Las guerras no comienzan de la noche a la mañana, existen tensiones previas más o menos encauzadas que siempre son preludios evidentes de la tragedia que está a punto de ocurrir. En el caso de la Guerra Civil Americana, no es un tema que se suela tratar a menudo en el cine, no digo las causas, sino las tensiones que apuntaba antes. Por eso hay que reivindicar una película como “Kansas Pacific”, que es modesta, pero muy entretenida, formativa y estimulante.

Para empezar la omnipresencia de tren, probablemente junto con el caballo, los dos grandes elementos cinematográficos del western. La construcción del ferrocarril es con seguridad una de las epopeyas más grandes del siglo XIX, y sin embargo aquí en España no tenemos películas que aborden la cuestión como sí han hecho los americanos.

Luego está el tema de Kansas, que pertenecía a esos típicos estados indefinidos políticamente donde estar con la Unión o con la Confederación era cuestión de detalles y centímetros, como le pasó también a Kentucky o Missouri.

El director es Ray Nazarro, un chico del este llegado a Hollywood, que se especializó en la realización de películas del oeste de serie B en los años cincuenta, y que de todas ellas “Kansas Pacific” es la más brillante con diferencia.

Otro punto de interés es la presencia como protagonista de Sterling Hayden, un actor que después de “La jungla de asfalto” de John Huston no supo encontrar un hueco en el star-system, siendo relegado a proyectos menores.

En definitiva un film, recomendable, más que interesante, que los seguidores del western deberían de rescatar del olvido.

Nota: 6,3.