Debe ser muy difícil ser Hal Hartley y optar por continuar su libertad creativa de la manera que él lo hace: tal vez no consiga nunca acercarse mínimanente a sus mejores trabajos pero al menos mantiene una distancia hacia los horizontes más comerciales.
“Henry Fool” supuso un soplo de aire freso en su filmografía y posiblemente punto final a su mejor momento. Tal vez esos vendavales creativos quieran de nuevo cobrar fuerza en la mente del director de “Simple Men” con una continuación de su filme. Peor sería tocar algo como “Trust”, pero aquello que nos plantea la continuación del camino seguido por Henry Fool y la Sra. Grim.
Rodeado de personajes peculiares, habituales en la filmografía del autor, y radiografiando a su manera los paisajes del maltrecho mundo actual hay un juego hitchcokiano de conspiraciones que queda difuminada, sin hilos irónicos que apenas logren sostenerla entre tanta alta definición digital y planos aberrantes u holandeses.

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-Inciso de un anónimo lector: ¿No debería estar inclinada la crítica al ser holandesa?

- Maldito Bastardo: ¡Cierto es! Pero no sabía cómo conseguir el efecto del plano aberrante o de inclinación holandesa.... Gira la cabeza un poco y tal vez así la veas inclinada y holandesa...

[...]

- Anónimo lector: ¡Ya la veo holandesa! ¡Gracias! Pero es que me canso...

- Maldito Bastardo: Mira, llama a Nigel de Jong y que te meta una patada a tu monitor...