El argumento es claro, un grupo de científicos trabajando en un laboratorio para tres estados, investigando epidemias, ataques biológicos, etc.

Pero claramente, es televisión, así que en realidad la serie va de un genio, playboy, sarcástico, bebedor y arrogante que en este caso no tiene traje de Ironman. Pero tiene pizarra y a menudo barba sin afeitar.
A él le acompañan otros estereotipos, como el jefe que lo tiene que mantener atado, o como el científico capaz de hacer cálculos cual calculadora y que lo sabe todo acerca de todo, pero es incapaz de relacionarse socialmente.

El doblaje en español no le hace ningún favor a la serie, recomiendo verla en inglés si se puede, los personajes se hacen más creíbles, en el doblaje español a menudo las emociones mostradas por la voz y por el actor son prácticamente contrarias.

En cuanto a la línea argumental, cada episodio depende del anterior, no falta acción para ser una serie de un grupo de científicos y las conversaciones la verdad es que dejan que desear (aunque no son excesivamente malas), también hablan de todos los tópicos exagerados que cualquier curioso de la genética pueda esperar, pero todos bastante por encima.

Es entretenida, pero en mi opinión, no muy bien llevada a cabo.