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España España · Madrid, Jaca
Voto de jaly:
7
Drama. Romance El Rey Eduardo VIII (James D'Arcy) renunció al trono de Inglaterra para casarse con Wallis Simpson (Andrea Riseborough), una estadounidense divorciada. Al mismo tiempo se narra la historia de William y Wally Winthrop (Abbie Cornish) un matrimonio actual. (FILMAFFINITY)
11 de febrero de 2013
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como ocurre siempre que Madonna hace algo, ya sea música, conciertos, espectáculos, libros, fotografías, cine, estornudar o salir a la calle, las reacciones son desproporcionadas. No hay un palo que la artista toque que se salve de ser calificado de cataclismo universal. Y W.E. no es una excepción.

Porque ¿realmente hay tanto por lo que sentirse ofendido ante esta película? No creo, ni mucho menos, que W.E. sea una obra maestra, pero si cualquier otro realizador fuera el que figurase en los créditos de la cinta, seguro que habríamos oído cosas del tipo “alejándose del academismo”, “una visión estética de la realidad histórica”, o “cómo contar una historia de sobras conocida y sobada de manera original”. Pues bien, así lo pienso yo.

Porque W.E. es una película que apuesta por ser original, por contar una historia desde otro punto de vista (argumental y estilístico) que el de la mayoría de las producciones de época, o basadas en hechos reales, o crónicas de la realeza inglesa. Su guión no siempre funciona, y la combinación de pasado y presente, con alegorías y anacronismos decididos, no alcanzan en todo momento el punto deseado.

Pero W.E. trata, por encima de eso, de plasmar una realidad de forma poética y metatextual, de indagar en el fanatismo, la persecución mediática, la lucha de clases y culturas, y los distintos tipos de violencia hacia la mujer, y lo hace de forma estética, arropada por un diseño de producción, una fotografía, y una música de Abel Korzeniowski (A single man, de nuevo pletórico), que nunca disimulan las intenciones formales y estéticas de una película imperfecta e inacabada, pero nunca deleznable.

W.E. es entretenida y apuesta por ser original. Madonna demuestra pulso con la cámara, y aunque el guión falle en aspectos de estructura y de transmisión de ideas, la película funciona sensorialmente, y es capaz de estimular sentidos y sentimientos (algo que no puede decirse de mucho cine comercial).

Como siempre, su indisimulada identificación con la historia de Wallis y Eduard, cabreará a muchos, que serán incapaces, simplemente, de sentarse a disfrutar de una historia potente, original, con actores entregados, y sobre todo, con una perspectiva de la historia novedosa.
jaly
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