Como negativo pero también de risa, resaltaría las escenas en las que por falta de gente y mala colocación, como la de la fiesta en la que la protagonista se droga y cae, resulta todo tan patético, se ve tanto el cartón, que no apetece ni mofarse. O en la escena de la arenga final que da el jefe antes de ser ridículamente exterminados, con todos super enfadados al principio y después de la chapa todos rompen en aplausos y vítores, queda tan de broma que parece que nada podría empeorarlo, hasta que aparece la cazadora con la mierda de chatarra esa que se monta en su casa y sus movimientos de geriátrico... patético.