arrow

La dimensión desconocida: La cualidad de la misericordia (TV) (1961)

La dimensión desconocida: La cualidad de la misericordia (TV)
25 min.
6,0
92
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Sinopsis
Durante la Segunda Guerra Mundial, un batallón del ejército estadounidense destinado en Filipinas mantiene sitiado a unos soldados japoneses escondidos en una cueva sin apenas víveres ni munición. Los soldados estadounidenses quieren evitar un ataque, ya que un sentimiento de piedad hacia el maltrecho enemigo se ha arraigado en ellos. Pero un joven y pretencioso teniente recién llegado, planea lanzar un ataque contra la posición japonesa. (FILMAFFINITY)
Género
Fantástico Bélico Intriga II Guerra Mundial Episodio de TV
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Estados Unidos Estados Unidos
Título original:
The Twilight Zone: A Quality of Mercy
Duración
25 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Grupos
The Twilight Zone (Serie de TV 1959-1964)
7
80: ¿Es el enemigo?
Filipinas, Segunda Guerra Mundial. Con la guerra a punto de acabar, un pelotón de soldados recibe al nuevo oficial, un joven ambicioso ávido de gloria.

Episodio bélico que viene a complementar a otro de la primera temporada, “The Purple Testament”. Serling se basa en sus recuerdos de guerra para narrarnos la confrontación entre un militar novato, idealista, sediento de sangre y triunfo, y un pelotón de soldados reacios a luchar, hastiados de tanta muerte, cansados de ser testigos de tanto horror. El aspecto fantástico del capítulo es utilizado para transmitirnos un mensaje diáfano. Frente a la concepción del enemigo típica de un enfrentamiento, Serling prefiere jugar a ponerse en el lugar del otro. Como siempre, su habilidad para escribir diálogos eleva un planteamiento muy básico a cotas de gran interés.
[Leer más +]
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
Xenofobia frente al espejo.
359/03(03/11/22) Interesante capítulo de la popular serie antológica creada por Rod Serling para la CBS. Episodio 15 de la tercera temporada (N.º 80 desde que se inició), que he visto con motivo de que vi hace poco “The Twilight Zone: The Movie”(1983), donde uno de sus segmentos estaba inspirado en este, el dirigido por John Landis, que se hizo infame por un accidente de helicóptero durante la filmación que provocó la muerte del actor Vic Morrow y dos niños vietnamitas. Este que me ocupa lo dirige Buzz Kulik (dirigió nueve episodios para la serie), con guion de Rod Serling, sobre una idea de Sam Rolfe (“Colorado Jim”), para una fábula moral simplista sobre la intolerancia, los prejuicios, la xenofobia, el racismo, sobre como la guerra nos deshumaniza, y Serling nos viene a decir que todo esto se ‘curaría’ si nos pusiéramos en la piel del otro. Todo ello muy cogido por los pelos, simplemente sucede lo paranormal, de modo arbitrario, aunque resulta efectivo para aceptar el cambio de posición del protagonista. Puede que un ejercicio de puntos de vista contrapuestos que influyera en Clint Eastwood para su díptico de 2006 de la Batalla de Iwo Jima (“Banderas de nuestros padres” y “Cartas desde Iwo Jima”). Siendo un estimable canto humanista al entendimiento del diferente nosotros. Ello desarrollado de modo trepidante, demasiado para hacérnoslo gradual, una sensación de contrarreloj atropellada.

Título tomado de un discurso notable en “The Merchant of Venice” de William Shakespeare, citado por Serling en la narración final del episodio.

Narración de apertura: Es agosto de 1945, las últimas páginas mugrientas de un libro de guerra sucio y desgarrado. El lugar es las Islas Filipinas. Los hombres son lo que queda de un pelotón de infantería estadounidense, cuyos ojos apagados y cansados hundidos en rostros apagados y cansados ahora pueden mirar hacia un milagro, ese momento en que la pesadilla parece estar llegando a su fin. Pero tienen una batalla más que pelear, y en un momento observaremos esa batalla. Agosto de 1945, Islas Filipinas. Pero en realidad, es mediodía en Twilight Zone.

El 6 de agosto de 1945, el segundo teniente Katell (Dean Stockwell) acaba de llegar al escenario de la Segunda Guerra Mundial en el Océano Pacífico y ordena a sus soldados cansados de la guerra que ataquen desesperadamente a un grupo de soldados japoneses enfermos y heridos escondidos en una cueva. El experimentado sargento Causarano (Albert Salmi) intenta disuadirlo porque sabe que los hombres ya han tenido suficiente guerra y que "el ataque no logrará más que muertes sin sentido en ambos lados". Katell se niega a escuchar y se mantiene firme en sus órdenes, con la intención de probarse a sí mismo y ganar su rango. Reprende al pelotón, exigiendo que se pongan en forma.

Serling marca la fecha del 6 de agosto de 1945, día del bombardeo de Hiroshima, creando en el espectador un halo cuasi místico en los acontecimientos, quizás el momento catárquico en que los prismáticos caen es cuando cae la Bomba sobre Japón, hubiera estado bien encadenar acontecimientos, pero no es así.

Tenemos al protagonista al principio como un militarista pendenciero deseoso de provocar una matanza con tal de conseguir una medalla o ascenso, méritos a base de sangre ajena, la del monstruo del enemigo. Pelea con su inferior para demostrar sus ansias de victoria (pero no hay gloria en esta posible batalla a ganar). Dean Stockwell lo encarna de forma estereotipada, sin matices, es un sanguinario sin arista alguna.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Relaciones 1
Más información sobre La dimensión desconocida: La cualidad de la misericordia (TV)
Fichas más visitadas