Una escritora estadounidense (Meg Foster) se traslada a un antiguo pueblo griego para terminar su última novela. Apenas llegar, será testigo del asesinato de su casero (Robert Morley).
Cinta de suspense/terror que cuenta con, al menos, dos elementos de interés: el escenario donde transcurre la acción, exótico a la par que desértico, y la amenaza de muerte susurrada por un viento incesante que casi diríase un personaje más. El resto se reduce a un cansino acoso por parte del psicópata de turno a la protagonista, en el clásico juego del gato y el ratón.



"El viento puede ser peligroso en esta época del año. Es lo bastante fuerte como para matar a un buey o tan gentil como para acariciar a una dama joven y hermosa como usted. Puede ser su amigo o su enemigo."