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Voto de rouse cairos:
6
5,8
1.064
Drama. Comedia
Marcos y Susana, dos hermanos que rondan los sesenta, viven en un continuo y cómico enfrentamiento. Sus vidas y sus temperamentos son completamente distintos, pero se ven obligados a afianzar su relación tras la muerte de su madre. Susana, con una personalidad entre avasalladora y delirante, y que siempre hace los bussines en la familia, convence a su hermano Marcos, un orfebre culto y sensible, para que compre una vieja casa en un ... [+]
2 de mayo de 2010
20 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
La trama gira en torno de la oscilante relación entre dos hermanos, interpretados por Graciela Borges y Antonio Gasalla, solterones sin hijos, que han pasado largamente los cincuenta. Esta historia encierra el registro afectuoso de un mundo en retirada. Se nota tanto en el mobiliario como en los peinados y el vestuario de Graciela Borges, que emiten a varias décadas atrás. Un look de sombreros y tailleurs, entre ridículo y decadente, que siempre la actriz lleva con elegancia.
Desde la secuencia inicial, la del consorcio reunido para debatir sobre cómo participarán el fallecimiento de un inquilino, ya aparece la marca de Burman en la sutilidad para manejar el humor negro y la habilidad para captar lo cómico en situaciones cotidianas y reconocibles. Esa secuencia sirve también para presentar a los hermanos y sus diferentes formas de actuar en la vida. De caracteres muy distintos (ella es avasallante y manipuladora; él, sumiso y discreto).
Están unidos por la presencia de la madre y algunos ritos en común. Susana (Borges) está siempre entrometiéndose en la vida de los demás, empezando por su hermano y siguiendo por sus vecinos, a los que les lee la correspondencia o escucha a través de las paredes.
A diferencia de la conducta exterior de su hermana, Marcos (Gasalla) es introvertido pero mucho más profundo. Ha vivido dedicado al cuidado de una madre anciana (Elena Lucena). Tímido y reservado, es muy hábil con artesanías delicadas como la orfebrería. Aunque no se lo mencione directamente, se deduce que ninguno de los dos ha trabajado en forma dependiente, sino vivido de rentas hasta este presente de vertiginoso achicamiento social, tan bien reflejado por el cine argentino en películas como "Cama adentro", donde Norma Aleandro hace malabares para pagar la cuenta de su mucama.
(sigo en spoiler por falta de espacio)
Desde la secuencia inicial, la del consorcio reunido para debatir sobre cómo participarán el fallecimiento de un inquilino, ya aparece la marca de Burman en la sutilidad para manejar el humor negro y la habilidad para captar lo cómico en situaciones cotidianas y reconocibles. Esa secuencia sirve también para presentar a los hermanos y sus diferentes formas de actuar en la vida. De caracteres muy distintos (ella es avasallante y manipuladora; él, sumiso y discreto).
Están unidos por la presencia de la madre y algunos ritos en común. Susana (Borges) está siempre entrometiéndose en la vida de los demás, empezando por su hermano y siguiendo por sus vecinos, a los que les lee la correspondencia o escucha a través de las paredes.
A diferencia de la conducta exterior de su hermana, Marcos (Gasalla) es introvertido pero mucho más profundo. Ha vivido dedicado al cuidado de una madre anciana (Elena Lucena). Tímido y reservado, es muy hábil con artesanías delicadas como la orfebrería. Aunque no se lo mencione directamente, se deduce que ninguno de los dos ha trabajado en forma dependiente, sino vivido de rentas hasta este presente de vertiginoso achicamiento social, tan bien reflejado por el cine argentino en películas como "Cama adentro", donde Norma Aleandro hace malabares para pagar la cuenta de su mucama.
(sigo en spoiler por falta de espacio)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
En esta historia, Burman se arriesga por primera vez con un material ajeno, la novela "Villa Laura" del escritor argentino Sergio Dubcovsky, aunque la trama le permite abordar un tema preferido como son las etapas de la vida, en este caso, el umbral de la vejez.
Niños congelados en el tiempo, hermanos solitarios que sólo cuentan el uno con el otro, ambos tendrán que recomponer sus vidas, cuando el lazo esencial que los vincula desaparece. Y esto implica un abanico de situaciones tragicómicas, que será transitado con sutil ironía y un dejo melancólico.
"Dos hermanos" transcurre como si algo siempre estuviera a punto de estallar- sin embargo no hay desbordes, salvo algún que otro pasaje o algunas líneas de diálogo que pueden sonar un poco retóricas. A pesar de la trama que no es fácil ni tranquilizadora, la calidez de la historia y sus protagonistas logra imponerse. Los aspectos dramáticos son vencidos por la comedia, así como la tragedia de "Edipo Rey" -de la que se representan algunos fragmentos- deviene en efectos cómicos que desembocan en un espectáculo musical al estilo Broadway, reservado como broche de lujo para el final.
Con mucho oficio, evitando excesos, sin carcajadas pero tampoco lágrimas, "Dos hermanos" revela a un director maduro que sabe lo que quiere contar y cómo contarlo, entregando una película básicamente disfrutable.
Niños congelados en el tiempo, hermanos solitarios que sólo cuentan el uno con el otro, ambos tendrán que recomponer sus vidas, cuando el lazo esencial que los vincula desaparece. Y esto implica un abanico de situaciones tragicómicas, que será transitado con sutil ironía y un dejo melancólico.
"Dos hermanos" transcurre como si algo siempre estuviera a punto de estallar- sin embargo no hay desbordes, salvo algún que otro pasaje o algunas líneas de diálogo que pueden sonar un poco retóricas. A pesar de la trama que no es fácil ni tranquilizadora, la calidez de la historia y sus protagonistas logra imponerse. Los aspectos dramáticos son vencidos por la comedia, así como la tragedia de "Edipo Rey" -de la que se representan algunos fragmentos- deviene en efectos cómicos que desembocan en un espectáculo musical al estilo Broadway, reservado como broche de lujo para el final.
Con mucho oficio, evitando excesos, sin carcajadas pero tampoco lágrimas, "Dos hermanos" revela a un director maduro que sabe lo que quiere contar y cómo contarlo, entregando una película básicamente disfrutable.