Justo homenaje a una de las grandes historias que dejó ese tándem imborrable de la animación para Batman: Paul Dini y Bruce Timm. Stephen Fedasz IV nos trae de vuelta el mítico cómic que permitió a Harley Quinn colarse para siempre en el panteón de personajes del universo creado por Bob Kane y Bill Finger. Pese a ser de la década de os 90, la enloquecida compañera del Joker logró adelantar por la derecha a casi todo el mundo.

Una trama demencial y perfectamente llevada con el primer uniforme de la antigua psiquiatra de Arkham, además de una adecuada reflexión sobre la eterna rivalidad del Joker y el Murciélago. Aunque se ha intentado actualizar o dar versiones distintas de la destacada miembro del Escuadrón Suicida, nunca ha sido superado este origen que debería ser el canon para cualquier interpretación de la misma.

No dejen de leer la aventura en viñetas, su verdadero formato y donde alcanza toda la riqueza que atesora. Si les lleva a sumergirse en la serie animada de estos dos genios del cómic, habrá merecido la pena.

Eran días oscuros para Batman y llegaron ellos junto a Harley para devolver la sonrisa más macabra, gamberra y oscura con esta supuesta historia de romance.