Una agradable sorpresa, no en vano cuando me he puesto a verla pensaba que se trataría de la típica película panfletaria yanki donde se loa a los soldados, en este caso aviadores, estadounidenses, rodada en plena II Guerra Mundial, aunque los hechos del filme sean anteriores a dicha contienda.
Es francamente entretenida, con muy buenos efectos especiales, excelentes escenas aéreas de los combates, muy bien rodadas por su intensidad y dramatismo y situaciones en tierra con diálogos fluidos, humor, camaradería, pero también emotividad y agudas reflexiones, poniendo el acento sobre la camaradería, las segundas oportunidades para redimirse y la amistad.
John Wayne está estupendo en su papel y aspectos técnicos como fotografía y sonido son de recibo.
En mi opinión, excelente film, que no conocía en absoluto.
Tuvo en su día tres nominaciones a los Óscars , lo que, vista la cinta, no me extraña.

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