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España España · Valencia
Voto de Carorpar:
6
Drama "Farinelli" fue el nombre artístico de Carlo Broschi, un célebre castrado que triunfó en la ópera en el siglo XVIII. Con 32 años y en la cumbre del éxito, Farinelli se retiró para cantar exclusivamente para Felipe V, rey de España (1700-1746). Doce años antes, Farinelli exhibe su talento musical en una plaza pública. Haendel, el compositor oficial de la corte de Inglaterra, que ha asistido a la representación oculto en su carroza, ... [+]
13 de julio de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Interesante reconstrucción histórica a cargo de una cinematografía como la belga, que no se cuenta precisamente entre las más poderosas del mundo; si bien, en rigor, se trata de una coproducción con Francia, Alemania e Italia, países de músculo audiovisual bastante mayor.
“Farinelli, il castrato” hace gala de un lujoso diseño de producción que le permite recrear con notable veracidad los oropeles de la Europa del rococó, del mismo modo, aunque con eco injustamente menor, que había hecho “Amadeus” (ídem, 1984) unos años antes. Además, a diferencia del fantoche que protagonizaba la celebrada cinta de Milos Forman, el debutante Stefano Dionisi logra eludir cualquier tentación caricaturesca para entregar un Farinelli atravesado de compleja y doliente humanidad.
Se echa de menos, eso sí, un mayor abundamiento en las dos décadas largas que el popular cantante —sería difícil encontrarle un paralelismo, en cuanto a fama, en el “show business” contemporáneo, Freddy Mercury quizá, o Michael Jackson— pasó en España al servicio exclusivo de los reales oídos de Felipe V y su sucesor, Fernando VI. Las “peculiaridades” —por no recurrir a otros términos susceptibles de herir sensibilidades monárquicas— de sus caracteres, sobre todo el del primero, ofrecían un sinfín de posibilidades para cuya explotación artística habrá, por desgracia, que esperar a futuras películas.
Mención aparte merece la banda sonora, compuesta de piezas de la época y firmadas por los Broschi, Porpora y Haendel reales. La asombrosa voz de Farinelli se obtuvo de la fusión digital de las de una soprano polaca y un contratenor estadounidense. El resultado, aun con la miríada de adelantos técnicos habidos desde su estreno hace ya un cuarto de siglo, sigue siendo sencillamente admirable.
Carorpar
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