Al fin solos (1955)

Esta película es impensable hoy día. Parece incluso una película de Dany Kaye, o una de Jerry Lewis corriendo por los hospitales con Dean Martin detrás.
No es que uno se vaya a reír, pero sí que hace sonreír, y con sinceridad, no por nostalgia o algo así.
Es una película tierna, como el amor que se profesan ambos, para entretenernos siguiendo a la pareja de novios en su "bugati" e inquietarnos un poquito con la banda de espías que les persiguen, un poquito tan solo, porque siendo uno de ellos Antonio Ozores… poco inquientan.
Como siempre, para los que sienten curiosidad por esos tiempos inmediatamente anteriores a los nuestros, las escenas tienen multitud de detalles para apreciar:
Las carreteras sin señales de tráfico, sin rayas ni arcenes, interminables y casi sin vehículos circulando. Las calles de la ciudad con las aceras vacías de coches aparcados. Los hospitales sin colas de gente… Por eso digo que hoy día es impensable.
No pueden faltar las actuaciones propias de las comedias de enredos: en una sala de fiestas y en un manicomio en el que el director está más zumbado que los internos; y como otra curiosidad: la novia, muy coqueta, le hace esperar a su marido en el dormitorio del cuarto del hotel mientras ella va a prepararse al cuarto de baño y, cuando acaba, sale con un camisón que la tapa más que el vestido que llevaba.
Pero el caso es que... al fin solos, que es lo que cuenta.

Quizás, quieran imitar a la comedia americana, sólo hay que ver los créditos, donde salen dibujos de la pareja, que me recuerda mucho a los créditos de "La fiera de mi niña" o comedias similares.

El argumento también quiere ser algo así parecido, pero a lo español. Ponen a los comunistas como los malos, y a un Antonio Ozores, muy joven, tanto que le han doblado la voz, ya que en aquella época no era tan conocido.

Curioso ver a una Rafaela Aparicio, aún desconocida por aquella época, o al menos lo suficientemente desconocida para darle un papel muy pequeño (igual que con Antonio Ozores).

Nada destacable, es curiosa de ver por ver alguna calle de Madrid de la época, ese coche en acción y poco más!