Emma Stone también se viene abajo, supongo que siguiendo la inercia de una historia y una producción totalmente incoherentes. Jamie Foxx, oculto bajo luces de lámpara de gitana de feria, está a un nivel casi insultante para lo que suele ser este monstruo interpretativo, con una labor entre mala y de puta pena. Sally Field se ve atrapada en la enorme montaña de porquería que envuelve a un personaje que parece tener como único plan el de aparecer en el momento justo para dar lecciones de vida, algo contra lo que la actriz poco puede hacer. Paul Giamatti, en su corto papel (que tendrá más relevancia, a priori, en la tercera película), es el mejor de un reparto que descansa parte de su flojo trabajo en el desastroso concepto de personalidad de cada uno de los personajes. Dane DeHaan, por su parte, representa fielmente lo que es la película: un desastre incluso en la elección del casting de uno de los principales personajes.

Resumiendo: The Amazing Spider-Man 2: El poder de Electro es, desde el título en su versión española hasta los chistes en las azoteas sobre que aún no han atrapado a Jack el Destripador, un bodrio de campeonato. Podría haber sido mala, a secas, en caso de haber cumplido las expectativas creadas antes de estrenar la primera película de la saga, pero puesto que lo primero que vimos fue un producto de calidad en casi todos los apartados, esta segunda entrega carga sobre sus hombros con el pésimo trabajo de producción y con la mala suerte de suceder a una película que sorprendió a más de uno. Una de cal y una de arena para Marc Webb.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ocho apellidos vascos
Ocho apellidos vascos (2014)
  • 6,0
    85.075
  • España Emilio Martínez-Lázaro
  • Dani Rovira, Clara Lago, Carmen Machi ...
3
Vaya ñordo, Patxi... E' un mojón, quillo...
Ocho apellidos vascos es la película española más taquillera de la historia en España. ¿El motivo? La agresiva, casi violenta, campaña de Mediaset, que puso la pasta, para colarnos el trailer 70 veces al día.

Emilio Martínez-Lázaro dirige este truño en el que la repetición, ahondamiento y casi ahogamiento de los estereotipos se pasa de rosca o, como mínimo, no se lleva nada bien. La película arranca bastante bien, dejando clara la hoja de ruta que va a seguir, con una vasca que dice "hostia esto, hostia lo otro" y con un andaluz que cuenta chistes. Eso está bien, hace gracia, pero al avanzar la película, uno espera un poco más de chicha, un poco más de inventiva, de imaginación, de humor, al fin y al cabo. Pero eso no pasa. El guion de Borja Cobeaga y Diego San José se estanca, se gusta tanto a sí mismo que se pone a hacerse la ola delante del espejo y de ahí no pasa. Todo es repetitivo, trillado, refrito de la cena que acabamos de cenar. Martínez-Lázaro se aferra al guion como un mono a una rama y se sube al carro de los que encuentran diversión en lo que nos cuentan Cobeaga y San José, por lo que decide sumar, poner de su parte haciendo un trabajo espantoso. El director tira por la calle del medio cuando no sabe por dónde salir y, cuando una situación se antoja complicada, se salta un par de escenas y santaspascuas.

Dani Rovira es un monologuista de puta madre, de los mejores de España, pero como actor tiene muy poquito que ofrecer, por mucho que se empeñe. Le pone ganas y, en las situaciones propias de monólogos bien por contexto o bien por exageración, el chico cumple, pero no le pidas peras al olmo porque no, Rovira no da más. Clara Lago es una de las grandes decepciones de la nueva generación de actores y actrices españoles. La chica le pone ímpetu, eso es innegable, pero su capacidad para hablar con la cara es la misma que la de la lámpara de mi escritorio, a la que estoy contemplando en este momento sin saber si está triste o contenta. Carmen Machi, a mí, me pilló por sorpresa, porque está perfecta y yo pensaba que nunca podría dejar de ser Aida puesto que, incluso en el teatro y en los monólogos seguía teniendo mucho de aquella limpiadora que empezó con Siete vidas y acabó dando nombre a una serie en la que su personaje dejó de aparecer. Karra Elejalde es un monstruo, un fenómeno atroz, una bestia parda interpretativa que se come con patatas lo que le pongas, con dos cojones. Aquí, el amigo Karra, está espectacular.

Resumiendo: Ocho apellidos vascos no es la película de humor menos graciosa del cine español, ni la peor dirigida, ni la que tiene peor guion (aunque pelea por serlo, Mentiras y gordas siempre copará el podio), ni tampoco es la más ridícula, ni la más aburrida... pero está entre las peores en todo. Y resulta que, repito, es la película española más taquillera de la historia dentro de nuestras fronteras. Gracias, Mediaset, gracias por Sálvame, gracias por Mujeres y hombres y viceversa y gracias por patearnos el culo con esta puta mierda que es Ocho apellidos vascos.
[Leer más +]
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mary Poppins
Mary Poppins (1964)
  • 7,1
    91.929
  • Estados Unidos Robert Stevenson
  • Julie Andrews, Dick Van Dyke, David Tomlinson ...
8
Historia pura
Mary Poppins adapta la novela homónima de la escritora australiana Pamela Lyndon Travers y lo hace para convertirse en uno de los mayores éxitos del cine familiar. O puede que el mayor de todos.

Robert Stevenson dirige esa maravilla audiovisual que es Mary Poppins. El mérito de Stevenson es alucinante, teniendo en cuenta lo novedoso de los efectos visuales en aquella época y lo difícil que era para un director trabajar con cosas que no estaban físicamente ahí. Stevenson, cuyos mayores éxitos hasta la fecha habían sido en episodios de la famosa Alfred Hitchcock presenta, puede pecar de bienintencionado en muchas ocasiones, lo que acaba quitándole parte de gracia a una historia más cómodo que divertida a pesar de estar plagada de momentos legendarios. Los efectos visuales son, sin duda alguna, la gran baza de una película que es historia del cine, gracias a unos colores vivos, a unos vuelos imposibles para la época y a la mezcla de personajes de carne y hueso con otros de animación. La parte musical, puede que el punto más representativo de la película, está compuesto por temas que quedan grabados a fuego en la mente del espectador por sus pegadizas melodías y sus peculiares letras.

Julie Andrews realiza su segunda aparición en el cine, la primera en una gran película, y lo salda con matrícula de honor. Andrews, que contaba con apenas 19 añitos cuando rodó Mary Poppins, se convierte en una estrella al instante gracias a su honesta y trabajada interpretación. Dick van Dyke pone la parte más cómica de la película con una labor graciosa, hilarante incluso en ciertos momentos, demostrando a cada instante que entiende a la perfección lo que su personaje le exige. Los pequeños están interpretados por Karen Dotrice y el tristemente fallecido Matthew Garber, con dos buenos trabajos en los que la inocencia es palpable. El famoso Sr. Banks está interpretado por un David Tomlinson que está extraordinario.

Resumiendo: Mary Poppins es uno de los grandes clásicos de la historia del cine y, además, de forma merecidísima. Un reparto sobresaliente, un director con imaginación, una historia para niños y mayores, momentos mágicos, canciones pegadizas y, sobre todo... bueno... supercaligrafilsticoespialidoso
[Leer más +]
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nebraska
Nebraska (2013)
  • 7,4
    31.708
  • Estados Unidos Alexander Payne
  • Bruce Dern, Will Forte, Stacy Keach ...
6
Una camioneta y un compresor
Nebraska es una de esas películas que apuntan directamente al corazón con una historia emotiva y llena de pequeños detalles que la llenan de vida. Sin embargo, en términos generales, y sin ser ni mucho menos mala, no es ninguna maravilla.

Alexander Payne es un hombre que suele trabajar bien con personajes complejos, rebosantes de vida y con un alma visible. En Nebraska, el director hace un trabajo notable, excelente incluso, en dicho apartado, pero deja que la historia se convierta más en decoración que en base sólida. Payne se centra en la relación entre los dos personajes principales y aborda, sin miedo a entrar en detalles, las líneas que unen a los personajes principales con los segundarios. El tema está en que, para eso, deja que la bonita historia de Bob Nelson se quede en una simple excusa con la que acortar el camino hacia el corazón del espectador. Podría haberse exprimido mucho más todo lo que hay en Nebraska pero, en lugar de eso, Payne opta al 99% por la historia humana y deja que la cámara acompañe a sus dos brillantes protagonistas en su travesía. A nivel visual, el blanco y negro no es más que un capricho que no aporta nada y, en lo referente a la banda sonora, llega a nuestros oídos como signo de acentuación a situaciones que ya de por sí deben traer consigo emociones comprensibles para cualquier humano a poco que la película esté bien contada. Puede que incluso Payne supiera que estaba fallando en eso...

Bruce Dern es el 90% de lo bueno de la película con un trabajo extraordinario, tan lleno de complejidad como pide su personaje, o incluso más. Una maravilla, lo de este señor. Will Forte hace una buena labor de acompañamiento que encaja de fábula con el gran héroe de Nebraska. Stacy Keach es otra de las joyas del reparto, trayendo consigo un sinfín de carcajadas y metiéndose de fábula en un personaje al que pocos, muy pocos, solamente los que pasen por una situación similar con un pariente como el protagonista, podrán entender en su totalidad. Bob Odenkirk ayuda, desde segunda fila, a cerrar un reparto principal que rinde a un nivel altísimo.

Resumiendo: Nebraska es una gran historia contada por unos personajes llenos de vida en la que, dentro del pequeño universo en el que habitan los protagonistas, no hay fisura ninguna. Sin embargo, los espacios abiertos la desbordan y la dejan como una joya en mitad del desierto. Y toda historia es más grande que el más grande de los personajes... aunque se trate de una historia personal.
[Leer más +]
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Capitán Phillips
Capitán Phillips (2013)
  • 7,0
    46.619
  • Estados Unidos Paul Greengrass
  • Tom Hanks, Barkhad Abdi, Mahat M. Ali ...
7
Poca onda expansiva
Capitán Phillips adapta el libro en el que el Capitán Richard Phillips narra (junto a Stephan Talty) su experiencia como rehén de unos piratas somalíes. La película fue tachada de "falsa" o "inexacta", entre otros calificativos, por algunos de los que vivieron la historia en primera persona.

Paul Greengrass dirige esta intensa historia y nos hace regalándonos una primera hora magistral, sin fisuras y en la que nos pone todas las cartas sobre la mesa con un poker de nervio, técnica, inteligencia y crudeza. En esos primeros 60 minutos de metraje, el poderío de la película es desbordante, azotando al espectador y dejándolo con el corazón en un puño. A partir de ahí, pese a que el descenso no es vertiginoso, sí se nota un bajón que, poco a poco, va llevando a Capitán Phillips a la deriva, con permiso por el símil. No es que la calidad desaparezca, pero sí se estanca y la película se torna, hasta cierto punto y salvando las distancias con la expresión, una "americanada". El guion de Billy Ray no logra profundizar en las emociones del protagonista más allá de lo básico y Paul Greengrass intenta mantener la tensión tan alta que, como la lógica indica en el mundo del cine, acaba por rozar en ciertos momentos la indiferencia. Hay que hacer mención especial al equipo de casting, cuya labor es una de las más importantes en Capitán Phillips, así como a la labor del propio Greengrass por poner su ímpetu al servicio del suspense, algo admirable aunque, como en este caso, no resulte tan demoledor como se pudiera esperar.

Tom Hanks está soberbio en el que es uno de sus mejores trabajos de su madurez. Él es Capitán Phillips en todos los sentidos posibles y gracias a él, los silencios se aprovechan y algunos diálogos inservibles quedan eclipsados por la emoción física del actor, algo que debe exigírsele a cualquier historia de estas caracterísitcas. El grupo pirata lo encabeza Barkhad Abdi, natural de somalia y debutante que firma un trabajo excelente ayudado (y sin querer restar mérito) por su particular fisionomía. Faysal Ahmed interpreta a otro de los piratas y lo hace de forma excelente, creando tensión con cada ademán. Barkhad Abdirahman es el fantástico tercer pie de una mesa que completa, sin demasiada presión ni tiempo para lucirse, Mahat M. Ali. En lo referente al reparto, la única gran putada es que esa enorme actriz llamada Catherine Keener aparece apenas unos segundos.

Resumiendo: Capitán Phillips es un intenso thriller de acción y rescate que no consigue mantener el nivel que él mismo se impone desde el principio. Una película notable en general que podría haber llegado a obra maestra de haber seguido con el listón brutal de su inicio.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Dallas Buyers Club
Dallas Buyers Club (2013)
  • 7,5
    56.888
  • Estados Unidos Jean-Marc Vallée
  • Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Jared Leto ...
8
Campanilla...
Dallas Buyers Club es, sin duda, una de las mejores películas de 2013. Un retrato desgarrador sobre la vida de un enfermo de SIDA y, sobre todo, de su historia luchando contra el capitalismo fascista que ejercen las empresas farmacéuticas.

Jean-Marc Vallée dirige con pulso firme Dallas Buyers Club. El director canadiense es consciente de que, desde el primer instante hasta el último, el mejor modo de contar la historia es aferrarse con todo a un personaje principal que desborda dolor, humor negro y un particular sentido de la moralidad que nunca pierde el tiempo en convencer al espectador de qué es lo correcto y qué no lo es. El guion de Craig Borten y Melissa Wallack es una auténtica maravilla, logrando que en los pasos firmes se adivine la potencia de las pisadas con las que la historia va tomando forma y eso lo aprovecha Vallée para regalarnos un producto complejo que tiene como punto de partida el más simple de nuestros instintos: la supervivencia. El hecho de que Dallas Buyers Club no se reduzca únicamente a su personaje principal y aborde otros asuntos como la moralidad de los personajes secundarios, la mentalidad de la sociedad de la época o los intereses económicos de las putas empresas farmacéuticas, hacen que la película se muestre más compacta al lograr encajar a la perfección sus elementos. El departamento de maquillaje merece mención especial, consiguiendo verdaderos milagros.

Matthew McConaughey hace una labor sobresaliente, digna de todos y cada uno de los premios que le fueron otorgados (aunque voto por un empate técnico con DiCaprio y su "Lobo"). El trabajo de McConaughey, primero con un cambio físico brutal y, después, con un trabajo dramático de matrícula de honor, solamente puede calificarse como insuperable. Jennifer Garner, y ahí va lo gordo, lo más flipante de la película, está espléndida, cargando el peso de su personaje y mejorándolo de forma notable. Jared Leto es, junto a McConaughey (un poco más, si se me permite llevarme la contraria a mí mismo), la gran estrella de la película gracias a una interpretación de una crudeza inhumana por su sinceridad.

Resumiendo: Dallas Buyers Club es una película complicada de ver por momentos debido a la desgarradora verdad que muestra (y la que esconde), pero que, tras terminarla, deja un sabor de boca extraordinario. Una película tan bien hecha como necesaria, una historia que debería ser contada una y mil veces y un reparto insuperable, hacen de Dallas Buyers Club una experiencia inolvidable.
[Leer más +]
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
La comunidad
La comunidad (2000)
  • 6,9
    51.108
  • España Álex de la Iglesia
  • Carmen Maura, Emilio Gutiérrez Caba, Terele Pávez ...
7
Comunitarios
La comunidad es una de las películas más iconográficas de Álex de la Iglesia y también uno de sus mejores trabajos. Una comedia terrorífica de enredo en la que el más cuerdo está tan loco como los demás.

Álex de la Iglesia dirige la que, para muchos, es su mejor película. Yo no me incluyo en esos "muchos", pero sí veo en La comunidad un producto en el que el exceso se retrata con el mimo más fino, encarándolo todo a un humor que, o adoras, o desprecias. El trabajo con la cámara del director vasco es una delicia, persiguiendo la mala hostia como foco de atención y dejando gran parte de las vías de recorrido para que las lentes sigan a una protagonista en estado de gracia. El guion, por su parte, muestra varios errores perdonables (la mayoría mínimos), pero da forma a una comunidad (de ahí el nombre, ¡ja!) en la que se retrata una sociedad enfrascada en un edificio, donde hay gente de todos los colores pero unida por las más humanas maldades. Lo buena de La comunidad es que, incluso desde su perversión, se hace amiga del público con rapidez y ahí, hasta el más detestable de los personajes, se convierte en un tipo preparado para sacarte una macabra carcajada.

Carmen Maura está brillante, evolucionando a un personaje que parecía quedarse corto para ella en principio pero que, al final, da opción de lucirse a una de las mejores actrices de la historia de España. Emilio Gutierrez Caba encabeza una lista de secundarios en la que todos rinden a un nivel excelente y en la que encontramos nombre como los de Jesús Bonilla, Sancho Gracia (ligeramente desaprovechado), María Asquerino, Manuel Tejada, Eduardo Antuña (espectacular), Enrique Villén, o la siempre impresionante Terele Pávez. Además, encontramos un sinfín de cameos con los que aparecen Mariví Bilbao, Luis Tosar, Manuel Tallafé o Antonio de la Torre, entre otros.

Resumiendo: La comunidad es una película de Álex de la Iglesia. Es así de fácil. O te fascina el mundo enfermo que tiene el realizador vasco en su mente, o lo odias, no hay término medio. Aquí encontramos, sin duda, el ejemplo más claro de lo que ve en el mundo Álex de la Iglesia desde que se despierta hasta que se acaba: una hilarante locura macabra.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Jobs
Jobs (2013)
  • 5,2
    13.266
  • Estados Unidos Joshua Michael Stern
  • Ashton Kutcher, Dermot Mulroney, Josh Gad ...
3
Indiferencia máxima
jOBS cuenta la vida de Steve Jobs, uno de los grandes genios modernos y uno de los mayores referentes de los últimos años en lo referente a la tecnología informática y a la capacidad para hacerse escuchar.

Joshua Michael Stern dirige, con muy poco acierto, esta jOBS descafeinada. Stern consigue que lo único que nos interese en la película es la duda de si en algún momento nos contarán algo que no sepamos sobre Steve Jobs, ya que bajo el trabajo de Stern se esconden un sinfín de anodinos microcuentos y discursillos de medio pelo en el que el personaje que habla tiene turno ininterrupido de palabra. Stern se muestra torpe con la cámara y, a menudo, nos remite a una TV Movie de la peor calaña. Para comprender qué es exactamente lo que quería Stern (que es también el productor de la película), harían falta años de estudio. El guion, obra de Matt Whiteley, da vueltas y vueltas sin tomar ninguna salida, intentando aportarnos datos sobre la personalidad no tan calmada de Steve Jobs y sobre su brillante forma de ver las cosas, consiguiendo, en última (y diría que única) instancia, la más profunda de las indiferencias por parte del espectador hacia el personaje principal y, poco a poco, también hacia su historia.

Ashton Kutcher nos da una de sus peores versiones. De lo que yo he visto de él, la peor, sin duda. Vale que adopte algunos gestos característicos de las manos de Steve Jobs, así como su peculiar modo de sentarse y levantarse y, también, su forma de caminar. Eso es algo que cualquiera con dos piernas y dos brazos puede hacer. La forzada sonrisa de Kutcher (clave para bien en muchos de sus trabajos) se torna aquí cansina y sus ojos vidriosos están lejos de conectar con el espectador. Lo secundarios pasan de puntillas, como marionetas de quita y pon, por la película, destacando solamente Dermot Mulroney y más por su tiempo en pantalla que por su buen hacer.

Resumiendo: jOBS, la película sobre el genio, es lo opuesto a una genialidad. Mal rodada, mal contada, con los tiempos mal medidos, con muy pobres interpretaciones, sobrecargada de color, rebosante de estúpidas sentencias disfrazadas de slogans y, sobre todo, sin vida y, por tanto, sin interés. Una gran decepción.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Holocausto caníbal
Holocausto caníbal (1980)
  • 4,7
    13.483
  • Italia Ruggero Deodato
  • Robert Kerman, Francesca Ciardi, Luca Barbareschi ...
1
Muérete, Deodato
Holocausto caníbal es una de las películas más desequilibradas, morbosas y repeltentes de la historia del cine. Filmada por el mismo morbo que se atribuye a algunos de sus personajes, la censura en muchos países hizo de ella un fenómeno que nadie quería perderse; una publicidad gratuita que la puso en primera plana.

Ruggero Deodato es un ser repelente. Así de claro. Deodato es el (en algunos casos único) responsable de la tortura que es Holocausto caníbal. A mí, personalmente, me suda el prepucio que la temática gire en torno a varios grupos de caníbales, a un equipo que los tortura y lo documenta y a un doctor que va en busca de ese grupo: lo que me toca los cojones de mala manera es lo hijo de la gran puta que hay que ser para torturar animales así porque sí, porque esto es circo. Por otra parte, Deodato utiliza la cámara al hombro para tapar sus carencias como realizador y se salta aquello que más cuesta rodas así porque sí, porque la maté porque era mía.

Habitualmente, mis críticas sobre las películas suelen ser relativamente largas y comparto mi opinión sobre los que están frente a las cámaras y los que están frente a ellas, pero con Holocausto caníbal voy a hacer una excepción. La producción de unos cuantos psicópatas hijos de puta no merece ser vista cuando se sabe hasta dónde llega en su afán por escandalizar. Lo que hizo Deodato podría haberse hecho sin que nadie sufriera daños, pero este monstruo, que merece una muerte tan lenta y dolorosa como la de la tortuga de su película, decidió cubrir sus carencias económicas con su inexistente humanidad. Deodato, eres un hijo de la gran puta. Ojalá te marches de este mundo entre la peor de las agonías.
[Leer más +]
2 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Rain Man
Rain Man (1988)
  • 7,4
    89.118
  • Estados Unidos Barry Levinson
  • Dustin Hoffman, Tom Cruise, Valeria Golino ...
5
Sobrevaloradísisisisisisima
Rain Man es una película inspirada en el savant Kim Peek. Barry Morrow, guionista de la película, se encontró con "Kimputer" por casualidad y tuvo la idea de basarse en él para crear el personaje principal de su historia.

Barry Levinson es bastante torpe contando historias, no nos vamos a engañar. El cineasta de Baltimore intenta profundizar tanto en las relaciones entre los personajes que se olvida por completo de que hay una historia que contar. La putada es que, cuando aborda las relaciones, deja en evidencia una más que reprochable (todo espectador tiene derecho a voto) carencia de argumentos y de naturalidad. En Rain Man, nos tiramos casi dos horas viendo cómo Levinson hace hincapié una y otra vez en las mismas cosas, repitiendo planos en plan bestia. Eso es del todo innecesario, puesto que la base de la historia ya nos deja claro qué es lo que hay y no necesitamos tanta matraca. El guion de Barry Morrow es repetitivo, simple, escandalosamente plano y falto de inventiva. Curiosamente, tanto Levinson como Morrow se llevaron el Oscar de sus respectivos apartados ese año, lo que hace que uno se pregunte hasta qué punto puede sobrevalorarse una película, máxime cuando se conoce la historia humana que hay detrás. Prefirieron Rain Man antes que ¿Quién engañó a Roger Rabbit?

Dustin Hoffman ejerce el papel de Puto Dios. Aunque los hay que califican su trabajo como "más simple de lo que parece" y yo mismo soy de los que secunda la idea de que los personajes con deficiencias mentales son caramelos jugosos para los actores, lo cierto es que aquí Hoffman hace algo sobrehumano, de una profundidad matemática perfecta. A su lado, Tom Cruise está a un gran nivel, sirviendo de complemento al hombre que cuenta palillos.

Resumiendo: Rain Man no es una buena película. Barry Levinson se recrea en lo que a él le parece bueno, repitiéndolo una y otra vez amparado en el guion de Barry Morrow, que te obliga a pasar constantemente por las mismas situaciones, tanto físicas como emocionales. El trabajo antológico de Dustin Hoffman es la magia de la película y lo que la convierte en un trabajo que debe verse sí o sí, pero sin él, Rain Man sería un bodrio espantoso en forma de TV movie que probablemente tu abuela, aficionada a las películas mierdosas, no pudiera terminar de ver por su espantoso ritmo, su falta de ideas y el eterno viaje a ninguna parte al que nos somete, casi siempre, Barry Levinson.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Adiós pequeña, adiós
Adiós pequeña, adiós (2007)
  • 6,9
    32.399
  • Estados Unidos Ben Affleck
  • Casey Affleck, Michelle Monaghan, Morgan Freeman ...
7
La película de la discordia
Adiós pequeña, adiós adapta una novela de Dennis Lehane, autor también de otras historias llevadas al cine como Mystic River y Shutter Island. La película tardó más de lo previsto en estrenarse puesto que coincidió con el secuestro de Madeleine McCann y, para evitar

Ben Affleck debuta en el largometraje y lo hace con un trabajo espectacular. Tras ver Adiós pequeña, adiós todo el público pensó lo mismo: "¿qué coño hacía este tipo poniendo muecas frente a la cámara cuando se le da tan bien estar tras ella?". Affleck refleja en la película que es un realizador sublime y que tiene un sentido del tiempo como pocos directores, lo que lleva su cine a convertirse en rotundo, en algo poderoso que te atiza y te deja en el suelo sintiendo el golpe antes de asestarte el siguiente. El guion, obra del propio Affleck y de Aaron Stockard, organiza y distribuye con eficacia y lo deja todo preparado para que, tras las cámaras, Affleck consiga uno de los trabajos más sucios, desquiciantes y paranóicos de los últimos años, consiguiendo que esos tres adjetivos se conviertan en halagos. Lo mejor de Adiós pequeña, adiós no es el qué, sino el cómo y, sobre todo, el cuándo; Affleck hace un ejercicio de contención de información sin ocultarla en ningún momento, simplemente pasando a su lado, dejando que la naturaleza del protagonista sea la que resuelva, como última instancia, la naturaleza del ser humano. El único "pero" que se puede poner es, a mi entender, la excesiva arbitrariedad que ejerce el director al final, buscando un equilibrio entre historia y protagonista que se desnivela por pura lógica.

Casey Affleck protagoniza la película y, aunque su trabajo es muy notable durante todo el metraje, su hermano Ben se asoma con moderada frecuencia en los tics, en los movimientos que pretenden ser inconscientes pero están estudiados al milímetro, perdiendo ahí parte de su calidad como trabajo global. Michelle Monaghan va perdiendo protagonismo, sobremanera a partir de la mitad del metraje, pero su labor, comedida y concienzuda, es una maravilla. Ed Harris, ese genio imperecedero que todo lo hace bien, se erige como una de las estrellas indudables de un reparto en el que brilla con especial luminosidad Amy Ryan, metidísima en su papel. Morgan Freeman, en un personaje que aprovecha sus momentos, saca lo necesario para dar forma a su personaje haciendo buenas sus propias palabras en las que dice que "un actor debe ser egoísta con su personaje". Titus Welliver cierra el reparto principal y lo hace aportando muchísimo y protagonizando una de las mejores escenas de la película.

Resumiendo: Adiós pequeña, adiós es una muy buena película, con una factura impecable, un reparto brillante y un dilema moral que, pese a estar latente, nunca pretende ir de trascendental pese a que sí lo es. Lo que la deja a las puertas de convertirse en obra maestra es la novatada por parte de Affleck de intentar nivelar la balanza del bien y del mal jugando con la moral de su personaje en un campo y la del público en otro.
[Leer más +]
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La gran estafa americana
La gran estafa americana (2013)
  • 6,3
    47.809
  • Estados Unidos David O. Russell
  • Christian Bale, Amy Adams, Bradley Cooper ...
7
Otro "casi"
La gran estafa americana es una comedia negra de enredo sobre unos estafadores, su relación los unos con los otros y con el FBI, que aborda con descaro los matices que separan lo correcto de lo incorrecto.

David O. Russell es, sin duda, el director de moda de Hollywood. Con películas muy personales pero que, al mismo tiempo, se abren con relativa facilidad al gran público, el director neoyorquino se ha convertido en sinónimo de calidad y de eficiencia. Su trabajo en La gran estafa americana lo catapulta, de forma definitiva, a la primera plana del mundillo del cine y lo coloca como referente. Lo que hace O. Russell aquí es desatar una histeria controlada en la que los personajes, con puntos de cordura que hacen el balance perfecto a sus desatadas vertientes desequilibradas (y desequilibrantes). Esa es su premisa, concebida desde el guion, que escribe junto a Eric Singer. A partir de ahí, todo lo que sucede tiene un perfecto desequilibrio emocional que va compensando el relato con maestría mientras se suceden las viñetas, a menudo independientes (en cierto modo), que se conectan desde el fondo de la narración gracias a la importancia de la relación entre los personajes, que nunca queda en segundo plano tapada por la delirante y deliciosa historia principal, que sirve más como excusa que como finalidad. Las comparaciones con Scorsese saltan en seguida, algo lógico, aunque opino, y esto es a título muy, muy, muy personal, que David O. Russell todavía "nos debe" una obra maestra, pues tras varias películas enormes (y otras no tanto), The Fighter sigue siendo su obra más completa y es, curiosamente, la que más se aleja de la línea que él mismo ha trazado para que sigan sus películas.

Christian Bale está enorme. Bale está en forma de nuevo (si es que dejó de estarlo) y su trabajo en La gran estafa americana es descomunal, lleno de detalles y siempre al servicio del conjunto. Amy Adams no se queda atrás, confirmando, una vez más, que es una apuesta segura cuando tratas de poner caras al casting. Bradley Cooper aquí, a mí personalmente, me decepciona un poco quedándose en las primeras capas de su personaje, las más visibles ya por guion, no consiguiendo destaparlo por completo. Lo mismo me ocurre con Jennifer Lawrence, pedazo de actriz donde las haya, pero que aquí me parece que se queda rondando a su personaje sin abordarlo a fondo, algo que es bastante jodido cuando se tiene en cuenta cuánto juego podría haber dado. Jeremy Renner, que cierra el reparto principal, me rompe la película en cuanto aparece. Es un actor que puede llegar a ser brillante, pero en esta ocasión nos da una versión muy circense de sí mismo, muy atrapada en la innecesaria teatralidad que quiere imprimir a un personaje que debe destacar por su cercanía.

Resumiendo: La gran estafa americana es una buena película, pero no llega a estar cerca de donde podría haber estado. Con un reparto brillante por nombres y por estado de forma que, aquí, se muestra irregular y con un director que se queda a las puertas del Olimpo, al espectador le queda la sensación de que ha disfrutado, sí, pero podría haber quedado mucho más satisfecho.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Diana
Diana (2013)
  • 4,3
    2.718
  • Reino Unido Oliver Hirschbiegel
  • Naomi Watts, Naveen Andrews, Cas Anvar ...
1
Menos mal que la pobre chica ya falleció...
Diana es un presunto biopic (o al menos así se vende él mismo) de una de las personalidades más importantes de la monarquía de finales del siglo XX. O eso, o es una mierda. Yo me quedo con la segunda.

Oliver Hirschbiegel saltó a la fama con la brillante El experimento y continuó su legado con El hundimiento, pero a partir de ahí su carrera ha sufrido varios hostiazos importantes. Viendo Diana, uno se da cuenta del por qué: Hirschbiegel no sabe lo que es un plano amplio ni lo que son las transiciones narrativas. El tufo a mierda dejada al sol durante días viene ya del guion de Steven Jeffreys, que lejos de aprovechar las casi infinitas posibilidades de Lady Di, se centra en un puto romance cutre con el que, dicen, fue el amor de su vida. Hirschbiegel se vuelve tarumba y se lanza a la piscina con él, montando un Sálvame Deluxe sobreiluminado, cargadísimo de color y sin destino fijo que, encima, nos tenemos que comer por cojones porque absolutamente siempre tenemos a los personajes a un palmo de nuestra cara. Si dijeran algo con sentido, tendría su cosa, pero cuando los diálogos parecen sacados de obras cumbre (en lo fecal) como son Crepúsculo o Perdona si te llamo amor, la cosa se complica. Además, hay que añadir que entre Hirschbiegel y Jeffreys convierten a Diana en poco menos que una casquivana con cerebro amosquitado y en lo único que aciertan sobre su personalidad, que era su terrible inseguridad, se pasan de rosca hasta ridiculizar la inteligencia humana básica.

Naomi Watts me encanta. En serio. Hoy por hoy, de las actrices actuales, está en mi Top 3 junto a Catherine Keener y la incombustible Meryl Streep, pero es que aquí lo de la señorita Naomi Watts es para darle una azada y que se vaya a plantar tomates al huerto. Vale que la caracterización se parece tanto como un pedo a la muralla china, pero de ahí a que no plasme ni un gesto de Diana y, lo que es peor, no llegue al espectador en ningún momento, va un trecho. Naveen Andrews intenta hacer algo normal, pero su personaje está igual de desdibujado que el de Watts y bien porque el hombre no estaba entonado o bien por contagio del aroma a putrefacción que desprende la producción entera, tampoco aporta nada positivo. Los secundarios no es que no quiera valorarlos porque no me salga de las pelotas, es que están ahí con la misma relevancia que pueda tener, qué se yo, una mosca que iba zumbando por el plató.

Resumeindo: Diana es una de las peores películas que he visto en mi vida. Una de esas que no aportan absolutamente nada. La veo de puta madre para hacerla por episodios y pasársela en trozos de 40 minutos a mi abuela cuando termina de ver los programas del corazón, pero para el público al que va destinada (porque con la pasta que hay, a alguien tiene que ir destinada), me parece una soberana vergüenza.
[Leer más +]
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aviones
Aviones (2013)
  • 4,8
    4.601
  • Estados Unidos Klay Hall
  • Animación
4
No te da alas, no
Aviones es la hermana pequeña y voladora de Cars. Ideada para ser lanzada directamente a DVD, al final se estrenó en cines, para disfrute de los niños y sopor de los adultos.

Klay Hall dirige y escribe la historia junto al mismísimo John Lasseter (que supongo que puso la primera letra y ya está) y Jeffrey M. Howard, encargándose éste último del guion. Hall nos da una película ya empezada, como situándonos inmediatamente después del primer giro. La cuestión está en que el guion, que en el fondo sigue de forma casi paralela (a nivel insultante) al de Cars, se empeña en dar giros, y giros, y giros y más giros a una historia que, desde su concepto no daba para tanto. Principalmente porque ya estaba hecha. Y, curiosamente, hecha por la misma compañía. O sin el "curiosamente". Lo que se nos cuenta, además de no tener interés si te pilla con los 5 añitos ya cumplidos, incurre en una serie de estropicios narrativos que golpean en la cara del espectador adulto como cascotes disparados con catapultas.

Los personajes son igual de planos que la historia y encajan entre ellos simplemente por el "por mis cojones". Encontrar personajes estereotipados en el cine (más si cabe en la animación), es algo usual, pero normalmente los responsables saben exprimir aquello que les hace diferentes al resto de los de su misma especie. Aquí, como no hay absolutamente nada que rascar, nos topamos con un protagonista que despierta tanta simpatía como un zumo de melocotón vacío y con unos secundarios que no consiguen sus cometidos, bien sean el de hacer reír o bien sea el de dar dramatismo a la situación. Dicen los que saben de esto, y aquí es donde apunto que yo no tengo ni idea, que la animación es la leche. Pues chico... para mí, como Avatar, que mucho regalo a los ojos y poco presente para el cerebro.

Resumiendo: Aviones no hace reír, no emociona, ni siquiera saca una puta sonrisita. Que la pasen en Disney Channel el fin de semana para que los niños estén entretenidos, de puta madre, pero que nos la cuele la factoría Pixar entre tanta obra maestra pues, sinceramente, me parece de ser un poco (bastante) cabrones.
[Leer más +]
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Apolo 13
Apolo 13 (1995)
  • 6,4
    29.471
  • Estados Unidos Ron Howard
  • Tom Hanks, Kevin Bacon, Bill Paxton ...
5
Ed, tío, menos mal que estabas tú...
Apolo XIII cuenta la historia de uno de los cohetes más famosos que despegó del planeta destino a la luna y, para ello, se inspira en el libro en el que el comandante de la nave, James Novell, escribió junto al periodista y escritor Jeffrey Kluger.

Ron Howard dirige Apolo tXIII y lo hace siendo Ron Howard en estado puro. Al popular director, aficionado a las adaptaciones, le gusta mucho todo lo que viene siendo buscar la fibra del personal y tocarla por todos los lados hasta conseguir emocionar, o sorprender, o asustar o, en definitiva, crear alguna emoción. En esta ocasión, Howard se pasa de rosca durante casi dos horas buscando picos épicos en cada secuencia, marcando de cerca a sus personajes con la esperanza de convertir sus frases en mandamientos bíblicos y consiguiendo un ritmo tan inestable que, por momentos, produce la más profunda de las indiferencias. Esto, en pocas palabras, podría resumirse diciendo que Howard hace una película 100% comercial en la que se puede llegar a disfrutar por momentos, sobre todo gracias a un montaje que es, de lejos, lo mejor de Apolo XIII. El final, cuando ya la cosa va encaminada y Howard solamente tiene que soltar la bomba, es lo más conseguido por parte del director, siendo el único momento en el que logra que el público asimile las emociones que con tanto ímpetu se han estado buscando.

Tom Hanks protagoniza la película reduciendo su trabajo a la mínima expresión. Todos los actores tienen tics y, aunque puedan lapidarme por lo que voy a decir, los mejores intérpretes son los que van más cargados de movimientos automatizados y casi automáticos. Normalmente, los grandes encauzan eso y lo meten en su personaje y Hanks es un experto en esa tarea, pero aquí se queda acomodado en su amplia sonrisa, su semblante serio (siempre conseguidísimo) y sus ligeras explosiones de tristeza y alegría, y nunca, en ningún momento en Apolo XIII, Hanks sale de ahí. Kevin Bacon y Bill Paxton acompañan a Tom Hanks en la nave y sus trabajos, sinceramente, ni fu ni fa, pues el director Ron Howard se preocupa tanto de ser él el protagonista que las frases adjudicadas a los personajes podría decirlas perfectamente un Gremlin y causarían el mismo resultado. Gary Sinise, ya abajo de la nave, está más que correcto, aunque la estrella indiscutible de la película es Ed Harris, quien se pasa por el forro las carantoñas y las idas y venidas que suponen los sinsentidos de los personajes, marcándose un trabajo épico.

Resumiendo: Apolo XIII es buen cine comercial como mucho. No es una gran película, no cuenta con el nervio que debiera la historia de los astronautas, no se preocupa en absoluto del potencial que puedan tener los secundarios y obliga a los personajes principales a encerrarse en un frasco en el que las esencias son más bien pocas.
[Leer más +]
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gru 2. Mi villano favorito
Gru 2. Mi villano favorito (2013)
  • 6,6
    39.113
  • Estados Unidos Pierre Coffin, Chris Renaud
  • Animación, (Voz: Steve Carell, Kristen Wiig) ...
6
¡No puedes no querer a los minions!
Gru 2 es la segunda entrega de las películas de nuestro villano favorito. Sigue la corriente creada por la primera película y consigue mantener el alma, las carcajadas y el sentido familiar con el que está ideada.

Pierre Coffin y Chris Renaud vuelven a ser los encargados de dirigir a Gru y a los minions en una nueva historia escrita por Ken Daurio y Cinco Paul y su labor es formidable. En Gru 2 volvemos a encontrar una historia divertida enfocada a todos los públicos, unos personajes carismáticos y, por supuesto, volvemos a toparnos con los minions, esos pequeños seres amarillos que son ya, y esto lo digo a título personal, unos de mis favoritos del cine de animación de todos los tiempos. El humor de la película está pensado, como en la primera entrega, para llegar de forma ligera al espectador y ser entendido con facilidad, haciendo guiños a los dibujos clásicos de humor como Tom y Jerry o La pantera rosa. En Gru 2 encontramos, además, un villano divertido, atractivo para el espectador y con un punto de siniestra gracia que lo hace todavía más interesante, algo que ayuda y mucho a la película. Volviendo a los minions, hay que decir que no hay ningún momento en el que uno de esos pequeños seres aparezca en pantalla y no te arranque, como mínimo, una sonrisa. Su evolución, que los lleva a convertirse en bichos morados con hiperactividad y pelo de fregona, da un paso más para no quemar a la gallina de los huevos de oro. Esa gallina, los fantásticos minions, tendrá su propia película dentro de poco.

Resumiendo: Gru 2 no es una de las maravillas del mundo pero gracias a un protagonista muy cercano, a tres encantadoras niñas, a unos secundarios bien encajados y a esos cracks que son los minions (que tienen muchísima culpa del éxito de la franquicia), se convierte en una película tan imprescindible como la primera. No tiene la frescura de aquella, pero es ligeramente más redonda. Una cosa por otra...
[Leer más +]
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Attack The Block
Attack The Block (2011)
  • 6,0
    19.266
  • Reino Unido Joe Cornish
  • John Boyega, Jodie Whittaker, Alex Esmail ...
7
Critters agorilados
Attack The Block es una película extraña, de eso no hay duda. Alma de Serie B y un ingenio desmedido para maximizar medios hacen de esta producción de humor-terror extraterrestre una de las mejores películas de su año.

Joe Cornish debuta tras las cámaras en una película que es en un alto porcentaje obra suya. Suya fue la idea principal, basándose en una experiencia propia y suyo es todo el guion. También fue él mismo el que se buscó las castañas para encontrar financiación sin renunciar a contar con el reparto que él quería. Al final lo consiguió todo y, visto el resultado, todas las partes acertaron dando al popular cómico inglés. Cornish dirige tomándose el humor muy en serio, como debe ser, y haciendo de lo grotesco y lo rocambolesco algo fácil de digerir. Su trabajo con las cámaras no es ninguna barbaridad, pero sí se aprecia un excelente sentido del ritmo y, sobre todo, una impresionante noción del espectáculo puro y duro, algo que se acompaña con una fotografía cuidadísima a cargo del también debutante Thomas Townend. El guion sigue las bases de los clásicos de serie b de los 70 y los 80 y tiene como principal inspiración a la mítica Critters, con toques de Depredador y gotas de frenéticos momento de videoconsola.

El reparto está de diez. John Boyega protagoniza la película con un trabajo serio interpretado a un personaje para el que se tomaron como referencia los gangsters de la serie The Wire. Jodie Whittaker, que pese a su corta experiencia en el cine era, de lejos, la más rodada del reparto principal, saca otro sobresaliente. Los secundarios principales son Alex Esmail (brillante, el mejor de la película), Franz Drameh y Leeon Jones, compartiendo los dos últimos roles similares y sacándolos adelante con igual soltura. Luke Treadaway y Juwayn Hunter forman en tercera fila con dos personajes cargados de humor (uno por lo explícito, otro por el tono burlesco que adquiere su personaje) y Danielle Vitalis y Paige Meade aportan seriedad en las (cortas) interpretaciones femeninas que completan el bloque. Michael Ajao y Sammy Williams, los dos pequeños del reparto, forman una dupla fenomenal y bien elaborada. Por último, Nick Frost aparece como la cara reconocible para el público y, dentro de un papel que ha repetido montones de veces, está sembrado.

Resumiendo: Attack The Block será un clásico de culto, no me cabe la menor duda. Es una película amena y desenfadada, destinada a entretener a aquellos que quieran hacerlo. Además, tiene estilosos trazos por parte de Joe Cornish, un cómico con cierta fama que tiene maneras de director interesante. Habrá que seguirle la pista.
[Leer más +]
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Abraham Lincoln: Cazador de vampiros
Abraham Lincoln: Cazador de vampiros (2012)
  • 4,2
    12.630
  • Estados Unidos Timur Bekmambetov
  • Benjamin Walker, Mary Elizabeth Winstead, Dominic Cooper ...
4
Pos lo'esclavos de Cristo...
Abraham Lincoln: Cazador de vampiros cuenta la historia oculta del presidente del sombrero alto y la primera gran barba sin bigote enfrascándola en un mundo de descendientes de Drácula y adapta una novela de Seth Grahame-Smith.

Timur Bekmambetov dirige la película, lo que ya tiene algo de guasa por el tema de un presidente americano y un director ruso (por muy nacido en Kazajstan que sea). Bekmambetov dirigió Guardianes de la noche y Guardianes del día, dos películas de esas que a unos gustan mucho y a otros no gustan una mierda. Su estilo respecto a aquellas dos se mantiene en esta biografía vampírica de Lincoln. Bekmambetov tiene buenas ideas para filmar la acción, pero su técnica es pésima. Para empezar, los movimientos de cámara son confusos y, más allá de los infinitos saltos de eje, nunca acabamos de tener claro dónde está cada personaje y cada elemento. Aunque quiere imprimir un estilo visual propio, Bekmambetov choca con la circunstancia de que es un estilo que muchos otros ya han utilizado antes y de forma infinitamente mejor. Simon Kinberg y Seth Grahame-Smith se encargan del guion que adapta la novela de éste último y su pericia con el guion es entre nula e inexistente. Más allá de lo que extremadamente previsible que es la historia de Grahame-Smith, el guion hace gala de una arritmia alarmante en la que, de forma demasiado habitual, lo bueno dura poco y, lo malo (que es de lo que más hay) se perpetúa hasta el aburrimiento más profundo.

Benjamin Walker protagoniza la película y a mí, personalmente, me gusta su trabajo. Eso sí: me gusta su trabajo si a su personaje lo dejamos en el Lincoln joven, porque cuando intenta mostrar la solemnidad de la edad adulta del presidente, el bajón es notable. El elenco de secundarios cumple de principio a fin, tanto por mérito propio como por la poca exigencia de los personajes. Dominic Cooper es posiblemente el más destacado, seguido de Mary Elizabeth Winstead, que tiene algún que otro momento excelente. Rufus Sewell, en el rol de villano, aporta lo necesario para parecer malote sin resultar ridículo. Jimmi Simpson y Anthony Mackie interpretan a los dos personajes masculinos más cercanos al protagonista y ambos saldan su trabajo con buenas maneras.

Resumiendo: Abraham Lincoln: Cazador de vampiros es una película estúpida. La idea de la novela de Seth Grahame-Smith ya es una parida, pero podría haberse adaptado bien a un idioma como el del cine. Sin embargo, entre la ineptitud para tal tarea del propio Grahame-Smith y de su compañero en el guion Simon Kinberg y la poca capacidad de ejecución del director Timur Bekmambetov, el resultado es bastante flojo. La película se deja ver... una vez, no más, por favor.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Fichas más visitadas