Lo primero que debo decir es que yo nunca hice la mili, pero soy hijo de militar. Así que esta película desde pequeño siempre me llamó la atención.
Narra la historia de un joven que no quiere hacer la mili, pero vive en una familia con una larga tradición militar. Su obsesión le llevará a buscar diversas fórmulas para poder realizar ese servicio obligatorio que tenía España, y que actualmente es opcional.
La película entretiene y divierte. Uno observa muchas escenas muy bien llevadas, gracias a un humor preciso y a unos personajes únicos. Incluso cualquier personaje secundario aporta su punto, que hace que uno no pueda más que reírse.
No obstante, no todo es comicidad. El film cuenta con algún que otro momento dramático que hace que la risa se corte de golpe.
La película la he visto muchas veces y siempre me ha gustado. Aunque también he tenido siempre la misma opinión sobre el protagonista: su actuación es muy mala. No llego a creerme mucho su interpretación, y resulta todo un poco forzado.
En fin, película divertida con una música mítica de banda, y que unos años después se sorprende uno al ver a actores consagrados siendo unos principiantes en el mundo del cine.