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España España · Madrid
Voto de Charles:
5
Terror. Thriller Cuando tres estudiantes universitarios se mudan a una vieja casa fuera del campus, sin querer, liberan a "Bye Bye Man", un ente sobrenatural que persigue a quien descubre su nombre. Intentarán mantener su existencia en secreto para alejar al resto de una muerte segura. (FILMAFFINITY)
13 de marzo de 2017
18 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
La era de los grandes psicópatas del terror ha terminado.
Freddy Krueger, Jason Voorhees, Michael Myers, el Hombre Alto de 'Phantasm'... son todos hijos de una época que les prestaba absoluta atención, y su mitología ha acabado calando en interminables secuelas de mayor o menor calidad.
Cualquier nueva adición no solo debe superar la propia película en la que se presenta, sino también medirse de alguna manera con la relativa grandeza de esos titanes que hicieron historia en su género.

Por eso resulta simpática 'Nunca digas su Nombre', al presentar la figura del Bye Bye Man, y establecerlo como una especie de parca que te acosa en cuanto tienes la mala suerte de escuchar acerca de él.
Su imagen acompañada de un terrorífico sabueso y la manera en la recolecta sus víctimas, que se creen completamente cuerdas pese a parecer locas, casi parecería digna de esos psicópatas de los que hablaba, y todas sus apariciones se guardan cierta efectividad de la que pocos mitos terroríficos pueden presumir.

El problema viene por parte de sus víctimas: meros trozos de carne adolescente a los que confundir con sus ilusiones, y volver locos mientras les refleja sus frustraciones.
Nancy Thompson y Laurie Strode también eran parte de la mitología de sus respectivos psicópatas, y sin una contrapartida semejante, el Bye Bye Man se diluye en una trama poco inspirada con algunas paranoias interesantes, pero poca chicha en general.
La habitual policía incrédula por aquí (señora Moss, qué me hace usted aquí), la típica "señora/señor que explica cosas" (señora Dunaway, por favor)... los tópicos caen como fichas de dominó y hacen falta mejores personajes para defenderlos.

Aun así, merece la pena ver este relato de un personaje terrorífico que depende de su historia para sobrevivir a las generaciones: no decir ni pensar nada de él es un desafío tan imposible que bien vale un ligero escalofrío.
La lástima sería que, al contrario que Freddy y compañía, el Bye Bye Man no parece que vaya a tener una reputación que le gane hueco en el aterrorizado subconsciente colectivo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Charles
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