A veces suceden estas cosas. Una nota media mediocre en una web de la que generalmente te fías y con la que coincides, multitud de críticas y votos displicentes y ridiculizadores, incomprensión general de la jugada, prejuicios propios tras ver todo esto... y vas al cine con la alarma puesta y sin confiar prácticamente nada, sabiendo que esa peliculita...

Y como digo, a veces sucede: te llevas la sorpresa agradable de haber disfrutado de una película entretenidísima; chorras, sí, pero sin complejos; cine veraniego y refrescante del bueno, con ritmo acojonante y amenidad y entretenimiento del de verdad, no del impostado por otras supuestas pinículas palomiteras como 'Prince of Persia' y otros bodrios estomagantes, y que funciona -y estupendamente- en su intención paródica, aunque a juzgar por las críticas no ha sabido darse a entender: vamo a vé, si esto es una parodia de las cintas de agentes secretos internacionales y en concreto de misiones imposibles y aledaños (no es casualidad el protagonismo del propio Cruise)... ¿alguien puede pensar que esos surrealistas sanfermines sevillanos no forman parte de la propia parodia? Habría que recordar que en 'Misión imposible 2' (aquel engendro que se tomaba ridiculamente en serio a sí mismo) se quemaban santos en las "fallas sevillanas" -y eso era en serio- de manera que la parodia que nos ocupa va mucho más lejos de lo que la gente parece haber captado. Y tiene gracia, mucha gracia.

Así que las intrépidas aventuras de este agente, Knight (¿familia de Michael?), y la rubia que se encuentra en su camino (la cosa hubiera sido que su apellido ficticio fuera Day, como Doris...), quedarán en mi recuerdo como uno de los mejores, y más gozosos y divertidos blockbusters veraniegos que disfruté en una sala de cine cuando el calor aprieta tanto fuera que te meterías al cine hasta para dormir.

Y a propósito, seamos benévolos y perdonemos a los distribuidores: el juego de palabras era intraducible.