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Voto de LaT3x:
9
6,9
16.812
Comedia. Drama. Fantástico. Romance
Una novelista (Emma Thompson) está intentando acabar su última -y posiblemente mejor- obra. Sólo hay un problema: tiene que encontrar un modo de matar al personaje principal (Will Ferrell). ¿Que cuál es el problema? Pues que el personaje principal no es un ente de ficción. (FILMAFFINITY)
8 de febrero de 2007
87 de 107 usuarios han encontrado esta crítica útil
Siento usar este reclamo publicitario, pero lo creo necesario para evitar desastres mayores.
Se me hace muy complicado hablar de esta película sin romper parte de la trama. Hay críticas, sinopsis e incluso el propio trailer, que destripan la esencia del argumento y si hubo algo con lo que disfruté, además de la propia película, fue con la experiencia de descubrirla por completo desde el primer segundo.
Por eso y para intentar ser mínimamente útil a aquellos que aún no la han disfrutado, os recomiendo que leáis la condensada y axiomática crítica de “Alexis” que conserva la esencia, da pistas pero no la destroza en absoluto. Además, si vi esta película fue por su crítica así que en cierto modo tengo que darle las gracias ya que ha sido todo un hallazgo.
Nota: 8,5
Continuaré en el spoiler, donde me sentiré mucho más cómodo…
Se me hace muy complicado hablar de esta película sin romper parte de la trama. Hay críticas, sinopsis e incluso el propio trailer, que destripan la esencia del argumento y si hubo algo con lo que disfruté, además de la propia película, fue con la experiencia de descubrirla por completo desde el primer segundo.
Por eso y para intentar ser mínimamente útil a aquellos que aún no la han disfrutado, os recomiendo que leáis la condensada y axiomática crítica de “Alexis” que conserva la esencia, da pistas pero no la destroza en absoluto. Además, si vi esta película fue por su crítica así que en cierto modo tengo que darle las gracias ya que ha sido todo un hallazgo.
Nota: 8,5
Continuaré en el spoiler, donde me sentiré mucho más cómodo…
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
… y es que no se puede decir que el protagonista escucha una voz en off, aunque ocurra en el minuto 5. No se puede desvelar que la voz en off es una escritora, aunque ocurra en el minuto 10 y no se puede mencionar que esta voz en off es la escritora que narra la vida del protagonista, ocurra en el minuto que ocurra….
Su seductora intro atrapa al espectador, pero ¿por qué nos gusta? Personalmente creo que el “gran culpable” de ese exquisito placer es la voz en off y algo que siempre me he preguntado:
¿Qué tendrán las voces en off que nos gustan tanto?
¿Es porque ofrecen una visión mucho más profunda de los sentimientos de los personajes?
¿Es porque consigue golpear al espectador mucho más que una imagen o una melodía?
¿Es porque constituye un nexo de unión entre el espectador y los personajes que además nos acerca mucho más a la película?
Aunque esta voz es diferente y constituye una ruptura con su presentación clásica en otras películas puesto que el protagonista escucha a esa voz, aunque ella no parece escucharle a él.
Todo cambia cuando la voz en off y escritora de su vida, decide matar a su protagonista, aunque tanto él, como nosotros, e incluso la propia escritora, ignora cuándo y cómo se dará el fatídico momento. Lo que podría suponer una inyección letal para su vida, acaba por tener el efecto contrario y supone un fuerte impulso para la búsqueda virtual y real de su futuro verdugo literario: Kay Eiffiel (interpretado majestuosamente por Emma Thompson).
La realidad se enreda de forma sutil con la ficción llegando a convivir casi de forma poética durante un breve período de tiempo con una maravillosa primera toma de contacto entre la escritora y su protagonista, en la que Harold, suplica a Eiffiel casi en voz baja que no quiere morir. Su vida empezaba a cobrar cierto significado, sentía estar vivo y comenzaba a desenvolverse en una nueva dimensión pasando a ser un personaje real. Pero Eiffiel se debatía entre realidad, ficción y su futuro hasta que finalmente supo discernir el final y muerte de Harold.
El día final ya había llegado, él lo sabía y nosotros también. La dulce y deliciosa música del maestro Vangelis titulada “La petite fille de la mer”, pone fin al último día de la vida de Harold; un último adiós con el que mis ojos acabaron empañados de lágrimas…
… al menos así creo que debería de haber sido el punto y final de la película, pero su verdadero y algo empalagoso desenlace, con cierto toque de moralina y con una entrada en el hospital desconcertante y poco creíble de Pascal, fue su único punto negativo. Pero es un mal menor y no puede eclipsar al resto, ni a la idea, ni al guión, ni a la música, ni al encanto… ni a mis lágrimas derramadas.
Hacía tiempo que no veía una película que me gustara tanto.
Su seductora intro atrapa al espectador, pero ¿por qué nos gusta? Personalmente creo que el “gran culpable” de ese exquisito placer es la voz en off y algo que siempre me he preguntado:
¿Qué tendrán las voces en off que nos gustan tanto?
¿Es porque ofrecen una visión mucho más profunda de los sentimientos de los personajes?
¿Es porque consigue golpear al espectador mucho más que una imagen o una melodía?
¿Es porque constituye un nexo de unión entre el espectador y los personajes que además nos acerca mucho más a la película?
Aunque esta voz es diferente y constituye una ruptura con su presentación clásica en otras películas puesto que el protagonista escucha a esa voz, aunque ella no parece escucharle a él.
Todo cambia cuando la voz en off y escritora de su vida, decide matar a su protagonista, aunque tanto él, como nosotros, e incluso la propia escritora, ignora cuándo y cómo se dará el fatídico momento. Lo que podría suponer una inyección letal para su vida, acaba por tener el efecto contrario y supone un fuerte impulso para la búsqueda virtual y real de su futuro verdugo literario: Kay Eiffiel (interpretado majestuosamente por Emma Thompson).
La realidad se enreda de forma sutil con la ficción llegando a convivir casi de forma poética durante un breve período de tiempo con una maravillosa primera toma de contacto entre la escritora y su protagonista, en la que Harold, suplica a Eiffiel casi en voz baja que no quiere morir. Su vida empezaba a cobrar cierto significado, sentía estar vivo y comenzaba a desenvolverse en una nueva dimensión pasando a ser un personaje real. Pero Eiffiel se debatía entre realidad, ficción y su futuro hasta que finalmente supo discernir el final y muerte de Harold.
El día final ya había llegado, él lo sabía y nosotros también. La dulce y deliciosa música del maestro Vangelis titulada “La petite fille de la mer”, pone fin al último día de la vida de Harold; un último adiós con el que mis ojos acabaron empañados de lágrimas…
… al menos así creo que debería de haber sido el punto y final de la película, pero su verdadero y algo empalagoso desenlace, con cierto toque de moralina y con una entrada en el hospital desconcertante y poco creíble de Pascal, fue su único punto negativo. Pero es un mal menor y no puede eclipsar al resto, ni a la idea, ni al guión, ni a la música, ni al encanto… ni a mis lágrimas derramadas.
Hacía tiempo que no veía una película que me gustara tanto.