El cortometraje ofrece una intimidad queda, una presencia susurrante, una cercanía afectuosa, un aleteo vacilante y una brisa suave.
Pero al mismo tiempo se desgarra con un enorme sentido dramático, dibuja sin disimulo la línea del compromiso, exhibe una voluntad de fortaleza y rasga la cortina de la indiferencia con una expresión valiente y eficaz
Su narrativa es fluida, su diálogo conciso pero suficiente, su sentimiento se caligrafía a flor de piel y una puilsión inevitable y sugestiva enreda al espectador en su argumento.
Gran trabajo desarrollado con exquisita pulcritud cinematográfica.