El buen cine francés existe. Existió la nouvelle vague hace ya bastantes años y últimamente solo quedaban rastros más bien soporíferos y reiterativos. Personajes grises interpretados por Huppert, Auteuil,Depardeieu...mon Dieu, quel ennui ! Pero nos ha llegado un soplo de aire fresco con Valerie Donzelli. En otras manos podría haber sido el melodrama lacrimógeno del año. Sin embargo,sus responsables optan por un enfoque humano, sensible y respetuoso, dinámico y vital, moderno sin estridencias, que elude con acierto la grandilocuencia, así como cualquier atisbo de conmiseración.
La banda sonora exquisita y fascinante en ciertas secuencias que te atrapan inmisericordes.
Una historia que revela cuán frágil y fuerte a la vez, puede llegar a ser la condición humana. Una contradicción apasionante que descubrimos gracias a Valerie Donzelli en toda su belleza.

Mi crítica será breve: SIN INTERES. A pesar del reparto de lujo,el guión carece del más mínimo interés ,lo cual te produce un aburrimiento que te lleva al adormecimiento. Sólo acaparó un mínimo mi atención lo bien que Colin Firth imita el acento americano,ya que ví la peli en el original. En fin,una pérdida de 80 minutos de mi vida.

No tengo adicción al cine español,más bien al contrario. Pero cuando aparece una peli con tal calidad y dignidad,soy la primera persona en reconocerlo y en animar a cuantos me rodean a que vayan a verla y disfrutarla.
Guión de actualidad.Interesante. Urbizu en estado de gracia,crea un clima de cine negro auténtico,de lo mejor que se ha dado en este país . Coronado hace honor a su apellido : un actor en ascenso imparable,como lo está demostrando en sus últimos trabajos.
Es un placer poder recomendar esta película con la absoluta seguridad de que nadie quedará defraudado. Una gozada.

Con esta película te reconcilias con el CINE,con mayúsculas. Te olvidas automáticamente de tantas pelis vacías o,peor,llenas de basurilla.Te olvidas. Y te metes dentro de HAVENEN. Contada con intensidad sin dramatismo fácil, con sentimiento sin blandenguería,con realismo crudo sin contemplaciones. Auténtico cine.Imágines que lo dicen todo con pocas palabras, acompañadas de una buena banda sonora. Y,además de la dirección,fotografía y trabajo de actores(todo excelente) una moraleja final (que no moralina) conciliadora,gratificante,esperanzadora. Total:
espléndida peli.Globo y Oscar bien merecidos. Es mi modesta opinión.

No consigo entrar en lo que Tiziano Terzani nos quiere transmitir a través de este texto. Y digo TEXTO porque no hay realmente guión. Y la pelicúla se queda corta como cine,es más un monólogo teatral con Bruno Ganz y sus movimientos de manos tan expresivos porque encarna a un italiano,supongo. Cuenta unas vivencias interesantes,pero que no ahondan lo suficiente como para emocionar al espectador . La he disfrutado,pero esperaba que me llegase al corazón y no ha sido así. Ni siquiera con la gran ayuda de la belleza de las imágenes de la Toscana y de la exquisita compañía de la música de Ludovico Einaudi.