Sorrentino se ha convertido en lo que ha querido: un extraño híbrido de Kubrick y Fellini. Por supuesto, por el camino se ha dejado ser él mismo.

Ese deseo pudiera ser obligado por las críticas de terceros, lógicamente para hacer pie en algo comprensible para todos.

Sorrentino da cancha también a Jude Law para que se luzca, en ese divismo tan apreciado por el actor, hipertrofía que aprecia el ego pues es lo más reconocible por todos: la fama y también, porque no decirlo, el prestigio.

Nada que objetar porque las intenciones se ven cumplidas con creces. No hay argumento, tampoco conflicto, pues tenemos que taparnos los ojos y los oídos ante lo principal. Todo es demasiado herramienta. Las puertas por donde tiene que pasar la historia son demasiado obvias. Impactantes aún así.

El guionista parece no mojarse mucho en los temas más escabrosos, también se forma un chocho tratando de explicar unos porcentajes: el 81,3% de un 41%. ¿Comorr?. Bueno, es igual, pues esa conversación que sería el detonante de confrontación de esta primera temporada tampoco parece ser muy importante. El tema va de otra cosa.

Muy disfrutable si se sabe a lo que se va. Para los que pidan coherencia, no estética sino narrativa (¨ Coño, una buena historia, como Juego de Tronos¨), absténganse.

En un relato de Borges se incide en cómo es posible que los musulmanes no admitan la ficción como lo hacen los europeos.

Puede que esa costumbre venga de antes de Mahoma. Hay en toda mi cultura, que a medida que pasa el tiempo y que sé más de ella, o que el propio tiempo me hace conocerla con más profundidad, una demostración en todos los ámbitos, de pertenencia claramente grecorromana. Roma no se volvió cristiana, el cristianismo tuvo que romanizarse para tomar Roma. La forma de estructurarse el derecho, como orden de la sociedad. Se empieza por el derecho a tener, a la propiedad, sobre cosas o hombres (esclavos), catalogar todos los elementos, asociarlos a lo posesivo, pues es esa relación entre dueño y posesión la que puede ser violada por un tercero, y por tanto castigada. Fuese ese principio, no sé si infalible, una manera lógica para trasladar al mundo materialista ideales como justicia. También la familia latina, como algo que a pesar de ser socavado por la mezcolanza con otras formas de ver como la germánica, aún hoy, creo que se fomenta, más como un ideal, cierto, pero aún así como un faro de moral y de buenos sentimientos.

La ficción viene dada por el teatro griego, como fragmentos de una realidad que pudieran ser. Que puede que el autor no haya sido nunca testigo de esos avatares ni circunstancias, pero que es probable que pasasen alguna vez, o puedan pasar. Así, la tragedia y la comedia, nos llama a escuchar, y de alguna manera también el autor tiene que poner luces y escenografía, de alguna manera haciendo llamativo algo que no es real, que no tiene la gravedad de la historia real, o testimonio, ni relato de viajes. Es llamativo como parte de la farsa; atrayente, quizás por ello, aunque el llamamiento en el fondo,en su mente profunda, quiera apelar a que cada individuo pueda sacar algo de provecho en esa historia, ya sea también simplemente en reafirmarse en sus ideas establecidas ya sean ciertas o falsas, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia. Lo mismo da.

Esa ausencia de ficción en el oriente próximo, me la confirmó en persona un chaval cercano a los treinta, musulmán, y que no había visto ninguna película de Star Wars. Decía que no le llamaba la ciencia ficción, que el prefería las películas de aventuras y sobretodo las basadas en hechos reales. Yo le recomendé ¨Viven!¨. Pues tiene todos esos elementos que él anda buscando. En ningún caso le advertí, sobre la inexactitud del narrador en su narración, los enormes problemas que eso conlleva.

Al igual que Borges, en mi cinefilia, en ese acto para mí vital de observar ficción, me maravillo de como otra cultura tan rica como la mía, se priva o no presta atención a la ficción, cuando yo le daría más validez que la realidad contada por alguien ( y me temo que esta actitud mía no se suscribe por modas postmodernas, Schrödinger, ni cuántica....no, no, yo ya venía así de antes).

(Sigue en Spoilers, sin desvelar la trama del film)

Deja que respire la película. No hagas todas las elipsis tan perfecta. No dejes tan evidente la infrahistoria.

Hasta el más controlador de los directores siempre deja ser a los actores. Incluso hasta Bresson sabe que hay partes de un actor que ha de ser terreno de ellos. Todos los personajes son importantes. Hasta las muñecas son dueñas de su mirada.

Dale importancia a la fotografía. Hace más un brazo que se enreda en otro brazo que cualquier cosa. No seas obvio, pero prepara toda la puesta en escena para que este paso sea natural....Para que el lenguaje tenga que pasar por ese sustantivo. Lo bello no se puede juzgar. Toma, también, determinación en la elección de lentes....Lo siento, pero ha de ser así. Y ese es problema de Borau.

Todo nos era estética.

El chocolate se nos presentó como sólo chocolate, y por ello era tan convincente. La praxis de los elementos desaparecería. La praxis sólo está detrás de la tramoyas.

https://www.youtube.com/watch?v=8eM-1smFGuw

La técnica excelsa sólo es para los que no sólo somos espectadores. Para el que quiere llegar más conocimiento, quien quiera elaborar. Las referencias, imposiciones de los mecenas, para que sólo el que haya leído a Esquilo, aprecie algo más....Pero el artista nunca relegó a lo bello, pues eso es lo único que se salva del olvido, y la corriente de la Historia y así quedar inmune a las críticas del mundo de los Hombres y sus sociedades.

Sólo la belleza como ruptura.

¿Hay contradicción pues en la técnica como parte de ese problema? Sí, por supuesto. Películas para cineastas, qué problemón!. Admito pues el problema. Y esa contradicción. Pero parece más llevadera dentro de la factura técnica del Cine en sí.

Después de que el autor aprendiera en cada film las partes técnicas del proceso cinematográfico, Sonido (la conversación), mezcla edición, no montaje (Apocalipsis now), iluminación (corazonada), de repente, Coppola, para.

Se fija en una estética, en una época vivida por él, en una sensibilidad de adolescente, que lo que vive en la calle, es leído en una habitación, en un libro. Ralentizando las vivencias, unas vivencias de lugares demasiado comunes, atadas al gregarismo de una pandilla de amigos y los roles como huecos, que hay que ocupar....inevitablemente.

Y va a lo sencillo. Con todos los recursos cinematográficos aprendidos. Limpiando el ejercicio creativo hacia la sencillez absoluta. Antes de experimentar en cada plano, de caricaturizar todo en ¨Rumble Fish¨.

Es todo sencillo, podría ser un Lumet, Coppola, un superdotado en el lenguaje cinematográfico, no quiere destacar aquí.

El guión funciona desde el contraste, con un rango dinámico que varía según la sensibilidad del espectador. No extraña un Orson Welles cómplice del guión, como escritor, detrás de las bambalinas.

Así, aparece un Chaplin, actor, que sólo le falta hablar a la cuarta pared, haciéndonos participes. El espectador no hace pie en ninguna simpatía, en ningún valor.

Luego hay un amanecer a través de una ventana, un momento de los antiguos maestros. De Lang, Murnau, el propio Chaplin. Una reliquia, en una época que ya iba a terminar de desaparecer, una película de tono ajeno, por lo ya expresado, extraña, cínica, muy simpática.

¿Hanekiana? Desde la estética nuclear, sí. Desde la estética de complementos, es donde se puede diverger ya ahí, de la manera que se quiera.

No me he molestado en leer mi crítica anterior.

Cojan a un buen ilustrador. Diganle¨: ¨ Dibuja, haz.. No escuches, huye¨. Los avances se crean así, haciendo. No oigas a tipos que no tienen ni idea, como Guerín. Al igual que da repulsión escuchar 4 años de un grado en Bellas Artes, donde se tontea. Todo el mundo habla, pero nadie hace. Sé técnico. No fardes de tu Humanidad, que hablen tus películas por tí. Considera las humanidades o creencias algo íntimo, y un Arte, el lenguaje perfecto para expresarlas. No hables de eso. A menos que consideres esa opinión tuya, una creación en sí. Toma decisiones, tómalas, la vida es casi solamente eso....Tomad decisiones.

No cobres por eso. No zancadillees, no entres en el juego de carguitos y puestos laborales. Acuérdate del muchacho de ¨Il posto¨. Con esa mirada final de Olmi...¨Yo me voy de aquí¨....¨¿ Qué quieres convertir esto también en otro infierno formando parte de él?¨.

Esta película es un proceso creativo nuevo. Por supuesto, no diré cual. No daré clases de ¨anatomía¨. Teneis ahí los cadáveres, abrid y ved las entrañas por vosotros mismos. Ved lo que os gusta y lo que no. Coged el destornillador, mirad lo que hay dentro.

Kubrick dijo que la mejor escuela de cine fueron sus primeras películas. No se trata sólo de aprender a hacer los distintos campos del Cine, también y sobre todo, conocer que es lo que se puede hacer y que no. Que órgano de cada película es bueno, y cual no. Que técnicos son buenos y cuales no. Y sobre todo definir ya, en ese punto, cual es la labor de un director, de un creador, en los casos en que las dos figuras coinciden.

Sin trampas, sin refugios cómodos ni retóricas vácuas.

Amando de verdad el Cine.

¿Ustedes se imaginan sacarle el jugo a ¨Ciudadano Kane¨ sólo en un visionado. y en el cine, además?

Imposible.

La carga de decisiones técnicas de esta película, vista toma a toma, es inabarcable. Desde lo más sencillo: la decisión de poner el objeto en el centro del plano siempre, debido al refresco de la atención debido a su montaje romperrecords, hasta la decisión de trabajar en hiperfocal, durante todo el metraje.

El sonido, es sencillamente perfecto.

El montaje es de una coherencia e imaginativa propias de las entregas de la primera trilogía. Innovación.

El digital está más que justificado. La elección de combinar la Arri Alexa con canon 5d (cámaras reflex ultrapotentes, pero cámaras reflex de fotos al fin y al cabo), es una ¨maldad¨de un ingenio excepcional.

Justifico incluso el poco perrfilamiento de un mundo nuevo ( a pesar de ser Miller, es un reboot, es otra cosa que la primera saga), de unos personajes. Se dice que Miller quiere hacer una trilogía. Es como la trilogía de Nolan. Donde un primer film, a penas unifica y da tono a un universo.

Si un septagenario entra en el ritmo de los jóvenes en la época del dubstep, no tenemos excusa los espectadores para no hacerlo.

Eso sí, sabiendo que, como la mayoría de las películas ¨¨elaboradas¨, un primer visionado en cine, no nos da para valorarla justamente más allá, de...¨Me ha gustao¨o ¨no¨.

Películas para Blue Ray...

Si una persona entra en un hipodromo, capto tres pistas independientes. Los pasos de esa persona sobre el piso, el bullicio de gentes con sus tickets alzados, y el galope de los caballos. Cada elemento es independiente. Porque son elementos esenciales. Los caballos en el momento en que Martin Lasalle consuma un delito, pasan cerca. La edición está servida. El aislamiento de cada sonido, es un compromiso del autor con sus elementos esenciales.

Si una chica cae rodando desde un montículo. Sigan esa imagen. Necesitan saber aquí algo de fotografía. Es un teleobjetivo. Se respeta aquí el elemento de un cuerpo que cae, pero la perspectiva es cerrada. Dos motivos: Hay que planchar la imagen, para que los elementos esenciales cobren importancia sobre cualquier subjetividad del espectador, cualquier gran angular que deforme, no la realidad, sino el elemento, es la voluntad del autor la que purifica el elemento, Rosellini no estaría en nada de acuerdo con esto, pues la manipulación, también existe; otro motivo es el cierre de la perspectiva, respetando el tamaño del objeto, pero despreciando y degradando el entorno.

Como consecuencia, ¿Bresson detrime la atmósfera?. Sí, ¿qué le vamos a hacer?

Atmósfera como stage, como decorado. La atmósfera, ese vació que algunos como Polansky tratan de domar y constreñirlo. La atmósfera como ese terreno donde la imaginación, en una ficción, es permitida. La atmósfera es donde el espectador se zambulle, donde se hace preguntas sobre un contexto, sus gentes, sus modos y circunstanciales. Esos prejuicios, esas expectativas, afectan también a los sentidos. Apesta ¨La matanza de Texas¨, tenemos calor en ¨La caza¨, un personaje que se alza el cuello del abrigo...Eso nos transporta.

Por eso, cuando Bresson se pone cada vez más duro, a mi me gusta menos. Ya desde Pickpocket, empieza a cargarse la ¨atmósfera¨como escenario. ¿Se acuerdan si Paris era otoño, verano, o invierno?. Cierto es que blanco y negro quita posibilidades de reflejar, en las pieles de los personajes, el mundo donde se desarrolla.

Hay, aún, en ¨Diario de un cura rural¨. cierta alegría de la campiña. El viento aparece en esa escena de la moto...Es una renuncia de Bresson, que nos regala un momento íntimo de fragilidad y amor a la vida.

En fin....Vivan Cine!

Si no te acuerdas de las reglas de encuadre de la fotografía, si no sabes lo que es plano medio, plano americano...Si no sabes como hacer un travelling siguiendo a un personaje.

Tan sólo piensa una cosa: El peso está en la cabeza.

¿Eso significa que tiene que estar centrada la imagen en la cabeza? No.

¿Tiene que estar siempre la cabeza en el mismo lugar de la pantalla? la regla de los tercios, ect?. No.

Significa que el peso está en la cabeza. Simplemente cuando mires la imagen, tenlo presente. No sólo es una cuestión de dirección...Dirige a tus actores...Diles que desgarroten sus cuellos...

Si tienes claro que el peso no está en la cabeza en una toma, eso no vale. Si dudas, puede valer. Si el peso está en la cabeza, busca otra solución donde el peso esté en la cabeza que sea mejor.

Bueno, pues se llevó el ¨giraldillo de oro¨...Ahí es nada...jejejeje...

¿Cómo se puede pervertir un mensaje, y politizarlo, apropiarse de él, malversarlo, ser sectario? Siempre tirando de pólvora ajena...No sólo economicamente, sino de creaciones, filosofías, ideales tan personales de otros autores.

Estéticamente hablando no hay por donde pillarla tampoco. Es un desastre.

Estos políticos, artistillas más preocupados en contextualizar sus creaciones, rodeados de palmeros que se ponen las pelucas y se ponen a hacer Corte.

En fin, el ¨giraldillo de oro¨. Nada más y nada menos.

Querido Robert.

No estoy de acuerdo con que ¨no hay Arte sin transformación¨.

Yo diría que no hay Arte sin ¨ruptura¨. Como tampoco hay humor sin ¨ruptura¨, como el amor es también ¨ruptura¨.

El Cine, o como tu quieras llamarlo, es de tiempo. ¿Estamos encerrados entre el intercambio de realidad inevitable del frame a frame?

¿Puede ser la ¨impresión¨ del espectador, del contemplador, de esa sensación de después de ver un cuadro, una escultura, del momento preciso en el que ¨decidimos tararear a Puccini¨, de cuando cuaja una articulación de la atmósfera de una película?.

¿La ruptura en la obra, o en el receptor?.

Lo dejo aquí. Me voy ahora a comer un bocadillo de tortilla a La Garriga.

Llegamos a aporías y no nos desdecimos. Pues lo hecho, hecho está y queremos ser coherentes en esto del Arte....Así, como lo oyen bien...Coherentes.

Leer ¨Esculpir el tiempo¨ es trágico. No es ¨comprensible¨, pues no hay lógica en ese mundo.

Leer a Bresson sin embargo es alentador. Es ¨comprensible¨...Hace llorar de felicidad y esperanza.

Lo otro da miedo. Erice da pavor, Guerín es escandaloso, Rosales da vergüenza ajena.

Y no juzgo obras. Las obras son cada uno como sean. Hablo de los autores. Puedo premiar la coherencia como una característica más en una obra, pero no penalizar la incoherencia. La crítica, aquí, es al artista, no a la obra.

El sonido es un elemento en sí. Por tanto se le ha de catalogar como tal. Un sonido no es lo que ¨va a escuchar¨ el personaje, en una película. El personaje no es un humano, cuyo espectro auditivo es de tantos herzios a tantos otros. Por ello, hay que tratarla, sin reverberaciones propias de la realidad, sin la subjetividad del observador u oyente; la postproducción, el montaje, es la mente del personaje. Por ahí es por donde se trata....Mucho cuidado con hablar de Rosselini y Bresson en la misma frase. Hay gente que lo hace sin ningún rubor. Y ojo!...A pesar de lo que pueda parecer yo amo a Rosselini.

Y yo pongo a Bresson con De Palma?. Bresson dice: ¨El sonido en 1925?...Un teatro, un anfiteatro....¨
Piénsenlo...

De Palma lo entiende, desde sus sentimientos, no hay otra solución posible. De Palma siempre apuesta por el Cine. Con aquella tan mala de ¨Doble Cuerpo¨, con lo medios y con la desgana. En esta película, estando en estado de gracia. Nos presenta una entrega al Cine Total.

Es una pena que De Palma no tuviera el perfeccionismo de Kubrick...Siendo dos directores sobresalientes. Las carecias de uno son las fortalezas del otro.

Si pones música, es tiempo definido. Queda la imagen en ligadura, sin grado de libertad. Algunos dirán: ¨ Es un videoclip¨. No hagas caso, no sólo no tienen idea de lo que es el Cine, dándole predominancia a los objetos visuales, despreciando el sonido como elemento de acompañamiento, o simplemente vaguedad estética. No dejes que el Cine sea para ¨pensar cosas¨, no es su medio ni su intención. Es un Arte, su territorio son las emociones.

El tiempo definido, no es tiempo objetivo, a menos que el sonido sea diegético.
El tiempo definido es el que crees que ha avanzado en tu reloj. El que te obliga a cumplir el crescendo de la emoción.

El tiempo definido es el que espectador mide en la sala de cine, a oscuras. Con toda la contradicción que el espectador ha de admitir en sí.

Como en ¨Excalibur¨, empezar una tarea, tener dificultad en hacerla y finalmente acabarla, puede ser minutos, o meses. Da igual. La elipsis no es esto, es un elemento finito de este cuerpo de tiempo objetivo. Hay 26 elementos finitos en un segundo.

Un diner donde el camarero dice que tiene ¨fruta del tiempo, membrillo y fran¨.

Un coche en mitad de la noche, un apartamento.

Nos fijamos en la estética de los conceptos. Que más da el bigote de Alfredo Landa, su chamarra. Adecuamos el tiempo cinematográfico a una expiración común.

Todo lo que no esté destilado es erróneo. Cualquier segundo fuera de la logaritmica F-W, no vale...Destilar, esculpir, quitar....Al igual que la fotografía es escultura de luz, en lugar de mármol, en la cinematografía es el tiempo.

https://www.youtube.com/watch?v=piemD2CJdGs

Las películas o funcionan o no. Lo digo como espectador.

He llegado a un momento en que la suma de las partes, en la revisión, me impide ver el bosque completo. O al menos que la suma de todas las partes técnicas de esta película, me impide lanzar un juicio holístico como cualquier espectador se lanza a hacer. Me acuerdo que me encantó esta película, como espectador.

No me sorprende después de esta película hecha con 22 años, que Spielberg hiciera las cosas que hizo. No avances técnicos por tecnología o por medios, sino hallazgos puramente de director. Creando como hizo Hitchcock, nuevos efectos y técnicas, para cambiar la narrativa...Con sus reminiscencias de los clásicos, cierto...No tanto Ford, más Lean...David Lean....Que no son verduras.

El problema es que esos hallazgos duren menos de 3 segundos, y que no se haga una película de dos horas para justificar esa innovación, como hacía Kubrick. Así, para el que no se moleste en mirar plano a plano, pasa desapercibido.

Spielberg, un director para público y para cineastas....No para críticos.

Una probabilidad sobre otra. Producto de dos elementos menores de uno, que dispara el disparate. La tramoya se cae, porque el camino al ¨what if¨ pide demasiado al espectador.

Ni siquiera se apela por la técnica sublime. La búsqueda tampoco nos llama de manera atractiva. El camino paralelo, es demasiado rutinario.

Precisamente, con una narración más experimental, puede haber tenido una salvación. Y Villeneuve, se aferra a una narrativa clásica.

En ¨Prisioneros¨ sabemos que Villeneuve quiere, dentro del clásicismo, agitarse un poco. Cayendo a territorios Nolanescos o Fincherescos sin llegar a esa articulación completa. Una agitación rebelde que se queda a medio camino. Con ¨Sicario¨, se mejora sustancialmente un guión Cralesbronsoniano.

Poco más sobre este autor. Toca Yorgos Lanthimos...A ver que tal...

El otoño no llega de sopetón, en el útlimo episodio.

En el antepenúltimo episodio, ya empiezan las lluvias. Las tardes ya no son eternas. Los padres hacen las maletas. Uno de estos últimos episodios, creo recordar, se desarrolla en una casa encantada, una historia nocturna, en aquel tiempo Halloween no era ni conocido, pero el tono no era estival. Hablo desde las sensaciones que recuerdo.

En fin, un acierto que el verano se fundiera en un ¨fade out¨ lento pero inevitable. En definitiva, darle tiempo a la nostalgia para que fuera cuajando.

Crea tiempo subjetivo, utiliza las herramientas que te da el cine.

Hazlo bien. Incluso, si lo haces coincidir con el tiempo objetivo, si lo haces con elegancia, será maravilloso.

Acuerdate de los maestros, de la silla de cuna que cae.

Pero no te apoyes demasiado en la historia. Ojo!!!...No en el guión, sino en la historia, en la novela que estás adaptando.

La película es floja. Recuerda a Interstellar. Película para olvidar a los 3 días. Además creo que Villeneuve se hace un lío. Pues lo que con cuatro buenas puestas en escena se explica la trama de manera sencilla, el director trata de esconder y enfarragarlo para darle un tono de intelectualidad que tampoco tiene. No es que el problema sea difícil, es que el enunciado está mal construido.