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Voto de Chagolate con churros:
7
Nadar
2008 España
Documental
6,3
108
Documental Tres generaciones de mujeres solas se enfrentan a un secreto guardado durante años. Una abuelo fusilado en 1940 será el arranque de una investigación que narra un viaje personal y reflexiona sobre la pérdida de la memoria familiar y colectiva. En definitiva, la búsqueda de la propia identidad. (FILMAFFINITY)
26 de marzo de 2010
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
La intromisión siempre es violenta. A día de hoy, el documental español pasa por una fase evolutiva más que importante. Al margen de lo ortodoxo, existen propuestas de descarnada intromisión que con mucho pulso, colocan al espectador al lado del realizador sin que sintamos vulnerar la privacidad que se destapa. Carla nos invita a la casa familiar donde un fantasma cohabita desde hace sesenta años: Juan Arroniz.

Carla comenta que todo empezó al no saber contestar a un periodista cuando le preguntó los motivos por los que su abuelo fue fusilado en 1940. A partir de entonces, quiso desenterrar una incógnita enterrada en la memoria de la familia. Admite que la curiosidad le llegó tarde, cuando su abuela comenzaba a luchar contra el Alzheimer. Años después, la propia madre de la directora empieza a sufrir la misma enfermedad.

No existe memoria histórica como tal -dice la directora-. Cada uno de nosotros, somos como somos porque cada cual tiene su propia memoria personal. Las propias memorias familiares han germinado en lo que ahora somos. Así pues, “Nedar (Nadar)” es la sombra de un contexto (la Guerra Civil) proyectada sobre una familia particular creando así una de las muchas memorias que existen.

Subirana teje un documental que a veces puede dar la sensación de disperso pero que al final acaba por conglomerar las ideas vertidas. Memorias históricas, familiares y personales se entrelazan circularmente tras la figura del abuelo. Las respuestas quedan encubiertas, casi silenciadas. En los momentos finales, cuando el misterio puede ser resuelto, la cámara sigue el camino diario de Dolores (hermana de Juan) a la farmacia. La cámara no va más allá. Tampoco interesa a estas alturas resolver según qué incógnitas. Quién era Arroniz, se convierte con el paso de los años en un señuelo.

No existe identidad sin memoria, pero igual de importante que la histórica, es aquella memoria que recuerda a la persona amada o que es capaz de poner las diez y diez en un reloj dibujado.
Chagolate con churros
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