arrow

Un lugar tranquilo en el campo (1969)

Un lugar tranquilo en el campo
106 min.
5,9
161
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Trailer (ITALIANO)
Sinopsis
Un prestigioso pintor italiano, que está pasando una mala racha, decide alejarse del mundanal ruido e ir a pasar unos dias en una encantadora y apacible casa de campo veneciana. Sin embargo, la esperada tranquilidad se convierte en un laberinto de misterio y horror debido a las apariciones del fantasma de una condesa que murió en la casa en extrañas circunstancias. (FILMAFFINITY)
Género
Terror Intriga Fantástico Fantasmas
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Italia Italia
Título original:
Un tranquillo posto di campagna
Duración
106 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Coproducción Italia-Francia;
Links
Premios
1969: Festival de Berlín: Oso de Plata
8
Una maravillosa película de fantasmas
En este largometraje, Elio Petri entiende de una forma extraña, desconcertante, pero también sorprendente y sugestiva, el tipo de cine intelectual que en los años 60 encumbró, por ejemplo, a Michelangelo Antonioni, por no salirnos del cine italiano coetáneo. ¿Cómo resumir el argumento? Un pintor de vanguardia que vive en Milán, envuelto en una profunda crisis creativa (Franco Nero, en un registro interpretativo sutilmente diferente del de sus películas del Oeste de esos años) se va a vivir a una vieja casa de campo, abandonada, en la que se encuentra con la historia de una bella joven que vivió y murió allí, en la Segunda Guerra Mundial, y a cuyo espíritu o fantasma va achacando los extraños fenómenos que van sucediéndose en ese lugar, hasta que, finalmente, cae en la locura.

Lo que el artista protagonista va imaginando, o alucinando, o soñando, es visto por el espectador, de manera que la historia nos introduce en una realidad subjetiva, en la que no sabemos bien cuál es el grado de realidad que hay en ella. La subjetividad de un artista progresivamente perturbado se va mezclando así con una historia de fantasmas que lo mismo pueden ser "reales" o imaginados; es decir, son fantasmas interiores o exteriores. Estamos sin duda ante un film profundamente perturbador (que no perturbado) en el que se entremezclan el "giallo", el terror parapsicológico, la historia de fantasmas de fondo más o menos romántico, y hasta un erotismo más o menos sofisticado. Hay, además, una sesión de espiritismo realmente escalofriante.

La música de Ennio Morricone es bastante extraña, y la fotografía en color de Luigi Kuveiller realza la belleza paradisíaca de un entorno natural solitario y tranquilo que contrasta con la obsesión, la agitación y el trastorno de un protagonista al que vemos a menudo en movimiento.

La locura, o la neurosis, son temas que Petri trata aquí y que volverán a aparecer en nuevos films, inmediatamente posteriores, de este cineasta italiano, que actualmente está siendo objeto de una justa revalorización crítica.

Por otro lado, este film es un clarísimo antecedente de "El resplandor" (The Shining, 1980), film de terror dirigido por Stanley Kubrick.
[Leer más +]
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
5
LA FANTASMA QUE TIRA LOS TEJOS A ÉL Y LAS TEJAS A ELLA
“Un lugar tranquilo en el campo” hace presagiar desde bucólicos atradeceres hasta “dejeneurs sur l´herbe” en el más puro estilo Edouard Manet. La obra de Elio Petri parece prometer pero no promete nada de esto. Lo que sonaba a una partida de campo de Jean Renoir o, rizando el rizo, a la levedad de la rodilla de Claire, se nos transformó por arte de bizarras artes esotéricas en aterdeceres rojo sangre, en pesadillas sin Elm Street y en minúsculas habitaciones 237 donde se agazapa la locura, y aunque no es descabellada la comparación con El resplandor, la alfombra roja sigue siendo para Kubrick.

Todo aderezado por un mejunje psicodélico o psicotrópico muy propio de los 60 y un toque Blow Up pero con desmesura en la dosis. Lo que en el film de Antonioni resulta “explicable” desde ciertos ángulos mentales, aquí resulta confuso y supone una agresión incluso a nuestras células grises más liberales y progresistas. Vencidos, acabamos concluyendo que la coctelera de Petri ha acabado desbordada, entre las locuras de su principal protagonista, un afamado pintor de la escuela pictórica del cubazo al óleo (Franco Nero), las ambiciones y dobles juegos de su manager y amante (Vanessa Redgrave) y los motivos inconfesables de una colectividad de respetables miembros de la comunidad que tal parece que todos se beneficiaron a una ninfómana de 17 años que, muerta en trágico accidente de guerra, parece reencarnarse a sus anchas y tirar los tejos al pintor y las tejas a la amante.

En la primera parte de la película, el espectador cree que está viviendo una realidad pero ¡ah! No, el mundo de las pesadillas aparece y desaparece de forma que nunca encontramos un asidero firme en el que sustentarnos o al menos esperar que pase la marea… Cuando se concreta la presencia de un ser ectoplasmático el film gana coherencia, y los motivos del pintor se hacen meridianos: El único cubazo que importa es el de tinta roja porque ese es el color de Wanda, no un pez, sino una fantasma de buen ver. Leonardo Ferri pinta hasta los árboles de rojo por ella, que es una forma de sorber los vientos. Así las cosas, nuestra Vanessa anda mosqueada porque el trabajo de verdad, el que da billetes y comisiones, no avanza, así que, tal parece (y no lo digo muy convencido) urde un plan junto a los accionistas del negocio de exposiciones de cuadros, para que la acechante locura alcance su climax final y deje a nuestro cazafantasmas revoloteando sobre el nido del cuco de un sanatorio mental y cambiando cuadros por chocolatinas y revistas pornos.

Reconozco que en esta última fase me perdí más que Hansel y Gretel en el bosque de la bruja y no es que quiera evitar contar spoilers. Es que no me aclaro… Seguro que sesudos críticos tendrán la piedra filosofal de todo esto. Y quedaré en la evidencia acostumbrada. Esperando todo ello, ahora mismo no se la recomiendo…
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre Un lugar tranquilo en el campo
Fichas más visitadas