Huracán (1979)

El gran Dino de Laurentiis, aquí probablemente en horas bajas, se suma con este film a la moda de los setenta, que por entonces era el cine de genero catastrófico, pero con flojos resultados.
A pesar de que en aquella época el apellido Laurentiis era sinónimo de diversión garantizada debido a sus superproducciones para el gran público como "King Kong" aceptable versión de la mítica bestia, dirigida por John Guillermin en 1976, o la interesante "Orca, la ballena asesina" de Michael Anderson (1977), siguiendo la estela del megaexito de Spielberg, "Tiburón", (1975). En un intento de continuar con las imitaciones de otros éxitos del momento se lanza a producir un film basado en una novela de amor de James Norman Hall, pero que mantiene como telón de fondo la llegada de un terrible huracán. Trata de atrapar con la tórrida historia de amor, a un público concreto, además de los habituales al genero catastrófico, pero el resultado es fallido.
Larga como un día sin pan, el film en su primera hora transcurre de manera muy aburrida, y lenta. La historia de amor, es predecible, y casi obligada, siendo poco creíbles los acontecimientos que se suceden tras el tormentoso (y nunca mejor dicho) enamoramiento, teniendo en cuenta que la acción del film se desarrolla en los años 20 en la Polinesia. Y para la ultima media hora llega el temido y a la vez deseado por el aburrido espectador, huracán tropical, que con unos regularcetes efectos especiales ayuda por fin a despegar (y despertar), un poco la película, sin conseguirlo claro esta, porque ya era tarde.
La mano del director sueco Jan Troell, (El vuelo del aguila, 1982), quiero suponer que tiene que ver en tan flojo y aburrido resultado, ya que con un presupuesto más que razonable, y un coral y esforzado reparto, algo mejor le podía haber salido el asunto.
Mia Farrow ( La semilla del diablo, 1968) y Jason Robards (La balada de Cable Hogue, 1970) encabezan un reparto, en el que también podemos ver a Max Von Sydow, (El exorcista, 1973), Trevor Howard (La ofensa, 1972) y a un jovencito Timothy Bottoms (Montaña rusa, 1977). Hay más caras conocidas como James Keach, (Forajidos de leyenda, 1980), porque como decía el reparto es amplio, pero totalmente desaprovechado. Cuenta además con la presentación como actor de Dayton Ka´ne, (Matinga) rara vez visto después de este film.
Al final el film no es más que una historieta de amor con un príncipe enamorado de la hija del gobernador, historia vista una y mil veces, pero aquí envuelta con el atractivo de una superproducción del cine catastrófico de la época.
Prescindible o como mucho para los completistas de dicho subgénero.

Esta película engrosa el género de películas fatalistas, en la que un desastre natural sirve como colofón final a toda una trama shakesperiana de pasión, a todo un torrente de violencia, dudas, pasión e injusticia, donde la lluvia de Dios cae sobre justos o injustos.

En esa línea se mueve esta película abandonada por Polanski y recogida respetablemente por Jan Troell a quien De Laurentis finalmente se la entregó junto al libreto de Lorenzo Semple jr. quien intentó establecer un aire más épico del que hubiera podido hacer cualquier otro escritor.

La mayoría de las críticas actuales que se pueden leer en cualquier blog o red social sobre "Huracán" son muy negativas, lo cual no deja de llamarme poderosamente la atención, ya que tan solo la puesta en escena que tiene sobretodo al final, pero no solo ahí sino toda le película completa es digna de loa.

Es como un perfume muy caro, que no huele muy bien, pero viene en un bote perfecto. Las imperfecciones de "Huracán" que tal vez consisten en un ritmo lento y situaciones producidas de repente no tienen nada que hacer frente a la increíble puesta en escena, la fotografía perfecta que luce todo el metraje y los planes sensuales que intentan hermanar ritos con realidad. Mitos y leyendas con la vida diaria.

El cast ha sido acertado. Mia Farrow tiene 34 años en esta película, diez más que el desconocido Dayton Ka´ne, de 24, pero los años verdaderamente operan de una manera mágica sobre ella. Libres de todo prejuicio la historia gira entorno a ellos. No son ellos, es el mundo.
Y no es un ritmo lento, es una evolución necesaria como pareja.

Las malas críticas de Huracán no suelen estar muy bien fomentadas. Decir que Dayton y Farrow no tuvieron nada de química es ir demasiado lejos. Eso depende del ojo del expectador, depende de sus gustos y preferencias.
Jason Robards se ha hecho con uno de los papeles más espeluznantes de toda su filmografía.
Al igual que Timothy Bottoms aguanta el tipo de pretendiente desengañado.

La historia es lo que más llama la atención, con la pasión encendida que el padre incestuoso quiere apagar y todos sin embargo ven.
"Huracán " es un remake de la película de 1937. Es una película que dio lo mejor de la época en efectos, en intentar conseguir por una vez una química distinta, digna de admiración.

Es una de las primeras películas que veo de Mia Farrow, y no me decepciona en abosoluto.