arrow

6 Críticas de los usuarios

Críticas de los usuarios:
8
¿Qué ves cuando me miras?
Terminando de ver “David and Lisa” (1980) de Frank Perry con Keir Dullea, Janet Margolin, Howard Da Silva, Neva Patterson, Clifton James, Richard McMurray, entre otros. Drama nominado a 2 Premios OSCAR: Mejor director y guión adaptado de la novela “Jordi, Lisa and David” de Theodore Isaac Rubin, quien fuera Presidente del Instituto de Psicoanálisis de EEUU, y del Instituto Karen Horney de Psicoanálisis; y trata sobre un joven que padece hafefobia, es decir, miedo de tocar o de ser tocado, que es ingresado en una institución mental, que comienza a comprender su psicosis en el entorno de otras personas con problemas mentales y emocionales. Allí conoce a Lisa, una joven que sufre esquizofrenia. Este filme es una de las cintas pioneras del cine independiente de EEUU, que consiguió su financiación fuera de los grandes estudios, se arriesgó con el blanco y negro, abarcó temas poco convencionales como la esquizofrenia y los trastornos obsesivos compulsivos, y a pesar de todo, consiguió distribución, importantes premios, y buenas críticas; lo que abrió camino a otras películas de corte independiente. Como relato, el tema central de la salud mental y la falta de afecto, confiere a la película un cierto alcance de “cuento sombrío”, que por desgracia no sabe aprovechar más a fondo; empezando por la hafefobia, que se presenta frecuentemente al ser asociado con un miedo de abuso sexual. El autor, Theodore Isaac Rubin, defendió con su libro las nociones psicoanalíticas tradicionales de represión y defensa, enfatizando la centralidad del odio encubierto en la fenomenología del sufrimiento neurótico, recomendando la compasión invocada conscientemente, como autoayuda que se asemeja más al budismo tibetano que al psicoanálisis. Por tanto, si vemos bien el filme, está cargado de trastornos emocionales que tienen origen en la familia disfuncional, apática y falta de expresión de cariño. Al tiempo que se ven algunos “flashes” de homosexualidad como trastorno mental, imperante en esa época según el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM) Del reparto, el filme está hecho para lucimiento exclusivo de Keir Dullea, tanto que la cámara lo ama con esos cuidados y hermosos primeros planos que remarcan su belleza, sin gestualidad, en un rol que marcará el futuro de su carrera, como hijo de un matrimonio de clase alta, que será llevado a ese hospital, donde muy pronto quedará claro su carácter hostil, altanero e incluso provocador, negándose a colaborar con el personal del recinto, y evidenciar desde el primer momento, un auténtico pavor a todo tipo de contacto físico con cualquier ser humano. No obstante, la película falla en el sentido de ahondar en los problemas mentales de la pareja protagonista, y del historial de los otros pacientes, unos que aparentemente están, o se ven muy cuerdos; y es desde el primer instante, con la presentación de los personajes, y el desarrollo posterior del proceso evolutivo marcado por su protagonista, que todo se hace previsible, pues en todo momento sabremos los giros que va a asumir su desarrollo. También adolece la parte técnica, en el sentido de los abruptos y demasiados cortes de edición que hacen que la historia sea muy fragmentada, así como se desconoce cuánto tiempo estuvo David internado. Pero también es justo reconocer que se atisba sinceridad dentro de esa limitada y contenida visión del drama de un joven aquejado de una enfermedad mental, que no ha recibido el cariño de sus padres, y que finalmente encontrará una especie de redención en la figura de otra joven interna. El tema central, es la falta de afecto, y la falta de demostrar ese afecto, de ahí la importancia de la comprensión y el amor. “¿Qué ves cuando me miras?”
RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/
[Leer más +]
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
Una muy bonita historia de amor
Después de ver "The Swimmer" del mismo director, Frank Perry, estaba claro que no podía dejar de visionar alguna película más suya. Así llega a mí "David and Lisa", una preciosa historia de amor.
Es una película llena de psicología y filosofía, temas los cuales se pueden hacer muy pesados a veces. Sin embargo la película consigue atrapar al espectador, no solo con sus protagonistas y argumento, sino también con su montaje. Me encanta el uso de la luz, como se apaga de forma progresiva hasta quedarse en negro la pantalla después de algunas escenas.
Película poca conocida y de las que vale la pena ver, disfrutar y poder reflexionar con ella.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
El sueño del tiempo que mata
La ópera prima del realizador estadounidense Frank Perry, "Elisa", basada en una novela adaptada a la gran pantalla por la propia mujer del director, es una historia de superación personal que idealiza bastante a los enfermos mentales y a las instituciones que los cuidan, pues los dos protagonistas, Keir Dullea y Janet Margolin, son jóvenes y guapos. Así, naturalmente, cualquier espectador empatiza rápidamente con ellos. El odio del personaje de Dullea hacia sus padres me recuerda un poco a la conflictiva relación entre James Dean y sus padres en "Rebelde sin causa" (Rebel Without a Cause, 1955), de Nicholas Ray. Lo más interesante de todo es tal vez el sueño intermitente de Dullea, sobre un reloj gigante en el que la manecilla amenaza con cortar las cabezas de Howard Da Silva y Janet Margolin.

Pese a sus debilidades, es una obra interesante y se deja ver, en buena parte gracias a las buenas interpretaciones del reparto actoral. El director hace una breve aparición como quiosquero.

Por cierto, el actor puertorriqueño Jaime Sánchez aparecería pocos años después en "Grupo salvaje" (The Wild Bunch, 1969), de Sam Peckinpah.
[Leer más +]
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
El fin del romance
Felicidad, dura injusticia,
Locura, juego imparcial,
Pago justo por agravio cometido,
Justo e inevitable.
Ciega cólera,
Inhumana decepción,
Encontramos en la locura lo que no entendemos,
Señalamos,
Odiamos,
Como si fuese sencillo el juzgar sin ser juzgado.
Somos extraños en un mundo extraño,
Somos raros en un mundo de raros,
Somos humanos en un mundo inhumano.
Somos invisibles,
Porque nunca nadie ha llegado a vernos,
Y sin ser vistos, como poder saber si existimos.
Como poder desconocer la locura,
Si a cada vuelta la topamos,
A cada instante, a cada segundo,
Y al final,
Como poder desconocer la locura,
Si ni siquiera sabemos quienes somos.
[Leer más +]
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
La mejor para psiquiatras
Soy psiquiatra con 50 años de graduado y de ejercicio profesional. Durante mi residencia hospitalaria de médico tuve la oportunidad de ver "David y Lisa" y aunque tuve muchos modelos familiares y de amigos para escoger la especialidad a la que me dediqué, quizá ninguna tuvo tanta influencia como esta película que hoy vuelvo a ver en Internet, subtitulada en portugués y en el pequeño formato de la pantalla de una laptop.
Puedo reconocer y recordar todo el ambiente que el film evoca, que con sus variantes espaciales y temporales, el "Zeitgeist" (espíritu de los tiempos) de aquella época y aquella psiquiatría. Leo en los comentarios que la película se arriesgó en su tiempo con el blanco y negro,y un formato poco convencional hasta el punto de ser hoy un precursor del cine independiente estadounidense. Luego me encontré con Keir Dullea como astronauta en "2001, Odisea del espacio" pero a Janet Margolin sí es verdad que no la volví a ver.

La recomiendo a los jóvenes interesados por la psiquiatría.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
4
Una sesión continua en el diván del psiquiatra
La cinta cuenta la historia de David Clemence, un joven de carácter agrio que tiene serios problemas de comunicación y no tolera que nadie le toque. Tiene toda la pinta de ser un lunático. Ingresa en una residencia psiquiátrica y allí, poco a poco, va conociendo algunos residentes que conectan con él. Uno de ellos es Elisa, la joven esquizofrénica, que tiene un lenguaje elemental que expresa en pareados sin más articulación gramatical. Prácticamente toda la película se centra en la relación entre David y el director del psiquiátrico hasta el punto de cuando los padres de David deciden retirarlo de la residencia él se escapa de casa y vuelve a la residencia. Lisa, por su parte, da mucho la lata a los residentes y una tarde penetra en el salón donde uno de los pacientes toca una pieza al piano para David y entiende que no es bien acogida. Se fuga de la residencia y vaga unas horas por la ciudad hasta David y el director la encuentran en las puertas del museo, a donde unos días antes había acudido y se había abrazado a un grupo escultórico. David la recoge del suelo y le da su mano para que se la estreche. Algo increíble.

Guión elemental basado en la novela hómonima. Buena interpretación de David, Elisa y Alan, el director del psiquiátrico. Mal montaje cerrando continuamente las escenas en negro. Falta ritmo y hay una cierta elecubración sobre el paso del tiempo simbolizado en el reloj de pared con el que sueña David todas las noches. En cada número de la esfera está representa la cabeza de los que él quiere huir y cuyas cabezas corta con la manecilla en forma de hacha doble.
[Leer más +]
3 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ver críticas con texto completo
Más información sobre
Fichas más visitadas