Es necesario vivir en un país comunista para poder entender muchas veces el peculiar mundo de este fascinante director checo.
Svankmajer no es solamente un director surrealista, es un surrealista de un país comunista y eso refleja este director tanto en sus cortos y en sus largometrajes, Svankmajer sabe crear un peculiar mundo en donde mezcla el realismo con el surrealismo de una manera simultanea y todo ello para realizar una dura crítica sobre el sistema.
Comida, es un genial corto dividido en tres partes, sin duda, a cual mejor aunque mi favorita es la primera pues la imaginación es sorprenderte.
Svankmajer produce asco muchas veces pero te consigue mantener en tensión esperando saber como acabará la corta historia, uno intenta buscar un sentido a este mundo absurdo en donde se mueven estas personas de carne y hueso.
Tres comidas muy realistas y también muy absurdas pero siempre críticas, así que les invito a ver este genial corto y a profundizar en cada detalle pues Svankmajer es un hombre muy muy inteligente.