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Comedia
George es el hombre más atractivo de Los Ángeles, un peluquero de Beverly Hills que vuelve locas a todas sus clientas. Animado por su novia Jill a montar su propia peluquería, George recurre a un rico empresario, Lester, para que invierta en su negocio. El único problema es que George se está acostando con su mujer, su amante y su hija adolescente... (FILMAFFINITY)
12 de marzo de 2022
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Shampoo de 1975 es una de esas películas que actúan como filtro entre las personas que realmente aman el cine, y aquellas que solo ven películas.
Una película no es un cuento que tu mama va a leerte antes de dormir, no arranca con los chanchitos haciendo una casa, y termina con el lobo muerto, el cine es un arte audiovisual y como tal se expresa a través de un sistema mixto de fotogramas, diálogo y música, y en ese contexto tripartita muchas veces vamos a encontrar, desmenuzado, un argumento que nosotros mismos tenemos que armar a través del uso de nuestros sentidos.
Shampoo es un retrato de época, y es entendible que un visionado por personas de menos de 50 años que no sepan de historia contemporánea deje una sensación de "problemática" argumental, o directamente de "falta de guion". Pero debemos entender que sus retorcidos personajes no son más que un reflejo de los estereotipos que sucumbieron al caso Manson y al final del "verano del amor", con un epílogo fulgurante que fue el caso "Watergate". Y que esos personajes no solo están perfectos desde su actuación hasta su estética, sino que además se funden en fondos hechos a su medida, con todo tipo de guiños a una cultura que se creía espiritual pero en los hechos fue de lo más superficial en la historia conocida.
Tenemos que entender también que el cine es un negocio, y los productores no pueden vender una película llamándola "retrato de época", sino que deben recurrir a opciones mucho más tentadoras para el espectador desprevenido, como son los rótulos de "comedia" o "comedia romántica".
Shampoo no se propone nada de eso, y en todo caso si nos quiere hacer reír, es de nervios por lo patética que puede ser la raza humana.
La película es visualmente hermosa, sus actrices son oníricas, sus actores nos darán repulsión o lástima, y la subtrama socio política está donde la queramos ver, en casi cualquier fondo de plano.
Recomiendo mucho ver esta película después de leer algún artículo sobre el verano del amor, el caso Manson, el caso Watergate y el fatídico recital de los Rolling Stones en altamont, y recomiendo verla más de una vez, para prestar atención a los cientos de detalles escondidos en sus planos.
Una película no es un cuento que tu mama va a leerte antes de dormir, no arranca con los chanchitos haciendo una casa, y termina con el lobo muerto, el cine es un arte audiovisual y como tal se expresa a través de un sistema mixto de fotogramas, diálogo y música, y en ese contexto tripartita muchas veces vamos a encontrar, desmenuzado, un argumento que nosotros mismos tenemos que armar a través del uso de nuestros sentidos.
Shampoo es un retrato de época, y es entendible que un visionado por personas de menos de 50 años que no sepan de historia contemporánea deje una sensación de "problemática" argumental, o directamente de "falta de guion". Pero debemos entender que sus retorcidos personajes no son más que un reflejo de los estereotipos que sucumbieron al caso Manson y al final del "verano del amor", con un epílogo fulgurante que fue el caso "Watergate". Y que esos personajes no solo están perfectos desde su actuación hasta su estética, sino que además se funden en fondos hechos a su medida, con todo tipo de guiños a una cultura que se creía espiritual pero en los hechos fue de lo más superficial en la historia conocida.
Tenemos que entender también que el cine es un negocio, y los productores no pueden vender una película llamándola "retrato de época", sino que deben recurrir a opciones mucho más tentadoras para el espectador desprevenido, como son los rótulos de "comedia" o "comedia romántica".
Shampoo no se propone nada de eso, y en todo caso si nos quiere hacer reír, es de nervios por lo patética que puede ser la raza humana.
La película es visualmente hermosa, sus actrices son oníricas, sus actores nos darán repulsión o lástima, y la subtrama socio política está donde la queramos ver, en casi cualquier fondo de plano.
Recomiendo mucho ver esta película después de leer algún artículo sobre el verano del amor, el caso Manson, el caso Watergate y el fatídico recital de los Rolling Stones en altamont, y recomiendo verla más de una vez, para prestar atención a los cientos de detalles escondidos en sus planos.
