Siendo sincero, me ha gustado, no es para ganar un oscar o un gloobo, ni grandes premios, pero como película para pasar el tiempo y que consiga transmitir alguna sensación, lo consigue perfectamente (y esa sensación no es la de perder el tiempo).

El film se presenta, o por lo menos así me lo transmitieron, como una película sobrenatural, y pensando que iba a ir por la vía del terror, me quedé parado cuando me encontré un drama sobrenatural, mil veces visto, pero interesante y con cierto atractivo, consiguiendo en todo momento mantenerte pegado a la pantalla de televisión, esperando la siguiente escena y así hasta el final.

Interpretación genial de Burstyn, que te engancha aunque al principio se nota que el papel iba destinado a una chica más joven, pero hay veces qué hay que sacrificar cosas, y en este caso, mejor unos años de edad por una actuación más creíble. Los personajes evolucionan, los sentimientos afloran y la película corre sola. La dirección, fue correcta, con buenos planos y escenas bien montadas. La música es otro aspecto positivo, mil veces escuchada, pero es la que le va al film, es el guante para una mano, y no para un pie.

En fin, todo es correcto, entretiene y encima el final no decepciona, no se le puede pedir más, o por lo menos, con lo que tenía a mano Petrie me parece que ha sacado oro de un charco de barro.