Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid, Jaca
Voto de jaly:
8
Drama En 1948, el senador y escritor Pablo Neruda acusa al gobierno chileno de traicionar a los comunistas en el congreso. El presidente González Videla lo desafuera y ordena su captura. El poeta emprende la huida del país junto a su mujer. Mientras es perseguido por el prefecto de la policía, Neruda comienza a escribir "Canto general" y se convierte en símbolo de la libertad y leyenda literaria. (FILMAFFINITY)
18 de febrero de 2017
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como todos los medios cinematográficos y el propio Pablo Larraín se encargaron en remarcar, Neruda no es una película o biografía que sirva para contar la vida del poeta Pablo Neruda, sino una narración imaginada sobre "'lo nerudiano'. Y pocas veces un slogan se pliega tanto a la realidad con esta afirmación, pues Neruda, efectivamente, no se apoya en una trama o en el apasionante devenir de la vida del Poeta, sino más bien en cierta ensoñación, en la fábula de unos acontecimientos contados como si las palabras de Neruda se hubiesen destilado en imágenes.

Esa abstracción o aproximación poética (y deliberadamente abstracta por tanto), puede hacer de Neruda, la película, una experiencia algo difusa, como nublada por su propio ensimismamiento, en la que intuimos muchos sucesos importantes más que verlos, en la que atisbamos verdaderos dramas humanos más que sentirlos, lo que puede provocar la confusión e incluso el aburrimiento, de muchos espectadores. Además, al ser la película intermedia entre dos obras del calibre como son El Club y Jackie (para más datos, dos obras maestras), puede parecer una película menor del director Pablo Larraín; pero si uno se deja llevar por la propuesta definitivamente literaria de Neruda, la experiencia cinematográfica es verdaderamente emocionante.

Neruda es un juego, el juego serio de una persecución y de un perseguido, que nunca define del todo sus roles: el policía interpretado por Gael García Bernal persigue al poeta que interpreta Luis Gnecco al tiempo que su propio yo es acosado por las verdades literarias de Neruda. El poeta es perseguido por su conciencia como activista, como amante y como artista. Y el destino de ambos es árido y frío, acompasado únicamente por el ritmo de esos versos tristes, poemas de amor y de furia, que alternan en esta película musical, literaria, como compuesta más que editada, con elegancia, brío y una sensibilidad extraña, como aquella que te envuelve cuando lees un poema que es hermoso.

Todos sus actores, su bellísima banda sonora y fotografía, acompañan esta película de viajes externos e internos, de esencia artística más que narrativa, que supone un bello fresco de eso que llaman 'lo nerudiano': cierto idealismo, un gozoso y hasta hedonista sentido de la vida, un retrato compasivo de los personajes porteños y de los oscuros callejones de la bohemia, que busca incansablemente esos poemas de un futuro imaginario, que llegó y a la vez nunca llegó. Una película sentida y sensible, que evita con acierto el costumbrismo y lo panfletario en favor de lo poético y lo evocador, aunque eso suponga un riesgo para los que esperen un biopic más convencional.
jaly
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow