Han pasado más de 3 años y nadie en España se ha acordado de esta película. Ni en pantalla grande, ni en DVD, ni en TV...

Es cierto que no es una película de interés multitudinario como para estrenarla en la Gran Vía de Madrid (aunque visto lo visto... ¿por qué no?), pero sinceramente me da coraje que se estrenen, en ciertos cines "de élite", exóticas "joyas" procedentes de irán, turquía, corea, finlandia... y se olviden de películas como ésta. Sólo por ver a Gretchen Mol haciendo esta gran interpretación de la maravillosa Bettie Page, merece la pena.

¿Alguién lo solucionará?

Siempre me gustó Chet, ahora me gusta aún más.
Dicen que el talento es un bien escaso, en Let's Get Lost sobra: el magnífico montaje, la selección de canciones, las entrevistas, esa triste melancolía presente desde el primer minuto...
Lets Get Lost es genuina, sencilla, llena de historias apasionantes, de emociones fuertes, de vida, sentimiento y música. Cool, Baby, Cool!

“Velvet” es una serie de ficción que está ambientada en Madrid a finales de 1958. Ofrecen glamour, moda, chicas guapas y chicos guapos. También actores con experiencia contrastada, como Pepe Sacristán, Aitana Sánchez-Gijón, Natalia Millán y Tito Valverde. Hasta aquí, todo bien.

Sin embargo hay otro elemento narrativo muy importante que nos quieren vender. Lo malo es que ese producto, en esta serie no funciona, no transmite. Me refiero a la música, a las canciones.

Al contrario que en “Mad Men”, donde la música está integrada en la historia componiendo una banda sonora excepcional llena de grandes temas, en “Velvet”, ocurre precisamente lo contrario.

En Mad Men utilizan música comercial, o sea canciones originales de los diferentes años en los que se desarrolla la serie. También cuentan con una brillante banda sonora original.

En la serie americana podemos escuchar canciones de Bob Dylan,Rolling Stones, Beatles, Kinks, Simon & Garfunkel, Astrud Gilberto, Brenda Lee, Perry Como, Julie London, Beach Boys, Bart Bacharach, Nancy Sinatra, y muchas más que harían la lista interminable…

¿Qué músicas nos encontramos en “Velvet”? Para empezar, ninguna música original de aquellos años. Las canciones que escuchamos en “Velvet” son todas material de librería, o sea libre de derechos. Hay muchas compañías que se dedican a este negocio. Tienen un amplio catálogo de pistas de todos los estilos musicales para que la productora escoja, pague y coloque en su serie acompañando a las imágenes. Este tipo de temas musicales se suelen utilizar bastante en spots de T.V., documentales o cuñas de radio como música de fondo, sin protagonismo alguno.

En “Velvet”, pretenden acentuar cada momento dramático con alguna de esas canciones de archivo, de librería, y no lo consiguen. Son temas hechos sin alma, sin pasión. Son unas cuantas notas compuestas de modo automático que recuerdan vagamente a algún “hit”, pero nada más. No emocionan. Saturan de música inadecuada muchas secuencias.
Tienen una opaca y deslucida banda sonora original creada por Lucio Godoy, que no acompaña tampoco las acciones.

Por otra parte, cometen múltiples errores cronológicos, al utilizar, por ejemplo, músicas hechas al estilo de 1965 que colocan sin problemas en 1958, la música que se hacía a mediados de los 60 era radicalmente diferente, los gustos habían cambiado.

Tampoco hay ningún tema original cantado en español o en italiano o en francés, muy de moda a finales de los 50.

Cuando emitan la serie, haz una prueba. Coge tu móvil, activa un localizador de canciones, Shazam, o SoundHound… el resultado… ¡no reconoce ninguna!

Está más que claro que no han contado con un asesor musical.

De otros aspectos de la serie, de las tramas, sub-tramas, protagonistas y maneras de interpretar, hay mucho que hablar, pero lo dejaré para otro día.

Los alardes de producción; localizaciones exóticas, lujosos decorados, vestuario con glamour, atrezzo demasiado perfeccionista y la alta peluquería, están muy por encima de la acción, del argumento, del guión y también de la interpretación.

El personaje de Sira Quiroga/Aris Agoriuq está sobreactuado y carece de matices. Ser una chica mona y fotogénica, casi nunca es suficiente.

El guión es horrible, rancio y muy cursi, probablemente lo peor de la serie. Es un ejemplo descarado, en muchas de sus situaciones, de lo que se llama “inverosímil fílmico”.

El argumento esta alargado como un chicle de fresa. Los creadores de “El tiempo entre costuras”, decidieron desarrollar la historia en 11 capítulos, demasiado metraje para un relato que tendría que haberse rematado en 2 horas como máximo.

La acción es lenta, a veces insoportable. En muchos episodios no pasa nada de interés y se extiende con pequeñas subtramas que no conducen a ninguna parte, pues se resuelven enseguida.

La historia en sí, me recuerda mucho a las Aventuras de Tintín, (de las que soy fan absoluto) es ingenua, simple y muy previsible. También es pretenciosa.

Una vez más tenemos que decir que era mejor el libro.

En una secuencia de "Night Moves" (La Noche Se Mueve. Arthur Penn, 1975), Harry Moseby, personaje interpretado por Gene Hackman, hacía alusión a una película de Eric Rohmer: "Una vez vi una película de Rohmer. Era como mirar como se seca la pintura". Si el pobre Harry viera "Secret Sunshine"... ¿qué diría?.

"Secret Sunshine" tiene un metraje excesivo para un argumento muy simple. Es una película tediosa en su planteamiento y desesperante y reiterativa en su desarrollo. Sus personajes están desdibujados y resultan irritantes en muchas ocasiones. Lo que nos cuenta es tan inocente, tan obvio, tan evidente, tan falto de contenido que te hace esbozar una sonrisa muy aburrida en la soledad del patio de butacas. (Cada vez más y más vacío)

Al fin, cuando sales de ese martirio compruebas que has estado allí dentro viendo un cortometraje de ¡dos horas y cuarto!. Entonces es cuando te das cuenta del valor del tiempo fílmico y añoras el talento, el maravilloso ritmo lento y el buen hacer de Resnais, de Rohmer, o del gran maestro Micheangelo Antonioni...

Querido Lee Chang-dong, "Milyand" se aleja mucho de lo que es CINE.

Querido Harry Moseby, como se que no verás nunca esta película, me atrevo a decir lo que tu opinarías sobre ella: "Secret Sunshine" es como mirar como se seca el Océano.