Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid, Jaca
Voto de jaly:
10
Drama A principios del siglo XX, un compositor alemán de delicada salud y cuya última obra acaba de fracasar, llega a Venecia a pasar el verano. En la ciudad de los canales se sentirá profundamente atraído por un hermoso y angelical adolescente, sentimiento que le irá consumiendo mientras la decadencia también alcanza a la ciudad en forma de epidemia... Adaptación de la obra homónima del escritor Thomas Mann. (FILMAFFINITY)
25 de diciembre de 2009
21 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el artista casi siempre se supone una disposición especialmente sensible frente al mundo que lo rodea, lo cual lo lleva a producir obras de arte.

El artista es un individuo que ha desarrollado tanto su creatividad como la capacidad de comunicar lo sentido, mediante el buen uso de la técnica.

La aptitud artística es considerada una disposición o capacidad, natural o adquirida, para producir un tipo especial de objetos considerados artísticos. Como todas las aptitudes, la aptitud artística se educa y se desarrolla a través de una aplicación constante.

Cuando se trata de talento, hablamos de una aptitud poco frecuente, que distingue y singulariza a quien la tiene. Normalmente el talento se atribuye a los artistas con cierto reconocimiento social que han conseguido un estilo o manera propia de hacer las cosas.

La genialidad se refiere a una aptitud de carácter superior: aquella de la que está dotada una persona con una gran capacidad de invención, de organización, de creación. El artista genial es aquel cuyas obras llevan un sello tanto personal como universal. Se considera que sus obras influyen sobre la sociedad y la cultura a la que pertenece.

El artista es también aquel que crea sin poder elegir crear. Para él, crear y transmitir es algo innato, como para todo el mundo comer no es una decisión, o respirar es una necesidad fundamental.

El artista no solo ve, vive y disfruta de la belleza, sino que la siente y necesita entenderla; esta puede ser de muchas maneras, puede ser la juventud, puede ser lo más etéreo que se imagina, o lo más triste y oscuro, pues el artista es capaz de ver belleza y arte en potencia en todo lo que le rodea.

El artista vive con muchos fines, al igual que cada ser humano, pero su fin superior es crear para transmitir, lo cual se puede hacer escribiendo, pintando, componiendo, interpretando, esculpiendo; pero siempre bajo un concienciado trabajo de observación y empatización.

Muerte en Venecia, en el apartado del cine como arte, es el máximo exponente. Cuatro nombres dan entidad a esta obra maestra: Visconti, Mann, Mahler, y Bogarde. Cuatro hombres que plasmaron para la posteridad lo que significa ser artista, lo que eleva y destruye de esa necesidad por crear.

Muerte en Venecia es también una alegoría de la belleza, la decadencia y la juventud, el más incisivo análisis sobre cuestiones que han preocupado a todo artista, desde Miguel Angel, a Mozart, pasando por Jane Austen hasta llegar a cineastas y compositores actuales.

Por ello, ver Muerte en Venecia está mucho más allá de disfrutar de una (bellísima) película. Es sumergirse en las inquietudes y las necesidades inherentes de un artista, sin pudor ni posibilidad de escape. El artista crea, y crea desde lo que se ha destruido o se destruirá; porque en él está la necesidad de que el arte, su arte, permanezca, como ejemplo de los miedos, alegrías, dichas, temores, virtudes y oscuridades humanas.
jaly
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow