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España España · barcelona
Voto de Zappianin:
7
Drama Durante la Segunda Guerra Mundial, René Le Guen será el encargado de ejecutar a un traidor de la Resistencia francesa, pero ya terminada la contienda continuará asesinando hasta que finalmente es detenido y condenado a muerte. Su abogado pedirá clemencia porque hace responsable a la sociedad de los crímenes cometidos por René. (FILMAFFINITY)
26 de agosto de 2020
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
No es una película que pasará a los anales de la historia. Pero es valiente. Denuncia cosas que no suelen verse.
Ya tiene casi 70 años, aunque contiene más humanidad y vigencia que muchas que se realizan hoy día.
Su director era abogado de profesión y se nota. Hay un alegato contra la pena de muerte y a favor de la educación, en contra de la ignorancia y la brutalidad que desencadena.
La historia empieza al final de la segunda guerra mundial, en la Francia ocupada.
El personaje principal. Un analfabeto, madre alcohólica, padre desconocido. La hermana prostituta. Un hermano menor, al que solo le importa a su madre para seguir cobrando la pensión de menores.
Con éste cuadro. Nuestro personaje, ya medio alcoholizado, se convierte en asesino de la resistencia. Acata lo que le ordenan sin plantearse nunca nada. Acaba la guerra y matar se ha convertido en lo único que sabe hacer. No siente remordimientos.
La parte que esta rodada en la cárcel de "La sante". Recuerda " Le Trou ". Esa inmensa obra de Jacques Becker. Rodada también allí.
El valor documental y testimonial principal de esta película. Es mostrar la brutalidad humana. Llámese, carceleros, jueces, abogados, hombres bien pensantes, curas, los propios reos. En forma de ignorancia, de es lo normal. Lo establecido y punto. No se cuestiona. Muchas secuencias desprenden un humor negro muy logrado. De calidad.
Cada guillotinamiento, es casi una fiesta. El bar se llena. Es todo un evento del poder establecido, nadie cuestiona. Los periódicos venden, todo funciona. El engranaje social está bien engrasado. La farsa debe continuar.
La comitiva fúnebre es siniestra, de un grotesco mordaz y consumado. ( De lo más logrado del filme )
Navega entre el realismo y la farsa. Las situaciones que describe son tan grotescas que hacen difícil definir el género. También recordará al " Verdugo " de Berlanga. Aquella tiene un estilo más conciso. Aunque mama de ésta. Seguro que Berlanga y Azcona la vieron y requetevieron. Esta tiene 11 años antes de gestación.
El plano final es desolador y el final ejemplar y genial. La fotografía con ese blanco y negro. Todo un acierto.
No es fácil de encontrar, pero si tenéis ocasión de poder verla. Merece la pena.
Por ejemplo, muestra como eran atados, los condenados a muerte de pies y manos, antes de ser guillotinados. Así como el trato que les dispensaba el estado Francés. Todo el ritual que podía durar muchos meses.
Rezuma la hipocresía de los bien pensantes. La santa e intocable simulación, doblez, de aquellos que se creen con la verdad absoluta. Cortar cabezas se convertía en un ritual, como ir a la iglesia.
Recomiendo de éste director, la notable " Le passage du Rhin " 1960'.
Zappianin
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