Vuela como una mariposa (2018)

Otra película de superación y de lucha contra las adversidades, mezcla de "Million dollar baby" y "Precious" pero sin el recorrido de la primera y la tragedia de la segunda, llena de cliches. Ahí van unos cuantos: los policías provocadores de la tragedia, el padre alcohólico como buen irlandés , el hermano menor sensible, etc.

Como puntos positivos hay que destacar el marco en donde se desarrolla la historia, los 70s en Irlanda están muy bien ambientados y el hecho de aprender que en Irlanda había una población nómada, no necesariamente gitanos, a los que les llamaban despectivamente "Knackers".

También hay que reconocer que la actriz principal, una desconocida Hazel Doupe, realiza muy buen papel. Eso y la escena de la visita a los familiares "asentados", mucha mas fuerte que el combate final que se quiere pasar como el momento culminante, es lo mejor del film.

Carmel Winters dirige una película sencilla que nos acerca al modo de vida de los llamados "Irish Travellers", un grupo étnico del país insular atlántico que, aunque puedan parecer romaníes, no está claro que realmente tengan el mismo origen. Esa es la mayor virtud de la película, acercar al espectador al itinerante modo de vida de estas personas, porque lo que es la historia tampoco es demasiado estimulante, ni como relato de boxeo, ni como emancipación femenina, ni como persecución de sueños. Le falta emoción y también ritmo. Una pena, porque la joven Hazel Doupe merecía algo mejor para el gran trabajo que hace.

Lo mejor: Hazel Doupe, todo un descubrimiento.
Lo peor: No emociona demasiado.