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Voto de evag_87:
8
7,0
9.999
Drama
El veinteañero Julián es un exitoso diseñador de videojuegos que vive atormentado por un oscuro secreto. Cuando Diana aparece en su vida, Julián sentirá cercana la oportunidad de ser feliz.
8 de octubre de 2022
264 de 294 usuarios han encontrado esta crítica útil
Salgo de la película turbada. Turbada porque esperaba que Carlos Vermut me golpeara con más fuerza, me perturbara... y siento que no lo ha hecho. Pero las raíces de la semilla que ha plantado se van extendiendo lentamente. (Percepción de la película en zona spoiler)
Dejando reposar mis ideas, cada vez me gusta más Mantícora. Cada vez veo más coherencia en el trabajo de Carlos Vermut y en esa idea insistente de todos sus films. La dicotomía del monstruo. En esta película trabaja la relación que tenemos como sociedad con "el monstruo".
Dejando reposar mis ideas, cada vez me gusta más Mantícora. Cada vez veo más coherencia en el trabajo de Carlos Vermut y en esa idea insistente de todos sus films. La dicotomía del monstruo. En esta película trabaja la relación que tenemos como sociedad con "el monstruo".
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Gran parte de la película parece que estés viendo una historia romántica a lo 500 días juntos. Un chico majo, que quieres que encaje y que todo salga bien. El director hace mucho ahínco en eso. Pero la diferencia es que has visto esa astilla del monstruo y por mucho que la quieras ignorar, sabes que no va a poder ser.
En efecto, cuando se desvela al monstruo lo quieres apartar, del trabajo, de la relación... porque da asco. Pero el monstruo sigue ahí y solo hay dos opciones posibles. O el monstruo hiere a otro o se hiere a sí mismo. Ambos finales son posibles y son igual de oscuros.
El protagonista decide quitarse la vida antes que ser capaz de perpetrar las ideas que habitan en su cabeza. Entonces, la sociedad que había girado la cara lo vuelve a aceptar. Se pagan las operaciones que haga falta y la chica lo cuida porque ese monstruo ya no puede herir más. Acaso ¿el monstruo ya no da asco? ¿o me doy asco yo por haberle dejado de lado en esta sociedad, ignorándolo y esperando que que todo saliera bien? Cuántas astillas tenemos nosotros mismos. Cuántas cosas oscuras que no se dicen. Porque... mientras la violencia se ejerza solo en el mundo virtual no pasa nada, ¿verdad? ¿Cuántos monstruos caminan entre nosotros? O, tal vez, deberíamos empezar aceptar que ser humano conlleva una parte de ese monstruo.
En efecto, cuando se desvela al monstruo lo quieres apartar, del trabajo, de la relación... porque da asco. Pero el monstruo sigue ahí y solo hay dos opciones posibles. O el monstruo hiere a otro o se hiere a sí mismo. Ambos finales son posibles y son igual de oscuros.
El protagonista decide quitarse la vida antes que ser capaz de perpetrar las ideas que habitan en su cabeza. Entonces, la sociedad que había girado la cara lo vuelve a aceptar. Se pagan las operaciones que haga falta y la chica lo cuida porque ese monstruo ya no puede herir más. Acaso ¿el monstruo ya no da asco? ¿o me doy asco yo por haberle dejado de lado en esta sociedad, ignorándolo y esperando que que todo saliera bien? Cuántas astillas tenemos nosotros mismos. Cuántas cosas oscuras que no se dicen. Porque... mientras la violencia se ejerza solo en el mundo virtual no pasa nada, ¿verdad? ¿Cuántos monstruos caminan entre nosotros? O, tal vez, deberíamos empezar aceptar que ser humano conlleva una parte de ese monstruo.