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San Marino San Marino · Ladera del Monte Titano
Voto de Fej Delvahe:
8
Drama Gracias a una iniciativa del Estado de Israel y de los Estados Unidos, desde el 20 de noviembre hasta el 4 de enero de 1985 se lleva a cabo una amplia operación para trasladar a miles de judíos etíopes (Falashas) a Israel. Una mujer etíope, que no es judía, convence a su hijo para que se declare judío a fin de que pueda huir de la miseria. Cuando el niño llega a Israel, dada su condición de huérfano, lo adopta una familla judía francesa ... [+]
21 de marzo de 2008
46 de 51 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta larga narración cinematográfica es una aproximación al conocimiento y comprensión de los "falashas" o pueblo de judíos etíopes y de piel negra, que según ellos mismos son descendientes en parentesco y religión hebrea de la unión amorosa entre el rey Salomón y la Reina de Saba hace más de 2700 años. Una creencia algo mitificada, pues en realidad y según los expertos en la materia, los falashas son más bien miembros de una tribu indígena hamítica, de piel oscura, conocida como Agau, la cual parece ser que adoptó en su conjunto la religión judía allá por el s. I ó II d.C. El culto judío que practican estos etíopes se basa en la Biblia hebrea o Pentateuco. No tienen muchos conocimientos del hebreo, y para sus prácticas religiosas utilizan el "guezo" (lengua etíope antigua). Son escrupulosos en la observancia de las leyes dietéticas y de higiene que recoge la Torá, así como del calendario judío. Para el judaísmo mundial merecen toda consideración como miembros judíos de pleno derecho en el pueblo de Israel, máxime porque han salvaguardado y profesan en gran parte el antiguo culto judío tal como se practicara en los días que precedieron a la destrucción del II Templo de Jerusalén (70 d.C.)

Debido a la presión de poderosas organizaciones judías y de EEUU sobre el gobierno etíope, éste permitió una numerosa salida de judios etíopes de Etiopía, en 1991. Las autoridades israelitas montaron una magnífica operación de rescate, traslado y acogida, la cual se realizó mediante un puente aéreo desde Addis Abeba a Tel-Aviv, el viernes 24 de mayo de 1991 (en aproximadamente un día llegaron a Israel procedentes de Etiopía unos 15000 judios etíopes), nada más y nada menos.

En esa vorágine de gente, una madre etíope muy pobre, no precisamente de religión judía, logró meter a su hijo de nueve años entre la multitud de judíos emigrantes, ¡y coló con la ayuda de los otras personas misericordiosas! El objetivo y la razón de esa madre no era otra que: ¡VETE Y VIVE!, es decir, ¡VETE Y SÁLVATE! A partir de ahí la película nos narra toda la vida de este niño, luego muchacho y más tarde hombre, su adaptación, penurias, añoranzas, desarrollo y salida para adelante.

Película muy interesante, en primer lugar por lo mucho que sale uno sabiendo, tras su visionado, de la historia y penalidades de los falashas. Lo mejor del filme es la parte primera y la final, en el medio pierde ritmo y resulta pesada. El instante final es sobrecogedor.

Fej Delvahe
Fej Delvahe
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