El cine oriental de los últimos años está sorprendiendo por su altísima calidad y su originalidad, sea éste de Corea, Japón, Hong Kong, China u otros países. En este caso la película trata de un supuesto terrorista que amenaza previamente a sus víctimas, para después cumplirlo pese a los intentos de la policía (aunque a veces haya que ser un poco laxos en el significado de las palabras). De modo semejante a Death Note, este "terrorista" se gana el beneplácito del público por su búsqueda implacable de la justicia y pronto surgen fans, seguidores e imitadores. Pero la historia guarda muchas sorpresas, que se van desvelando de una forma muy inteligente a lo largo de la película.

De hecho, al final la historia no está tan próxima al thriller y la intriga, como al puro drama lacrimógeno, y cuando todo cobra sentido, se desvela el plan real del "terrorista", todo adquiere un cariz muy diferente. A muchos les gustará el último giro de la historia, pero a mi personalmente no me convenció, al hacerme pensar que el fin buscado no justifica toda la parafernalia anterior, y me dejó con la sensación de ser muy exagerado todo, si la finalidad era ésa...

Sin embargo, como divertimento cumple con todas las expectativas; acción, muy buena edición de los vídeos con las "predicciones", un buen guión policíaco, muy bien trabajados los personajes, buenos actores, intriga... Cumple con todos los elementos que se esperan y cuenta una historia diferente con un trasfondo muy original (demasiado para mi gusto). La recomendaría sin duda, pero advirtiendo de que el último giro de la historia puede gustar mucho o nada