Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de reporter:
6
Documental Documental que relata los hechos relacionados con el asesinato y secuestro de dos hermanas sucedido en Filipinas en 1997, por el que fue condenado el estudiante de 19 años Paco Larrañaga. (FILMAFFINITY)
18 de junio de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
La realidad supera a la ficción. Lo hemos oído y dicho tantas veces que dicha afirmación casi ha perdido su sentido. Casi se ha equiparado a decir ''Hace buen día'' o ''Qué le vamos a hacer... ¡es la crisis!'' ¿Qué queremos transmitir cuando vomitamos estas frases que ahora parecen haber sido prefabricadas desde el principio? Nada. Simplemente las escupimos para evitar aquello que tanto se teme y se infravalora hoy en día: el silencio. El caso es que, antes de que todo fuera barrido por esta actual ola banalizadota tan característica de nuestros tiempos, el hecho que lo inventado se vea superado por lo real es una señal irrefutable de lo maravilloso... o terrorífico que puede llegar a ser el mundo en el que vivimos.

Es lo mismo que decir, y ahora no es ninguna tontería, que cualquier sueño puede materializarse ante nuestros ojos. Tanto los más dulces, como las más escalofriantes pesadillas, aquellas que hacen que el que las sufre salga ipso facto y gritando de su estado de letargo, para comprobar, con la frente empapada en sudor gélido, que ha vuelto al mundo real... donde obviamente le aguardan amenazas mucho más peligrosas. Para los que no acaben de creerse aquello de que la realidad supera a la ficción, no tienen más que echarle un rápido vistazo a cualquier lista de mejores villanos cinematográficos del año 2007 (la hay, créanme, de hecho, hay una para cada categoría, la que sea). En ella seguro que aparece (y si no lo hace, es que el ranking en cuestión no vale nada) un tal Billy Mitchell.

¿El malvado supremo de la odisea espacial de turno? ¿El jefe mafioso de una organización de narcotraficantes? ¿Un temible mutante con poderes sobrehumanos? Ni una cosa, ni la otra... y mucho menos la última. Billy Mitchell era el encargado de amargarle la fiesta al bueno de Steve Wiebe, un exprofesor de instituto que conseguía batir el record mundial de las ochenteras máquinas arcade de Donkey Kong. Éste último, cuando se disponía a paladear las dulces mieles de su triunfo freak, recibió una llamada telefónica en la que se le comunicaba, con todo el pesar del mundo, que su astronómico registro no podía ser homologado, y que debería hacer gala de sus aptitudes ante una competición oficial que le enfrentaría directamente al poseedor de la anterior plusmarca, quien por supuesto era Billy Mitchell, un maquiavélico y rastrero diablo, que haría todo lo posible con tal de mantener su hegemonía videojueguil en el documental (es decir, estamos en la ambigua y a menudo engañosa categoría de no-ficción) de Seth Gordon 'The King of Kong: A Fistful of Quarters'.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
reporter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow