Toda legislación que quiera equiparar en derechos a los homosexuales me parece bien. Ya era hora que se empiece a reconocer que los gays, igual que los heteros, los bi, las lesbianas, los transexuales son personas iguales, y por tanto con los mismos derechos y deberes.

Ahora bien, flaco favor hace este engendro al colectivo homosexual. Hacer una película a lo " American Pie" versión gay, no iguala a nadie, al contrario, lo que hace es denigrar. Mostrar toda una serie de estereotipos chorras ( a saber: la loca, el inseguro, la lesbiana machorra, el buenorro, el negro con atributos gigantes...), diálogos lamentables y sin gracia alguna y una obsesión monotemática hacia el sexo, solo consigue perpetuar la imagen del "mariquita gracioso", algo desviado pero siempre aceptable mientres no me toque.

En definitiva, una vergüenza de film. Nadie debería ver esto, pero si además eres gay aún menos, podría ofender a tu sensibilidad y a tu inteligencia.

Lo mejor: Nada de nada
Lo peor: Todo