Lo primero: tanto el sentido del ritmo (lento cuando lo requiere la historia) como las situaciones son "japonesas". Hay muchísimo de cultura nipona en este anime, de su vida cotidiana, sus fiestas y costumbres. En ocasiones puede resultar algo tedioso a ojos de un occidental, pero incluso así merece la pena.
Lo segundo: esto no es "Los Simpson", ni "Padre de Familia" o derivados. Y conste que yo adoro ese sentido del humor, pero ese anime planeta algo muy distinto. No buscar arrancar la carcajada a cualquier precio, sin evitar la ofensa directa, o incluso buscándola. En absoluto. La película es en todo momento respetuosa con ambas figuras mesiánicas, y sus respectivas religiones, haciendo hincapié en sus valores fundamentales, que por cierto no distan demasiado. De hecho, la cinta está salpicada de breves lecciones sobre historia y mitología de ambas figuras. Pero las mejores referencias son veladas alusiones que dan pie a situaciones desternillantes por lo inesperado de ciertas conexiones y colisiones entre las leyendas de ambos y la vida cotidiana.
Nadie, salvo un fundamentalista religioso, podría ofenderse por lo narrado. Y solo un fan de la violencia y el chiste grosero podría tildarla de aburrida. Merece la pena aunque solo sea para comprobar que se puede hacer humor sin ofender, incluso con temas tan delicados como la religión.
spoiler:
A lo mejor esto me lo censuran los administradores, pero sería imposible añadir a Mahoma al elenco, y conservar el discurso bondadoso de este anime. Buda y Jesucristo predican amor, paz y perdón, y por es del todo coherente tanto la buena relación entre ambos como las amables peripecias de su estancia en Japón. Mahoma (no es ningún secreto) era un caudillo militar; al primer problema habrían rodado cabezas...