Me apasiona y gusta esta inquieta y sublime serie. Aquí van varios divertidos y requetepensados apuntes sobre ella con intención de animarte a entablar una tertulia animada contigo.

- El dúo protagonista, Jason Lee y Ethan Sup Lee, rozan la perfecta perfección más admirable y admirada. Se complementan como helados XXL de fresa tropical picante y mi ansiosa, desmedida y chorreante boca en un caluroso verano sureño. Son unos soberbios actores cojonudos. ¿Cojonudos? ¡Nos quedamos ampliamente cortos! En más de una gloriosa y repetida ocasión, me he caído de mi sabaneada a la par que desordenada cama al pulcro y lejano suelo de mi oscura habitación y retorcido de risa cual valioso gusano de seda.

- Jason León y su tremendo bigote. El lisérgico y ondulado bigote de Earl me consigue hipnotizar fervientemente por completo cual si fuera un niño loco. No suele gustarme el rollo de abultados bigotes grandes ni bellos vellos insurgentes corporales pero ese bigote... algo tiene ese bigote para apasionarme de una manera tan chispeante.

- Esthan Supleando y su completa risueña inocencia. Menudo tío más frecuentemente estúpido es Randy. No paro de emitir sonoras carcajadas a cada tres palabras que dice. Un hurra por los guionistas.

- La historia es francamente divertida y apoteósica. Como todo buen hijo de vecino vividor sabe, va de un tipo mostachudo (Earl) que comienza a creer de manera casi religiosa en el milagroso Karma. Haz cosas buenas, te pasarán cosas buenas. Así, se dedica a arreglar las numerosas maldades cometidas. Cada capítulo enuncia alguna maldad a arreglar y suelen ser disparatadas historias que son mordaces y oblicuas a más no poder. A este tipo le pasa absolutamente de todo. Es un loco genio de la maldad. Ejemplo: robó un coche rojo a una señora coja o simuló que un tipo era bueno jugando al golf para ganar cervezas... Los guionistas se meten LSD para elaborar estas truculentas y malversadas historias.

- Las dos mujeres protagonistas están increíblemente buenas. Algunos incrédulos risueños y tarados dicen que está más buena Catalina. ¡Que se compren gafas azules oscuro con rico relleno de cerdo silvestre! Joy le da mil vueltas aún faltándole una pierna.

- Secundarios de lujo. el negro Darnell es un tipo muy gracioso, la travesti que trabaja de día o el homosexual amigo de Earl también provocan risas. Pero, aparte de ellos, hay toda una cantidad de subactores de lujo que aparecen. Ejemplo: Giovanni Ribisi o, redoble de tambores, una rubia mujer cuyo nombre es la capital de un país europeo (no es Reikiavik) y su apellido es la de una famosa y lujosa cadena de hoteles, Doña Paris Hilton.

Por último, debo decir que es una serie que usa humor inteligente y, por ello, se ha cancelado porque los idiotas norteamericanos no saben lo que es el humor. Seguid alabando series como Friends o la, poco dada al humor inteligente, The Big Bang Theory. Seguid derribando el humor. Viviremos en un mundo sin cosas graciosas por vuestra culpa.