Fui a ver esta película cuando aún no tenía nota en ninguna página sobre cine, pero la proyectaban en la cinemateca municipal y eso me generó cierta confianza. Nada más empezar, te encuentras con una supuesta Ruta 66 claramente rodada en alguna zona de Murcia o Almería, sin ningún tipo de ambientación que le dé una apariencia estadounidense. Aparte de los coches clásicos estadounidenses, lo demás son algarrobos, olivos, casas clarísimamente del Sureste español, quitamiedos y señalización clarísimamente española... Incluso ventas cutres típicas de las carreteras españolas sin siquiera cambiar el rótulo, anuncios de Perrier... Un despróposito digno de estudio. La cosa mejora cuando la típica camarera del desierto estadounidense te habla español perfectamente (aunque intentando meter algún deje de acento guiri) y no un español de México que ha podido aprender con los inmigrantes de la zona, no, un español de España inconfundible.

En cuanto al argumento, podría haber sido interesante e intrigante si se lo hubiesen currado un poquito, o incluso si hubiesen profundizado lo más mínimo.