El pasado te acusa (1958)

Rodada en las escenas exteriores en lugares tan preciosos como Lloret de Mar, esta casi desconocida co-producción entre España (mayoritariamente) e Italia, supone una mediocre pero más o menos entretenida película de intriga criminal.
Hay pocos personajes y están bien definidos, con no tontos diálogos y sentidas interpretaciones.
Lo que ocurre es que, a pesar de que se sigue bien y no molesta en absoluto, pudiendo hacer pasar bien el rato, no llena en absoluto por su falta de personalidad y algunos tiempos sino muertos, sí algo dormidos.
La fotografía en blanco y negro es buena y la decoración, del gran Enrique Alarcón, estupenda.
Pero se echa en falta algo de garra narrativa.
Con todo, resulta eficaz como sano entretenimiento.
El guión, algo disperso, es obra de diversas personas, entre las que se encuentra el normalmente realizador y en este caso productor, Luis Marquina.

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Siempre resulta atractivo situar a unos personajes en la gran mansión de una isla privada y con un misterioso asesino entre ellos, como en Diez negritos. Esta coproducción con Italia logra interesar, alberga un aceptable clima de misterio e incluso un criminal sorprendente. Los personajes, de alta sociedad, están bien diseñados, desde el escritor fracasado a la mujer madura que mantiene a un gigoló. Los actores son sólidos, especialmente Alberto Closas, Gino Cervi y Luz Marquez. El que, como se dice en la crítica anterior, no está a la altura del film es el director italiano, que se limita a servir la historia de un modo rutinario, sin personalidad ni planos sugerentes.
Con todo la película se ve con agrado, ni aburre ni impacienta.