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Voto de Neckriagen Omoide and Dreams:
7
Drama México, años 40. Ignacio Jurado (Luis Felipe Tovar) es un camarero más bien callado y solitario. Sus días transcurren entre el café Ofelia y su colección de fotos pornográficas. Sin embargo, todo cambia cuando en su vida irrumpe Lola (Ariadna Gil), una prostituta española no exenta de cierta ternura, autodestructiva e imprevisible. Entre ambos surge una relación sadomasoquista. El Mikado será capaz de hacer cualquier cosa por hacerse ... [+]
18 de julio de 2014
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Experimento aventurado de Arturo Ripstein que para el momento de rodar ya se había hecho de renombre. Uno pensaría que no le sería difícil hacerse de recursos, más cuando uno lee que es una coporducción México-España, pero la película no oculta que ha costado tres pesos (o tres duros), así que Ripstein tomó el derrotero de cimentarse casi completamente en sus actores, y no es raro ver nombres reconocidos aún en papeles secundarios.

Se intentó soslayar (o al menos cubrir un poco) la casi ausencia de presupuesto en producción, y que también alcanza al tipo de cinta usada; acepto que soy un neofito en esos aspectos, pero es bastante notorio que más parece que rodaron con cámaras y cinta de televisión (o caseras) que con equipo profesional cinematográfico.

Lo bueno.

Las actuaciones de casi todo el cast, que, aunque al principio la pauperrima producción nos hace levantar la ceja, poco a poco nos van metiendo en la temática y dibujándonos a sus personajes, pese a que algunos (o casi todos), acusan cierto acartonamiento de cine de los 40's o 50's, no dejan de ser representados con potencia.

Lo mejor.

Pese a las evidentes carencias, Ripstein usa el peso de sus actores para darnos ambiéntación teatral; y aunque el encuadre peca de barato, da libertad a la fotografía; destaco dos cosas; largas tomas sin cortes (de hasta 15 minutos) dónde la cámara a ratos queda estática y a ratos sigue a los actores, y que éstos nunca tropiecen o pierdan el ritmo en dichas tomas, siendo Luis Felipe Tovar quién mejor interpreta y quien lleva casi toda la película en sus hombros. Como dije, recuerda poderosamente al teatro, en un par de ocasiones casi me sentí en una butaca viendo una interpretación en vivo. Esto es más que evidente en el montaje final (omito detalles obviamente)

Lo malo.

La producción es tan económica por momentos (sobre todo al principio) que parece más televisiva que teatral.

Lo peor.

Que los diferentes pósters (afiches) de la película engañan, hacen esperar algo de corte mucho más erótico, y aunque lo hay, es un erotismo mas sugerente que gráfico. La atmosfera teatral podría no gustar a quienes busquen algo más ligero o más realista (o más "cine", para quienes gusten de una separación clara entre artes).

Lo raro.

La película tardó cuatro años en estrenarse en México.
Neckriagen Omoide and Dreams
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