Hola a todos.

Sí, ya sé que me he tardado en hacer esta crítica, pero tengo una excusa muy práctica. Cuando este anime se estrenó el año pasado, no tenía muchas ganas de verlo. Estaba harto de solamente encontrarme con series clichés y típicas (a excepción de “Ping-Pong: The Animation”, que es mi anime favorito del año pasado), así que decidí no ver ninguna otra serie anime, incluyendo “Zankyou no Terror”, a pesar de ser un gran fanático de su director. Un año después, decidí comenzar a ver la nueva temporada anime, para ver si encontraba algo bueno; Sin embargo, mi búsqueda fue un fracaso. Después de todo lo acontecido, decidí darle una oportunidad a este Anime, y valla que se lo merecía.

El capítulo inicial nos dice que la serie intenta ser diferente; Y a pesar de no llegar a ser la gran cosa, logra destacar del resto de series del año pasado. Seguramente muchos de ustedes se estarán preguntando, ¿qué es lo que vuelve tan bueno a Zankyou no Terror? La pregunta en cuestión es sencilla de responder, pero aun así te daré mi respuesta. Una dirección excelente, un apartado musical soberbio, una animación hermosa y un dibujo casi perfecto son parte de las cosas que vuelven mágica a esta serie.

Muchas de estas cosas no deberían de sorprender a nadie, ya que los que conocemos el trabajo del staff, sabemos que son bastante destacables en cada uno de sus apartados. Comencemos con el hecho de que Shinichiro Watanabe, el director de Cowboy Bebop y Samurai Champloo, trabaja como director general en esta serie. Watanabe nos brinda un trabajo excelente, haciendo gala de sus años de experiencia y su talento, dándonos un producto totalmente sofisticado y entretenido. Con una sincronización musical perfecta, narrativa similar a la cinematográfica, y una tensión en el ambiente que se repite capítulo tras capítulo, logra apantallarnos una vez más y demostrarnos lo geniales que son sus trabajos.

La música, compuesta por Yoko Kanno, quien ya ha trabajado con Shinichiro Watanabe, es una de las mejores que he oído en un anime actual. La música convierte a este anime en una experiencia totalmente inmersa, al acoplarse a la perfección con las distintas escenas de la serie, siendo el último capítulo el que mejor gala hace de este apartado. Con una tonalidad J-Pop, y en ocasiones, con un melancólico tono Blues, logra apantallarme y dejarme boquiabierto ante la magnificencia de Yoko Kanno como compositora.

Sin embargo, no todo en esta serie me ha gustado. Siendo su historia y su guion lo menos destacable del anime en cuestión. Lo admito, la historia no es tan mala, pero no es el punto fuerte de este anime. Ya que, al igual que con Death Note, se llegan a notar algunos problemas argumentales, siendo esto uno de los mayores problemas de la serie. Lo inconsistente que llega a ser el guion, en colaboración a lo poco estructurados que están los personajes, puede resultar en que la serie se convierta en una de las más auto conclusivas posibles, siendo esto totalmente contradictorio a lo que prometió inicialmente.

Aun así, creo que es una serie que no te puedes perder. No puedo negar sus errores, pero tampoco puedo opacar sus virtudes. Y la serie, como no, tiene muchas más virtudes que errores. Eso, por lo menos para mí, logra ser lo suficiente como para que la considere un producto destacable, y más si tomamos en cuenta lo repetitivo que se ha vuelto el anime últimamente.

En fin, a este anime le doy como calificación: 7/10, que sería el equivalente de 3 estrellas y media.

Bueno, sin más que decir, aquí me despido. Saludos y gracias por leer.