Ver una película de Rambo no requiere un gran ejercicio intelectual, eso es obvio, pero quien acude al cine a ver esta nueva entrega sabe perfectamente lo que se va a encontrar en pantalla porque una cuarta parte no admite muchas sorpresas y porque todos los fans de la saga saben de sobra cómo se las gasta el tío Jonh: ni más ni menos que un taciturno exboina verde dando rienda suelta a sus instintos belicosos más bajos.

Después de 20 años " John Rambo" sigue ofreciedo aquello por lo que se hizo famoso: mucho pum pum y poco bla bla. Y en esta nueva entrega Stallone ha sido consecuente y fiel a sí mismo alejándose de experimentos raros y dando a su público lo que quería.

Sí es cierto que ésta es mucho mas visceral y sangrienta que sus predecesoras ( que no más violenta), otro punto a favor sin duda para ser enmarcada por sus seguidores dentro del olimpo de los héroes de acción del siglo XX y XXI, claro.

La trama es muy simple pero ver de nuevo a esta leyenda del cine de acción dando saltos por la jungla y matando a diestro y siniestro se merece el reconocimento de todos sus fans, entre los que me incluyo.