Nuevo drama romántico un poco tierno a cargo de Ornella Muti, ésta joven siempre hacía las mismas películas e interpretaba a los mismos personajes, perteneciente a su etapa española. Después de 1975 regresó a su Italia y hasta los años 90 no volvió aparecer en ninguna obra rodada en nuestro país. Es curioso que la fecha coincidiera con la muerte de Franco y el cambio de régimen. ¿Casualidad o coincidencia? No sabría decir pero podría ser que se oliera el destape, esa etapa vergonzosa por no decir asquerosa pero muy democrática de nuestro cine, y saliera pitando. Total, si al final se desnudaba o no, en su patria al menos le pagarían más.

El caso es que "Una chica y un señor" es la típica historia amorosa que quiere ser elegante, muy de los setenta. Muchacha joven, inocente, alegre y hermosa, es decir, Ornella Muti que tendría unos 18 años, conoce a un señor maduro, rico e interesante pero sin ilusiones ya, y el flechazo aparece de inmediato. Lo cierto es que la historia aunque obvia, lenta y escueta, tienen que meter algunos cortes musicales porque resulta que ella es cantante, está contada con cierto buen gusto, así que termina funcionando. La única pega que tiene es que sale Ornella en unas escenas con unas botas marrones de plataforma estupendas pero apenas se le ven.