—Crítica de la madre de Mark Atkins:

Menos mal que alguien muy inteligente habla de un tema que interesa a toda la sociedad: los tiburones de arena. Es de todos conocido que el cine sólo habla de los tiburones de mar cuando sus víctimas mortales son un 1% de las personas que mueren por infartos cerebrales viendo Telecinco. Los tiburones de arena son una realidad prehistórica y una amenaza real en nuestro mundo de playa y sombrilla. Si les dijera las miles de personas que han sido asesinadas por estas homicidas, insaciables y desconocidas criaturas utilizarían toallas de acero armado. Pero los medios, comprados por las oficinas de turismo, quieren ocultar la verdad…

Olviden esa producción de The (Global) Asylum llamada “2-Headed Shark Attack” porque el público sólo quiere ver las dos cabezas que tiene debajo del cuello Carmen Electra. ¡Aquí hay tiburones y cine de verdad! ¡Actores excelentes Eric Scott Woods y un gran Corin Nemec que no tiene nada que envidiar a Johnny Depp! Sólo un hombre y gran visionario con cerebro, valor e ideas puede hablar de un tema tan polémico y dejando por los suelos a “Temblores” y “Piraña 3D”. No, señores… no las copia… ¡Se las come! Ñam-ñam-ñam. Y ese gran hombre tiene nombre: Mark Atkins. ¡Qué orgullosa que estoy de él y de su nueva gran película!

—Crítica del Resto del Mundo:

No me gusta faltar el respeto al trabajo de algunos profesionales que intentan ganarse la vida pero “Sand Sharks” es, sin ofender, una puta mierda.