El género documental nunca ha bajado la guardia, siempre nos deleita con fabulosas historias y además en los últimos tiempos goza con una calidad incontestable. A mi en especial me apasionan los llamados rockumentaries, desde siempre he consumido conciertos en DVDs primero, en mis años de estudiante sobretodo, Woodstock, Leeds, Hyde Park, Monterrey, Ozzfest, CBGB, Fillmore east, Olimpia, en fin todo ese rollo y más tarde y un poco más maduro los documentales acerca de la vida de esos grupos para saber más tanto de la música como de sus vidas y en muchas ocasiones sobre la época donde tocaron. He visto muchísimos, soy un adicto y me encantan. Hace un tiempo no era especialmente fácil verlos, pero hoy en día hay muchísimos más medios y además cada año el número de producciones de este género sigue subiendo al igual que su calidad.
Este docu es un ejemplo de todo lo que os he contado un poco más arriba.
Una auténtica gozada de documental que no sólo nos habla del grandísimo David Crosby, buque insignia con sus compañeros Stills, Nash y Young sino de toda una generación que intentó cambiar el mundo pero que tristemente se dieron de bruces con la realidad y casi lo consiguieron.
De lo mejorcito de este año, sin duda una deliciosa pieza audiovisual que no se os puede pasar.